El partido de Evo Morales estaba acostumbrado a ganar en La Paz y Cochabamba con más del 50% de votos. Hoy, según la encuesta de CiesMori, no pasa del 35% en varios departamentos del occidente

9 de septiembre de 2020, 8:01 AM
9 de septiembre de 2020, 8:01 AM

El Movimiento Al Socialismo (MAS) tenía como bastión electoral varios departamentos del occidente. Acostumbraba ganar con buen margen de votos. Ahora, si bien sigue al frente en varias regiones no lo festeja como lo hacía cuando estaba en función de Gobierno. 

En La Paz, Cochabamba, Oruro, Chuquisaca y Potosí el MAS no supera el 30%, según la encuesta de CiesMori. A estas alturas en otros procesos electorales se colocaba encima del 50%, que permitía mayor presencia en la Asamblea Legislativa Plurinacional. 

Expertos ven que el partido de Evo Morales no logró conquistar a la clase media de las capitales departamentales, pero también observan que sus rivales, con sus alianzas, no le dan pelea en el área rural.

La Paz y Cochabamba son plazas importantes del occidente. La encuesta de CiesMori detalla que en el departamento paceño el presidenciable del MAS, Luis Arce, alcanza el 35,5%; le sigue Carlos Mesa, de Comunidad Ciudadana (CC) con 17,6%, y tercera está Jeanine Áñez, candidata de Juntos, con el 4,2%. En Cochabamba el panorama es similar. En esta zona el MAS tiene 35,1%, CC llega a 21,5% y Juntos 5,8%.

En las elecciones generales de 2019, que fueron anuladas por denuncias de fraude, el MAS dominó en estas regiones. En La Paz alcanzó el 53,16% y en Cochabamba llegó al 57,52%. 

El apoyo al partido de Morales se registró, sobre todo, en el área rural de estas zonas.

En el MAS miran este sondeo con tranquilidad, pero también hay algo de alegría por el dominio en seis departamentos (La Paz, Oruro, Potosí, Pando, Cochabamba y Tarija).

No está dentro su análisis el porcentaje en estas regiones, que no superan el 50% de preferencia como antes lo había hecho en varios procesos electorales. El vocero del MAS, Sebastián Michel, explica que el partido de Evo Morales ahora se enfoca en ganar el “voto oculto” en base a propuestas de gobierno.

“El MAS recibe con mucha humildad (estos resultados), pero también con alegría, ya que después de un año de acusaciones de terrorismo, de violencia, de narcotráfico y 40 días de una guerra sucia, la población ha dado un mensaje, no solo en esas regiones, sino en todo el país de que quiere debatir propuestas, cómo salir de la crisis y cómo salvar nuestra economía. Hay mucho indeciso y ellos están cansados de lo que está pasando”, destacó Michel.

La campaña del MAS

Mientras, el diputado Franklin Flores, que es coordinador de campaña del MAS en La Paz, consideró que los resultados de la encuesta de CiesMori no reflejan el voto de la población a favor del partido de Evo Morales, ya que a su parecer no se toma en cuenta la preferencia electoral a favor del MAS en el área rural, donde por muchos años esta organización tuvo apoyo mayoritario.

“Sabemos que las encuestas se basan en el área urbana, no se toma en cuenta la decisión de la población del campo, donde el MAS tiene apoyo mayoritario. 

En el departamento de La Paz existen mejores resultados, ya que en El Alto, en varios municipios y parte de la ciudad de La Paz apoyan a nuestros candidatos (Luis Arce y David Choquehuanca). Entonces, tenemos la visión de que la votación será mayor a un 50%, como lo venimos haciendo desde 2005”, remarcó Flores.

En CC aseguran que el MAS está en picada en varias regiones, aunque admiten que el partido de Evo Morales todavía tiene una fuerte presencia electoral en occidente. 

Ricardo Paz, jefe de campaña de CC, está convencido de que el único candidato presidencial que puede hacer frente al MAS es Carlos Mesa, que ahora se ubica segundo en varios sondeos. El experto ve que el apoyo se reflejará en ciudades capitales, pero también harán esfuerzos para llegar al campo con sus propuestas.

