Se movilizan contra el TSE, pero arremeten contra el Gobierno. Dicen que el gobierno de Áñez busca tapar una pésima gestión para abastecer al país de insumos médicos. El Gobierno les recuerda que el MAS invirtió en canchas, satélites y palacios, no en la salud

7 de agosto de 2020, 12:23 PM
7 de agosto de 2020, 12:23 PM

A través de un comunicado, la Central Obrera Boliviana (COB) y el denominado Pacto de Unidad, alertaron a organismos defensores de los DDHH y a la comunidad internacional sobre el anuncio del gobierno de Jeanine Áñez de “reprimir nuevamente al pueblo movilizado”.

“Alertamos a la comunidad internacional y a los organismos de DDHH que hoy los ministros (de Gobierno, Arturo Murillo; y de Defensa, Fernando López amenazaron con reprimir nuevamente al pueblo boliviano que se encuentra en paz movilizado por sus derechos a la vida, salud, alimentación, educación, trabajo y democracia”, se lee en el documento.

La COB y el Pacto reiteraron que instruyeron a las organizaciones movilizadas que permitan el paso de ambulancias, medicamentos, oxígeno y otros insumos para combatir la pandemia. “El pueblo movilizado está comprometido con la salud y la vida”, recalca el comunicado.

Sin embargo, videos difundidos por el Gobierno, captados en un sobrevuelo realizado por el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, en el departamento de Cochabamba, demuestran que hay centenares de camiones y cisternas que están parados en las rutas.

Los sectores afines al MAS protestan con los bloqueos no en contra del Gobierno, sino para presionar al Tribunal Supremo Electoral (TSE) para que retroceda en una decisión, y que las elecciones se realicen el 6 de septiembre y no el 18 de octubre. Sin embargo, el dirigente cocalero Andrónico Rodríguez advirtió que más allá de la fecha, el MAS no permitirá que el órgano electoral  suspenda la personería jurídica, luego de que su candidato Luis Arce Catacora revelara encuestas por medios de comunicación, lo que es considerado un delito electoral grave y tiene esa sanción, como ocurrió en Beni hace cinco años, con UD.

El comunicado no menciona al TSE, y advierte que el Gobierno sigue con una campaña de mentiras que tiene el objetivo de “tapar su incapacidad”. Advierte que la falta de oxígeno, medicamentos, pruebas, respiradores y equipos de bioseguridad, “la padecemos desde hace meses por una pésima gestión que atenta contra la vida del pueblo”.

El ministro de la Presidencia, Yerko Núñez, aseveró que la crisis sanitaria que enfrenta el país se agrava no por lo hecho en los últimos meses, sino porque durante el Gobierno de 14 años de Evo Morales se gastaron los recursos en canchas, satélites inservibles, palacios, y se dejó de lado la infraestructura para salud.

Mientras tanto, a través de su cuenta de Twitter, el expresidente y jefe de campaña del MAS, Evo morales, advirtió que “el gobierno de facto tiene listo un proyecto de decreto supremo para la intervención de las FFAA y de la Policía en los bloqueos de caminos de la COB y del Pacto de Unidad que protestan por la tercera suspensión de elecciones. El uso de la fuerza provocará una masacre pero al régimen no le importa”. De esta forma, confirmó que pese a la emergencia sanitaria, no ordenará el repliegue de los sectores. Por el contrario, alerta de que enfrentarán a las fuerzas del orden.

En el post, el exmandatario refugiado en Buenos Aires, Argentina, mostró un decreto fechado el 6 de agosto. En el artículo 2 señala supuestamente que las FFAA y la Policía, en cumplimiento de sus atribuciones constitucionales coordinarán el desarrollo de acciones conjuntas para la conservación del orden público y la paz social, a fin de precautelar el derecho a la vida, la salud y la integridad de los ciudadanos, estantes y habitantes en todo el territorio nacional.

El supuesto proyecto de decreto advierte también que la coordinación de las acciones conjuntas se realizará en todo el territorio y la participación de las FFAA será a partir de la vigencia del decreto hasta el restablecimiento del orden público y la paz social. 

Sin embargo, y pese al anuncio de los sectores sociales, los bloqueos han impedido el paso de insumos claves. Eso se reflejó en la tragedia ocurrida ayer en el hospital Boliviano Holandés de El Alto. Los ocupantes de un cisterna tuvieron que levantar las piedras y fueron obligados a volver a ponerlas en el camino, para trasladarse desde una planta productora ubicada en Ventilla, a la salida a Oruro, hasta el centro médico en la urbe alteña. El viaje en condiciones normales hubiera tardado menos de una hora. Pero, por el bloqueo, el periplo duró todo el día y la noche del 6 de agosto.

Cuando la cisterna por fin llegó al hospital, la falta de oxígeno había causado ya un desenlace fatal. Una madre de 27 años de edad, que horas antes tuvo a su bebé prematuro, falleció por falta de oxígeno y dejó al bebé en la orfandad,así como también a otros dos niños.