Director Nacional de Epidemiología no ve conveniente que se declare cuarentena rígida en Santa Cruz
(VEA EL VIDEO) Pide tomar como dato la tasa de letalidad y no el índice de contagios. Autoridades del Sedes y del municipio no descartan la medida como una posibilidad
¿Debe decretarse una cuarentena rígida en Santa Cruz de la Sierra para frenar los contagios y dar un alivio al personal sanitario? Autoridades del municipio cruceño y de la Gobernación no descartan analizar este tema en la próxima reunión del Comité Operativo de Emergencia Departamental (COED), prevista para el jueves o viernes.
No obstante, el director nacional de Epidemiología, Freddy Armijo, no ve conveniente declarar cuarentena rígida en Santa Cruz porque, pese a que los contagios han aumentado, la tasa de letalidad del Covid-19 es baja.
Indica que, antes de aprobar medidas extremas, propone discernir si el indicador al que se debe atender como prioridad es el incremento de los contagios o el de la tasa de letalidad del Covid-19.
Para el especialista, las autoridades regionales deben asumir como principal estadística la tasa de letalidad y mortalidad vinculada a la enfermedad.
En este caso, Bolivia se mantiene con una de las tasas más bajas en Latinoamérica, por lo cual no considera oportuna la disposición de una cuarentena rígida.
Armijo es consciente del "incremento inusitado" de casos en Santa Cruz, aunque también contrasta con el resto del país, donde "no hemos llegado a situaciones similares".
El director nacional de Epidemiología participó, junto con autoridades del municipio, en una inspección a los centros de diagnóstico de la red de salud Este.
Durante la mañana, tanto el secretario municipal de Salud, Roberto Vargas, como el director del Sedes, no descartaron la posibilidad de que se declare cuarentena rígida. Para Vargas, se trata de una medida que "ofrece una pausa al sector salud" ante el elevado número de profesionales contagiados.
Armijo recuerda que una medida de restricción en la circulación conlleva otras consecuencias para la población y puede afectar la economía de las familias bolivianas, pues necesitan trabajar y generar ingresos para comer.
