El líder del MAS asistió al vecino país a dar una charla y le consultaron sobre el supuesto financiamiento de un narco argentino a su campaña de 2014. El exmandatario no respondió

12 de julio de 2022, 7:29 AM
12 de julio de 2022, 7:29 AM

El diario argentino La Nación, informó ayer que Evo Morales llegó a la ciudad de Rosario “para dar una clase magistral en la Universidad Central en medio de un escándalo por supuestos aportes para su campaña de un narcotraficante argentino”. Se lo preguntaron en una conferencia de prensa y no respondió.

El diario argentino relata que el presidente Luis Arce, “que pertenece al mismo partido político que el líder cocalero, pidió que se abra una investigación sobre las denuncias que presentó un legislador del MAS que argumenta que el narcotraficante argentino José Miguel Farfán, actualmente preso en el penal de Ezeiza, habría financiado la campaña política de esa agrupación política en 2014”.

A los organizadores tomó por sorpresa la información que trascendió en Bolivia, donde un escándalo estalló luego de que el diputado del MAS, Rolando Cuellar exhibiera una nota enviada por el vicepresidente del partido Gerardo García en la que se agradece los aportes económicos realizados durante la campaña de 2014 por Miguel Ángel Salazar Yavi, que era el nombre falso que en Santa Cruz de la Sierra utilizaba el narco argentino José Miguel Farfán, quien estaba prófugo en Bolivia, donde había adquirido una nueva identidad y se había sometido a dos cirugías estéticas para cambiarse el rostro, según explicó a La Nación el fiscal federal de Salta Carlos Amad.

En Rosario una de las preguntas en la conferencia de prensa que dio Morales apuntó a esta trama que desató un conflicto interno en el MAS en Bolivia. Pero el expresidente no respondió sobre este tema puntual. Por su red social de Twitter acusó al legislador de su partido de ser “un traidor” y cargó contra “la derecha golpista con ayuda de algunos traidores que usa documentos falsos y nuevamente trata de proscribir al MAS”.

El Ministerio de Justicia, por orden del presidente, inició una investigación sobre este caso. El viernes emitió un comunicado en el que señaló que declaraba la indagación en reserva. Pero fuentes oficiales confirmaron que hoy la repartición de Estado difundirá un boletín con un primer reporte del avance de esa pesquisa.

“Chapo”

Farfán es argentino y se ganó un apodo cinematográfico: el “Chapo Guzmán del Cono Sur”. Durante más de dos décadas fue uno de los proveedores más importantes de cocaína en la Región Centro del país. La droga que producía en Santa Cruz servía para abastecer los búnkeres de Rosario, o la villa 1-11-14 en el Bajo Flores o Córdoba. 

Para dominar la provisión de cocaína contó con la ayuda de varios jueces federales argentinos, a los que se confirmó que pagó sobornos, como Raúl Reynoso y José Antonio Solá Torino, ambos en Salta. El primero está preso –ahora con detención domiciliaria- y el segundo se suicidó hace dos años luego de que la Cámara de Apelaciones dejó firme su condena en 2018 y tenía que retornar a la cárcel.

Está detenido en el penal de Ezeiza desde febrero de 2019, cuando Bolivia lo expulsó del país, tras atraparlo en una mansión en Santa Cruz. El narcotraficante, en Bolivia, no estuvo escondido, sino que tenía una vida social intensa.