El ejecutivo campesino calificó de “cabrones” a los opositores políticos por las protestas que se avecinan, como la del paro del 11 de octubre

5 de octubre de 2021, 18:45 PM
5 de octubre de 2021, 18:45 PM

Una conferencia de prensa fue el marco para que el máximo ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), Eber Rojas, lanzara la advertencia de una posible "guerra civil" al realizar la evaluación de las reuniones de cívicos en Potosí y la reunión de las organizaciones en Santa Cruz.


“Veremos las acciones de la derecha y veremos la rearticulación, dónde quieren llegar, cómo quieren hacer y nosotros estamos predispuestos, si ellos dicen, si ellos quieren guerra civil, no hay problema, estamos preparados y tenemos instrumentos propios para defender al Estado plurinacional de Bolivia”, dijo Rojas a los periodistas, sin recordar que las amenazas de guerra civil siempre salieron de filas masistas desde los conflictos de 2019.


El 1 de octubre, los presidentes de los comités cívicos del país se reunieron en la ciudad de Potosí en donde determinaron participar de las marchas de protesta del 10 de octubre e impulsar un paro nacional el 11 de octubre. El lunes los cívicos convocaron también a las organizaciones sociales y partidos políticos donde ratificaron las medidas y emitieron un pronunciamiento con 13 demandas.


En 2019, antes y después de la renuncia de Evo Morales a la presidencia, las organizaciones de El Alto, principalmente, salieron a las calles con la consigna, “ahora sí guerra civil” y amenazaban con ese estribillo a la ciudad de La Paz.


Eber Rojas se estrelló contra las dos reuniones y dijo que su organización no permitirá ninguna marcha en las nueve ciudades capitales y advirtió con movilizar a todos sus afiliados. Asimismo, adelantó que ellos participarán del denominado “whiphalazo” que impulsa el expresidente, Evo Morales.


“Desde aquí, las organizaciones no vamos a permitir ninguna movilización de la derecha en nuestro país, en los nueve departamentos nosotros repudiamos totalmente lo que están queriendo rearticular y gestar la división de nuestro país”, advirtió el líder campesino, quien se puso su montera del norte de Potosí que denota el estado de guerra de los ayllus potosinos.


Según las palabras del ejecutivo de la Csutcb, Luis Fernando Camacho, Carlos Mesa o Jorge Tuto Quiroga, no son bolivianos y deberían irse del país. Al gobernador de Santa Cruz le dijo que debe ir a La Paz a declarar por el caso de supuesto golpe de Estado; al expresidente Carlos Mesa le dijo que no asesore mal a Camacho; y a Quiroga le dijo que no se metiera en nada.


“Ustedes no son bolivianos, ustedes son extranjeros, nosotros somos dueños de la patria y vamos a defenderla hasta el último, si quieren declarar guerra civil que declaren, que digan de una vez, nosotros vamos a enfrentarlos no con las armas que ellos han traído de otros países, si no con nuestras propias armas que tenemos, el chicote, las monteras, las guaracas, vamos a defendernos”, lanzó.


"La Csutcb va a derramar sangre, ya estamos calientes contra esos cabrones que quieren nuevamente dividir a Bolivia, no vamos a permitirlo”, espetó.


Adelantó una reunión de todo el Pacto de unidad para el miércoles donde tomarán otras determinaciones contra los partidos opositores. Dijo que todas las organizaciones están preparando la movilización del 12 de octubre.