Hay más de 15.000 familias golpeadas por las lluvias en 86 municipios, de los cuales nueve tienen declaratoria de desastre y cuatro de emergencia. En Cobija el nivel de las aguas se mantiene elevado. En Guanay sufren por el desborde del Mapiri

28 de febrero de 2024, 4:00 AM
28 de febrero de 2024, 4:00 AM


“Siempre es duro dejar lo que uno con tanto esfuerzo logró tener”, lamenta Martha, que este martes se vio obligada abandonar su vivienda en la ciudad de Cobija. “El agua ya subió un metro dentro de mi hogar y no queda más que dejar que las cosas se echen a perder”, agrega resignada mientras se desplaza en una lancha, en la que carga platos, atadijos de ropa, documentos y a su perro. Parece un río, pero son las calles del barrio Puerto Alto.

Sus cuatro hijos, hermanas y padres lograron salir antes que la zona quede completamente anegada, pero ella tenía la esperanza de que el agua descienda. “No fue así. Decían que iba a bajar, pero sigue subiendo”, comenta.
Con tristeza, Martha se dirige hasta la casa de un familiar que les está dando cobijo. Como ella, más de 500 familias han abandonado sus casas por los efectos trágicos de los desbordes.

En el país los daños suman. En lo que va del año, cerca de 16.000 familias han sido golpeadas por las inundaciones, deslizamientos y desbordes. De estas, 9.924 son afectadas (con daños menores) y 5.916 damnificadas (con daños severos). El desastre deja, además, 418 viviendas afectadas y 786 completamente destruidas. 

En Cobija, las aguas del río Acre no bajan y avanzan cubriendo nuevos barrios. La mayoría de los afectados busca refugio en viviendas de familiares, mientras otros llegan a los centros de evacuación dispuestos por las autoridades.
Una vecina, que fue entrevistada por TV Universitaria, cuenta que llevan tres días sufriendo por la acumulación de agua. Se aferra a su fe para que la emergencia pase. “Pedimos a Dios porque solo Él nos puede ayudar en estos momentos. La situación de nuestro barrio La Cruz es grave. Son tres días que venimos sufriendo las consecuencias de esta llenura. Nuestros vecinos ya han sido afectados. La Iglesia ya está siendo afectada, mi hogar también”, dice. 

En medio del agua, otra mujer se da modos para hacer un relevamiento de los daños con la esperanza de recibir ayuda y ser tomada en cuenta en los planes de reconstrucción.
“Hay 33 familias que están en casas de familiares. Hay como cinco familias que no han podido sacar sus cosas porque el agua los sorprendió”, señala. 

Situación crítica
El viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, advirtió que el país se enfrenta a la temporada más crítica de lluvias, ya que el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) emitió dos alertas rojas por precipitaciones para cinco municipios de La Paz (Achocalla, El Alto, Mecapaca, La Paz y Palca) y para tres municipios de Pando (Bolpebra, Cobija y Porvenir). Las alertas advierten de precipitaciones hasta este viernes. 

De acuerdo con el reporte oficial, hasta la fecha 86 municipios del país han sido golpeados por las lluvias, pero solo nueve tienen declaratorias de desastre y cuatro de emergencia. Ante esta situación, la autoridad exhortó a los gobiernos municipales y regionales a activar los mecanismos para que el Gobierno nacional pueda intervenir.

Las muertes suman 40 y hay dos desaparecidos. Se analizan las circunstancias de otras muertes en Santa Cruz para determinar si son víctimas de las lluvias.
Los departamentos más afectados son La Paz, Potosí y Cochabamba, según el reporte del Viceministerio de Defensa Civil.

En las regiones
El alcalde de La Paz, Iván Arias, informó que este miércoles se reunirá el COED, donde se dará un informe de las emergencias que se están atendiendo.
Informó que las cuencas de los ríos Choqueyapu, Orkojahuira e Irpavi reciben a diario 10 millones de turriles de aguas que salen de las represas de la ciudad y que incrementa su caudal.

La Gobernación también moviliza maquinaria para asistir a los municipios afectados por las lluvias en el departamento. Uno de ellos es Palca, donde se está trabajando desde este lunes en el encause del río en la comunidad de Choquecota.

Las inundaciones en el municipio de Guanay, que ocurren con mayor intensidad desde el pasado domingo, dejaron 7.400 familias afectadas y 2.700 familias damnificadas, confirmó el alcalde de ese municipio, Víctor Ticona.
Además, según la autoridad municipal, hay viviendas desplomadas y la tragedia afecta a al menos 45 comunidades debido al desborde del río Mapiri.

La Gobernación de Potosí llevó ayuda al municipio de Colcha K, donde hay 200 familias damnificadas por las fuertes lluvias y granizadas del fin de semana. Las autoridades realizan gestiones para reconstruir las casas derrumbadas a través de la Agencia Estatal de Viviendas.

En Cochabamba, se trabaja en la limpieza en la zona de Laquiña, en el municipio de Sacaba. Los pobladores siguen en la brega de recuperar algunas de sus pertenencias en medio del lodo, luego que la mazamorra afectó viviendas, vehículos y sembradíos.

Clases
El ministro de Educación, Édgar Pary, informó que nueve unidades educativas de La Paz, Pando y Potosí se vieron obligadas a suspender clases debido a las inundaciones, desbordes de ríos, mazamorras y deslaves.
“En el departamento de Pando fueron afectadas las unidades (educativas) Héroes de la Distancia y Sofia Calpiñeiro por el desborde del río Acre. Y estamos en proceso de organizar para pasar las clases en otras infraestructuras”, dijo Pary.

En el municipio de Tipuani fueron afectados tres establecimientos escolares. En Guanay se inundaron otros tres.
En Colcha K se suspendieron las clases del nivel primario, porque la infraestructura educativa se inundó.
El ministro informó que las actividades estarán suspendidas temporalmente hasta que el desastre no implique riesgos.