El expresidente afirmó que hubo "asesores chilenos" con los cívicos potosinos durante la crisis política de 2019. Durante su gobierno se firmó y luego se anuló el decreto que autorizó el acuerdo con una empresa alemana para la explotación de recursos evaporíticos

23 de enero de 2022, 17:36 PM
23 de enero de 2022, 17:36 PM

El expresidente Evo Morales dijo que durante la crisis política de 2019, un grupo de “asesores chilenos” trabajó con dirigentes del Comité Cívico Potosinista (Comcipo) para apoyar el supuesto “golpe de Estado” de ese año.

“Uno de los motivos del golpe de Estado fue el litio. De acá a poco tiempo seguramente van a ser investigados, algunos, no todos, dirigentes del Comité Cívico de Potosí, Comcipo”, afirmó Morales en su programa dominical emitido por Kawsachun Coca.

El líder del MAS afirmó que había una estrategia para frenar la industrialización del litio. Durante las protestas de 2019, Comcipo demandó la anulación del Decreto 3738 que autorizaba que el Gobierno se asocie con la empresa alemana ACI Systems por 70 años para explorar el recurso.

“Habían asesores chilenos que estaban con el Comité Cívico y les estaban asegurando como gerentes a dirigentes del litio”, afirmó el jefe del MAS, quien aseguró que intereses transnacionales conspiraron contra su gobierno.

El 10 de noviembre de 2019, Morales renunció a la Presidencia en medio de una ola de protestas que rechazaron los resultados electorales de ese año y que le daban como vencedor de las elecciones de ese año. El 4 de noviembre anuló el decreto ante la presión social.

El líder cocalero se postuló para un cuarto mandato a pesar de la limitación constitucional que prohíbe la reelección consecutiva. Además, los resultados de un referéndum de 2016 le negaron a Morales la posibilidad de participar en los comicios de 2019.

El líder del MAS planteó la necesidad de redactar una nueva Constitución. Afirmó que, desde 2006, cuando comenzó el primer debate constituyente, “ya paso mucho tiempo y es una necesidad revisar”. “Yo tengo varias observaciones a la Constitución.

"Con la participación de las organizaciones sociales hay que plantear ese debate”, remarcó.

El salar 

Bolivia tiene 21 millones de toneladas de litio certificadas en el Salar de Uyuni por el Servicio Geológico de Estados Unidos, sin considerar el potencial de los salares Pastos Grandes (Potosí) y Coipasa (Oruro), que no están cuantificadas.

Ante este escenarios, ocho empresas de Estados Unidos, China, Rusia y Argentina llevan adelante pruebas de pilotaje con salmueras entregadas en los salares de Uyuni, Pastos Grandes y Coipasa, informó a inicios de este año el Ministerio de Hidrocarburos y Energías.

Se trata de las firmas CATL BRUNP & CMOC, Fusion Enertech, Energy X, Tecpetrol, Lilac Solutions, CITIC GUOAN/GRIG, TBEA Group y Uranium One Group.

El objetivo es que cada empresa muestre como mínimo un 80% de eficiencia en la separación del litio de los otros componentes en las salmueras

El gobierno boliviano apunta a posicionarse en el mercado de la industria del litio y sus derivados en combinación con la Extracción Directa de Litio (EDL) antes de 2025.

El 17 de enero, ocho comités cívicos del país demandaron, a través de una resolución aprobada en Tarija, una reforma judicial y la defensa del litio.

Los activistas instan a la defensa del litio por medio de "una ley de explotación de recursos evaporíticos en beneficio del pueblo" por considerar que es un recurso estratégico para el crecimiento económico y el futuro del país.

"El litio es de todos bolivianos", señala en parte de la resolución del movimiento cívico de Tarija, Santa Cruz, La Paz, Beni, Oruro, Chuquisaca, Pando y Potosí.