La adolescente de 14 años fue asesinada en la localidad tarijeña de Bermejo. Su familia lamenta la 'inoperacia' de la Policía y en el municipio cuestionan la mala administración de cámaras de seguridad

2 de marzo de 2020, 8:21 AM
2 de marzo de 2020, 8:21 AM

Los familiares de Carla M., una adolescente de 14 años, cuyo asesinato conmociona al país, reaccionaron este domingo indignados ante las declaraciones policiales que afirman que el operativo de búsqueda de la joven y captura de los sospechosos fue exitoso.

“Los familiares tuvimos que convertirnos en investigadores ante la inoperancia de la Policía”, aseguran en un documento difundido por el diario El País, donde expresan su agradecimiento a la ciudadanía y rebaten la tesis policial sobre la necesidad de trabajo de Carla.

“Tenía papá, mamá, hermano, abuelas y tíos que nunca le han hecho faltar nada y que, además de darle todo lo necesario para desarrollarse, le han rodeado de amor y cariño. Ella no estaba buscando trabajo”, señala la familia y descarta la versión de que la joven contactó a sus verdugos cuando buscaba ganarse la vida.

El caso

La muerte a manos de tres personas generó dolor e indignación en  Bermejo, donde el pasado 21 de febrero la mejor fue reportada como desaparecida. El cuerpo apareció seis días después tirado en la carretera que lleva al ingenio azucarero.

Tras la detención de los autores, la justicia condenó a 30 años de cárcel al principal acusado, en tanto que los otros dos implicados fueron enviados a detención preventiva al centro de rehabilitación para menores Oasis.

Falta de seguridad

La muerte también abrió otra polémica por la instalación de 300 cámaras de seguridad que fueron instaladas desde el año 2014 y que hasta la fecha no funcionan, según publica la agencia Erbol. La subgobernación pagó 18 millones de bolivianos en el marco de un proyecto de seguridad ciudadana que continúa inconcluso y sin responsables de la mala gestión pública.



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