En abril de 2016 Evo Morales promulgó el decreto 2731 que dio nacimiento a la dirección de redes sociales, fue el nacimiento de los guerreros digitales

28 de febrero de 2023, 20:59 PM
28 de febrero de 2023, 20:59 PM

Al menos cuatro centros de trabajo de los denominados “guerreros digitales” en tiempos de Evo Morales fueron descritos por algunos exfuncionarios del Estado que trabajaron en esos  bunkers que estaban distribuidos por la ciudad de La Paz y eran dependientes de tres ministerios. En el MAS afirman que en ese entonces los guerreros digitales eran "patriotas" y funcionarios voluntarios.


“Eran servidores públicos voluntarios, cuántos servidores públicos tendrá el Estado en los ministerios, cada servidor público ahí podía decir qué obras se estaban haciendo en Bolivia, en los departamentos, en los municipios; entonces no había un uso, un dinero exclusivo para pagar; ellos hacían un trabajo voluntario como guerreros digitales”, deijo el diputado Renán Cabezas (MAS), al justificar a los guerreros.


Tres de estos “servidores voluntarios” describieron los lugares de trabajo y relataron que había una oficina legal, amparada en un decreto y otras tres que hacían trabajo paralelo, aunque quedó claro que en las cuatro oficinas se trabajaba en función de los pedidos del Ejecutivo.


La oficina “legal” amparada en el decreto 2731 funcionaba en el piso 7 del edificio Herman, en pleno centro de la ciudad de La Paz, como Dirección Nacional de Redes Sociales que dependía directamente del ministerio de la Presidencia y sus directores en los tres años de funcionamiento sumaron una decena, según uno de los exfuncionarios.


Otro bunker funcionaba al final de la avenida Sánchez Lima, en el pasaje Villegas, a media cuadra de la ANH. “La Casita” era el nombre con el que se conocía a este espacio y dependía del ministerio de la Presidencia, por el vínculo entre Juan Ramón Quintana y el director de la ANH, Gary Medrano, ambos de formación militar. También era dependiente del Ministerio de la Presidencia.


Otro de los centros estaba en el subsuelo del teleférico Celeste y fue intervenido durante el gobierno de Jeanine Áñez y dos de sus responsables  fueron detenidos. Este centro estaba en predios del Ministerio de Obras Públicas, pero dependía del Ministerio de Gobierno y era el más sofisticado de los cuatro. Solo en una habitación estaban instaladas 25 computadoras Apple.


Según la versión de los exfuncionarios, el cuarto bunker estaba en el piso 21 de la Casa Grande del Pueblo, ahí trabajaba personal venezolano y cubano, quienes desaparecieron después de los conflictos de 2019 y los bolivianos que se hicieron presentes declararon que su trabajo era “publicidad en redes sociales”, que era el denominativo de su labor. Dependían del Ministerio de Comunicación.


Las contrataciones no se hacían directamente, en todos los casos les asignaban el ítem de un determinado ministerio o entidad descentralizada, pero debían trabajar en uno de los cuatro bunkers. Se escogía personal cono conocimiento en el manejo de redes sociales, diseñadores gráficos o ingenieros de sistemas.


Para el diputado Cabezas todo este esquema era “voluntario” y estas personas solo se dedicaban a replicar los logros de gestión del Gobierno de Evo Morales.


“Eran para informar al pueblo boliviano, para decirle qué obras, qué proyectos y programas estábamos haciendo en cada región, para contrarrestar las mentiras que utilizaba la oposición como hasta ahora”, justificó el diputado ‘evista’.