“El MAS es una fuerza política que está en bajada, no solo en estas regiones, sino a escala nacional. El MAS está disminuyendo, pero continúa siendo muy fuerte y tiene todavía buenas posibilidades electorales. Como segundo dato, el único que le puede ganar al MAS, la única opción, la única alternativa política es Comunidad Ciudadana (CC) y Carlos Mesa. 

Un tercer dato es que los demás contendientes no tienen opción de ganar esta elección, por lo tanto, Juntos y Creemos son funcionales a la estrategia del MAS de dividir el voto”, consideró Paz.

En Juntos no hay mucha confianza en la encuesta realizada por CiesMori. El vocero de la alianza, Edwin Herrera, está confiado en que la presidenta Áñez ganará las elecciones del 18 de octubre y aseguró que el MAS está en picada debido a que en esta ciudad se terminó con la lucha del año pasado que acabó con la renuncia a la Presidencia de Evo Morales. El también candidato a senador, a diferencia de lo que dicen las encuestas, dijo que el MAS no pasará del 20% de los votos en el país.

“Primero, no confiamos en estas encuestas. Esta misma empresa, el año pasado dio como ganador al MAS con más de diez puntos, pero no fue así. Nosotros estamos confiados en que los resultados serán diferentes, no solo en La Paz y Cochabamba, sino en todo el país. 

Lo que vemos es que el MAS descendió mucho y eso no se refleja en esta encuesta. La población está cansada de bloqueos y muertes en plena pandemia (por coronavirus) y de las acusaciones por pedofilia de su líder (Evo Morales). Además, en varios puntos del país existe mucho apoyo a Jeanine Áñez”, destacó Herrera.

La alianza Creemos enfoca su campaña en todo el territorio nacional. La vocera de esta organización, Roxana Lizárraga, aseguró que Luis Fernando Camacho mantiene el “respaldo ciudadano” de la población de La Paz que apoyó al exlíder cívico en las jornadas de protesta de octubre y noviembre del año pasado. La también candidata afirmó que en las elecciones del 18 de octubre se replicará el apoyo que tuvieron Camacho y Marco Pumari cuando era dirigentes cívicos.

“Fueron Luis Fernando Camacho y Marco Pumari quienes sacaron desde la ciudad de La Paz al dictador Evo Morales. Ellos mantienen ese apoyo ciudadano, ese apoyo que se vio en las calles de La Paz, de Potosí, de Cochabamba, de Santa Cruz. El MAS está en su último suspiro, está en caída y la alianza Creemos sube cada día más”, dijo Lizárraga.

El análisis

El politólogo Jorge Richter observó que los rivales del MAS en occidente dispersan el voto, lo que favorece a los postulantes masistas. El analista también consideró que el voto rural, que no se ve reflejado en varias encuestas, puede dar mayor ventaja al MAS. 

“El sector de la centroderecha multipolar reparte su voto entre la clase media y el sector urbano y ahí tiene votos extremos y blandos que se reparten entre todos y hay lógicas diferentes para observar la composición del voto. En la izquierda, la lógica es unipolar, está todo agrupado en torno al Movimiento Al Socialismo, entonces esto le ofrece una ventaja de poder”, dijo.

Mientras, el politólogo Ludwig Valverde aseguró que la definición electoral en el eje central estará en los votos de la denominada clase media. El experto señaló que ese segmento refleja el voto nulo y de indecisos que señala la encuesta de CiesMori. 

“La clase media jugará un rol muy importante, no solamente por su presencia y la cantidad demográfica que en este momento existe, en el país 7 de cada 10 bolivianos viven en las ciudades, sino porque muchas de las razones que explicarían la caída de Evo Morales se encuentran justamente en la clase media”, opinó.

Por su parte, el politólogo Marcelo Silva consideró que el descenso de apoyo al MAS en el occidente se debe a las determinaciones que asumieron sus sectores aliados, como los bloqueos de vías en plena pandemia. Pero, además, el analista remarcó que las acusaciones contra Evo Morales por estupro también afectan a la campaña del MAS.