Exigen investigación transparente sobre la muerte de Colodro y hay más críticas contra ASFI

La muerte del interventor del banco Fassil, Carlos Alberto Colodro, desató una ola de reacciones con una demanda en favor de una investigación, ágil, transparente y oportuna, pero, al mismo tiempo, surgieron nuevos cuestionamientos a la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (Asfi) por haber demorado acciones contra esta entidad financiera.

“Eso de que de que se lanzó de su oficina, que está en el piso 14, levanta mucha sospecha”, afirmó el expresidente Evo Morales desde Cochabamba. “La investigación debe ser inmediata, transparente y que dé seguridad” apuntó en su programa semanal de radio.

Además, el político lamentó que la intervención se hubiese hecho con demora a pesar de que las supuestas operaciones dolosas de la entidad financiera se hayan detectado, incluso desde 2019, cuando él fue presidente y el actual mandatario, Luis Arce, ministro de Economía.

“Lucho Arce decía: ‘Yo sabía el 2018 o 2019, a mí nunca me comunicaron’. Yo, retornando de Argentina (2020) me informé de un banco llamado Fassil. Cualquier sector privado tiene derecho a organizarse, pero si el hermano Presidente ya sabía y había irregularidades, ese momento era parar para que no haya semejante hechos de extorsión, gravísimos”, afirmó.

En ese sentido, calificó de “mafiosas” a las operaciones del banco intervenido e insistió en la necesidad de que se haga una investigación responsable sobre este caso.

Además mencionó que “algunos periodistas” temen por su vida. “No sé si será verdad; tengo información que algunos quieren irse de Bolivia por razones de seguridad (ya sea) por denunciar o ser parte de esa mafia. No lo entiendo”, comentó Morales.  

Por su lado, el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, aseguro que “urgen respuestas rápidas y confiables tras la muerte del interventor de Banco Fassil”, así como garantías en favor de los periodistas que investigan este caso.

“Exhortamos a las autoridades competentes a realizar una investigación exhaustiva, rápida y transparente, para devolverle certidumbre a la población boliviana”, apuntó Rodríguez.

El sábado, la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) explicó que sus “informes de inteligencia financiera y patrimonial son confidenciales y no constituyen prueba” porque “su uso es exclusivo del Ministerio Público y de las autoridades competentes”.

La pasada semana, varios reportes de esta entidad se filtraron a la prensa. En ellos se vinculaba a unos 50 empresarios con las operaciones del Fassil.

“Fassil toma giro escabroso. Esta inmobiliaria disfrazada de banco, plagada de operaciones sospechosas, creció bajo cómplice benevolencia regulatoria masista. Hoy trabajadores están impagos, depositantes desdolarizados e interventor fallecidos. Investiguen y aclaren todo, afirmó el expresidente Jorge Tuto Quiroga.

El alcalde de Santa Cruz, Jhonny Fernández, demandó a las autoridades investigar con celeridad. “Los ahorristas necesitan saber qué está pasando en la investigación para dar con los culpables de lo sucedido con la institución financiera, al igual que los extrabajadores, que merecen recibir sus liquidaciones de acuerdo a ley”, apuntó.

Colodro perdió la vida el sábado por la noche tras caer del pido 14 del edificio donde se encontraba su oficina. El abogado de la familia del fallecido, Jorge Valda indicó que el interventor acudió a esas instalaciones a las 17:30 para terminar “un informe importante que debía entregar este lunes”.

Además, el interventor había anunciado el pago de haberes a los exfuncionarios del Banco Fassil a partir del lunes. También estaba en marcha el proceso de liquidación y la venta de las decenas de inmuebles de la entidad financiera, especialmente en Santa Cruz. 

El sábado, el día de su deceso, Colodro había almorzado con su hija y, por la tarde, estuvo en  Manzana 40, un centro empresarial que está en Equipetrol. De allí, recién se fue a la oficina en el edificio Ambassador, donde está su oficina.

El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, en apego al examen forense señaló que las causas de la muerte fue por una caída desde el piso 15 y anunció una investigación sobre las lesiones que presentaba el cuerpo del infortunado ejecutivo.

Reveló la existencia de una carta escrita a mano por el interventor antes de morir. Poco después, el manuscrito fue publicado por el canal estatal Bolivia Tv.