La Policía capturó a cuatro personas vinculadas a los secuestros. Hacían un seguimiento a sus víctimas y pedían rescate por más de $us 1 millón

19 de mayo de 2023, 8:38 AM
19 de mayo de 2023, 8:38 AM

López y Rengipo son los apellidos de las familias que venían cometiendo una seguidilla de secuestros en la zona del Trópico de Cochabamba, exigiendo a los familiares de sus víctimas el pago de 1 millón de dólares para dejarlos en libertad. Según la Policía, los dos clanes familiares fueron desarticulados luego de dar con el paradero de cuatro de sus integrantes y descubrir sus escondites donde llevaban a las víctimas.

En las últimas semanas, tres fueron los casos de secuestros que se conocieron públicamente, dos de las víctimas supuestamente vinculadas al narcotráfico y uno extorsivo a una familia dueña de un boliche con el fin de sonsacarle dinero.Los integrantes de clanes familiares dedicados al secuestro en Cochabamba /APG Noticias.

El viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, indicó que están seguros que era una estructura familiar la que cometía los secuestros en el Trópico de Cochabamba, se organizaban para poner en la mira a su víctima y así conseguir dinero. 

"Tenemos la convicción de que siete de ocho eventos (secuestros)  han sido cometidos por estos individuos que conformaban una mezcla de dos clanes familiares. Estas personas conocen perfectamente la región y tienen una distribución de roles y han actuado de manera uniforme para cometer los secuestros", explicó Aguilera y aseguró que producto de los operativos y captura de cuatro personas, la organización de secuestradores ha sido desarticulada.

Los cuatro aprehendidos fueron identificados como Nabor López Herbas, Alfredo Rengipo Mérida, Remberto López Herbas y Mateo Rengipo Segovia: "Son los autores de los secuestros y han participado en siete de los ocho casos que se presentaron en el Trópico", recalcó el viceministro.

Antes de la captura de los cuatro secuestradores, las víctimas y familiares no cooperaban con las investigaciones que activó la Policía; sin embargo, después de la captura de los sujetos, empezaron a aparecer denuncias de otros secuestros, llegando a conocerse al menos ocho casos hasta el jueves, 18 de mayo.

"Una vez que estos individuos fueron aprehendidos, hemos recibido una infinidad de denuncias que ratifican las hipótesis que, en base a la inteligencia y acopio de información de la Policía, permiten afirmar que son los responsables de los hechos", dijo.

Hallaron armas en poder de los secuestradores/Foto: Viceministerio de Régimen Interior.

SOBRE LAS VÍCTIMAS

Aguilera indicó que no todas las víctimas estaban vinculadas a casos de narcotráfico, sino que los secuestradores hacían un seguimiento a las familias que ostentaban tener dinero o podían hacer el pago por un rescate, hecho que motivaba a convertirlas en sus próximos secuestrados.

En algunos casos los secuestros se dieron por conflictos en temas vinculados con el narcotráfico, por el pago fallido del tráfico de drogas o hechos similares. El viceministro ratificó que el pago de los rescates no fue realizado, por lo que insta a las familias a no 'normalizar' los secuestros y ante un hecho similar denunciarlo a tiempo antes de poner en riesgo la vida de las personas.

Explicó que el secuestro en Yapacaní, de un hombre de apellido Siancas, fue producto de una operación vinculada al narcotráfico ya que este hombre junto a otro, de nombre Mario, traficaron droga desde Perú hacia Paraguay, recibieron el dinero y no lo entregaron a su destinatario final, por lo que el dueño de la mercadería organizó un grupo en Yapacaní para realizar el plagio.

Hasta ahora se desconoce el paradero de Siancas. La Policía sigue pistas de un número de celular de origen de Perú que es manipulado desde Santa Cruz, el mismo que estaría siendo utilizado para negociar el rescate del secuestrado.

Por otra parte, informó que el secuestro de un joven de 27 años en Shinahota fue producto de la ostentación de dinero que los secuestradores observaron, cometieron el secuestro viendo la posibilidad económica de la familia; sin embargo, el caso fue denunciado por el padre y finalmente los captores dejaron libre a la víctima.

"Los casos de secuestros no necesariamente son por transacciones de drogas, estos sujetos están organizados y tiene un perfil criminal dedicado al secuestro, frialdad y egocentrismo y hacen de su especialidad el secuestro. No podemos tolerar que esto se normalice, se debe denunciar y no transar", acotó.