El gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, descarta dialogar con los movilizados. Vecinos y transportistas también quieren cerrar el paso en el camino interdepartamental para exigir a la ABC mejoras en la ruta a Trinidad. Hay tensión

2 de junio de 2022, 4:00 AM
2 de junio de 2022, 4:00 AM

En las últimas dos semanas, la carretera a Beni estuvo expedita solamente durante dos días. Este jueves, se cumplirá la cuarta jornadas de bloqueo en Cuatro Cañadas y la protesta “se masificará” con otros dos puntos de cierre. 

La movilización, vinculada con un pliego planteado por las alcaldías que controla el Movimiento Al Socialismo (MAS) fue rechazada anoche por el Comité Cívico Provincial que se declaró “en estado de emergencia”. En un pronunciamiento de seis puntos, la dirigencia anunció que no permitirá  “el cerco contra Santa Cruz”.

“Los bloqueos iniciados bajo las órdenes de Evo Morales y el anuncio de un cerco a Santa Cruz por parte de los alcaldes afines al MAS, de Amdecruz, solo afectan al sector agroproductivo de la  región, a la economía de los pueblos, al libre tránsito de la población y al departamento de Santa Cruz”, señala la declaración que el presidente del Comité Cívico Provincial, José Ernesto Serrate, presentó anoche tras una reunión  con los representantes de las 15 provincias del departamento.

Así, los cívicos también responsabilizan “al Gobierno central de las pérdidas económicas y daños contra el departamento”. Ante esto, el dirigente afirmó que el estado de emergencia no tiene plazos fatales, pero precisó que la declaración incorpora la exigencia para que “las fuerzas del orden intervengan los bloqueos de acuerdo con lo que establece la Constitución”.

“La Policía debe actuar de la misma forma como cuando el pueblo cruceño exige respeto a sus derechos y reivindicaciones”, se lee en la declaración.

También consideraron que los bloqueos “profundiza la crisis generada por la pandemia y las políticas restrictivas del Gobierno central”, y que “las justas demandas de los pueblos deben ser atendidas por los tres niveles del Estado”. En este contexto, aseguraron que es “una necesidad imperativa” el Censo transparente y un pacto fiscal “con una equitativa redistribución de los recursos, de acuerdo con la necesidad de cada municipio y departamento”.

Por su lado, el gobernador Luis Fernando Camacho volvió a calificar de política a la medida de presión que se cumple desde el lunes en el municipio de Cuatro Cañadas, que está a 100 kilómetros de la capital cruceña. “No puedo dejar de lado la agenda normal que tiene la Gobernación por escuchar caprichos que no tienen una fundamentación real en la que se le pueda dar soluciones. Los convocamos, vinieron y se fueron”, afirmó Camacho ayer.

El bloqueo se instaló en Cuatro Cañadas el lunes con un pliego similar al que planteó el vecino municipio de San Julián: Caminos, regalías y desayuno escolar

El martes, el alcalde de Cuatro Cañadas, Hugo Gutiérrez, llegó al Centro de Educación Ambiental (CEA) para dialogar con Camacho, pero la autoridad no estuvo “por razones de agenda”. Efraín Suárez, asesor de Gestión del gobierno regional, explicó que Camacho “puso a disposición a todo su gabinete” para hallar soluciones.

Gutiérrez y su comitiva se retiraron; él pidió a la autoridad departamental “bajar” a las bases para conversar y, en ese marco, constatar el mal estado en el que están las carreteras de sus comunidades.

Ayer, representantes de los interculturales del municipio y otras entidades sindicales se reunieron para evaluar el fracaso de las conversaciones y decidieron la “masificación” de la protesta. Durante los primeros días de la movilización hubo un solo punto de bloqueo y había rutas alternas, pero no para los camiones de alto tonelaje. El dirigente de las comunidades Interculturales, Juan Pablo Peñaranda, informó anoche que habrá otros dos bloqueos, uno en el puente Banegas y el otro en la ruta vecinal que estaba siendo usada como ruta alternativa. “Queremos que el gobernador Camacho nos escuche y esta medida es indefinida”, reclamó.

Pero, ayer también surgió otra demanda desde los sectores que rechazan la medida de presión, pues se anticipan movilizaciones, incluso con bloqueos, para pedir al gobierno del presidente Luis Arce la mejora de la carretera de la red vial fundamental que une el departamento de Santa Cruz con Beni, la región que también sufre los embates de estas protestas porque no recibe gasolina, diésel ni Gas Licuado de Petróleo (GLP), además de los alimentos e insumos de primera necesidad.

Gladys Chino, presidenta del Control Social y dirigenta de la Federación de Juntas Vecinales de Cuatro Cañadas cuestionó al alcalde Hugo Gutiérrez por llevar adelante la protesta sin el consenso de todas las organizaciones. Eso sí, reconoció la legitimidad de varios de los pedidos, especialmente el vinculado con la demanda de nuevos caminos y el mantenimiento de las rutas que conectan a las comunidades.

Por eso señaló que existe preocupación de varios sectores, incluidos los transportistas por el estado de la carretera a Beni, que pertenece a la red fundamental a cargo de la estatal Administradora Boliviana de Carreteras (ABC).

“La gente puede reaccionar si es que el alcalde sigue con esta posición de entercarse y querer las cosas a la fuerza. Ya me han llamado para decirme que el lunes puede  instalarse un nuevo bloqueo, pero en contra del Gobierno nacional para exigir la doble vía que es el tramo Santa Cruz -Trinidad”, dijo.

Señaló que esta semana hubo un accidente de tránsito en el que falleció una joven dirigente gremial, que consternó a toda la población, precisamente por el estado en el que está la ruta que es de tuición del Gobierno nacional. “El transporte del bloque chiquitano se está molestando porque es un gran perjuicio para los transportistas”, puntualizó la dirigente.

La concejala Miriam Kawasiri Sánchez, de la agrupación Unidos, también explicó que, especialmente, el sector de los transportistas está exigiendo que se mejore esa ruta troncal. “Los transportistas más bien están queriendo reclamar por la carretera principal que es competencia del Gobierno nacional y que cuando eso se tome en cuenta ellos sí van a salir a apoyar”, dijo.

Reveló que ayer hubo desacuerdos entre las organizaciones sociales de Cuatro Cañadas porque “no todos quieren continuar con el bloqueo”. Incluso, reveló que el martes, en la comitiva que acompañó al alcalde Gutiérrez, hubo personas que querían sentarse a dialogar con los técnicos para resolver las demandas y resolver el conflicto. “Estamos escuchando en nuestra población que están obligando a participar a través de multas. Cuando hay esas presiones, estamos viendo que difícilmente se consolide el bloqueo”, afirmó la autoridad.

El comandante departamental de Policía, Erick Holguín, dijo ayer que no intervendrá la protesta hasta que no se agote el diálogo. “Hemos tenido otros bloqueos en El Torno, en La Guardia, en Montero, en los que la Gobernación no ha preguntado por qué no mandábamos uniformados”, apuntó.

Tensiones
La zona rural y urbana de Cuatro Cañadas no están unidos frente a la medida de presión. Los transportistas reclaman mejoras en ruta, pero al Gobierno de Luis Arce.

Bloqueo
Las organizaciones afines al MAS masificarán los puntos de bloqueo. Hasta ayer fue sólo un punto y ahora habrán tres. El gobernador Luis Fernando Camacho no irá a Cuatro Cañadas para dialogar.