Evo ahora observa el bono Juancito Pinto; revela que Arce no lo escuchó y que los ministros no responden

Evo Morales ahora observa la logística del pago del bono Juancito Pinto. Revela que el presidente Luis Arce no escuchó sus sugerencias y que los ministros no responden a notas enviadas, razón por la que hace un reclamo público.

El jefe del Movimiento Al Socialismo (MAS) contó que ya la gestión pasada conversó con el primer mandatario, le dijo que el beneficio debía ser distribuido por las Fuerzas Armadas (FFAA) y pese a un compromiso, eso no sucedió.

“El año pasado, días antes de que comience el pago, yo dije al hermano presidente (Luis Arce): 'tengo información de que están reclamando los padres de familia, porque se pagará en los bancos'. Me dijo: 'no, se pagará en las áreas rurales en las escuelas', a los dos días comienza, solamente en los bancos”, indicó el dirigente cocalero.

Junto a representantes del Consejo Educativo del Trópico de Cochabamba, el exmandatario también dijo que enviaron una nota al Ministerio de Educación, pero que tampoco hubo respuesta.

Su conferencia de prensa:

“Hay una preocupación, un pedido, y como enviamos una carta y como no hay respuesta, ahora públicamente pedimos al hermano presidente, sobre todo a los ministros de Educación y Presidencia, que puedan resolver. Qué bueno sería que como antes las Fuerzas Armadas fueran escuela por escuela o bancos móviles, aunque no sé si les pueda alcanzar”, acotó.  

Por segundo año consecutivo el bono será pagado por el sistema financiero. En la pasada gestión se registraron inconvenientes por la logística, aunque ahora se habilitarán mecanismos de consulta para evitar problemas.

“La semana pasada el consejo educativo se acercó a la Seis Federaciones, enviamos una carta al ministro de Educación, para pedir que el bono se pague en las escuelas y no hemos tenido ninguna respuesta, eso preocupa”, recalcó Morales.

Detalló que muchos padres de familia de área dispersa deben trasladarse como pueden a las poblaciones donde hay entidades bancarias, gastando pasaje, perdiendo tiempo, reduciendo casi al mínimo el beneficio económico para sus hijos, que llega a 200 bolivianos.