Funcionarios-militantes salen a defender al Gobierno en horario laboral e infringen su Estatuto
Dijeron que los aportes de dinero era una práctica de los 14 años anteriores, en alusión al gobierno de Evo Morales
Sin tapujos. Los funcionarios públicos del Gobierno de Luis Arce salieron este jueves a plaza Murillo a defender el cabildo del 17 de octubre y enseñaron sus credenciales de militantes del MAS; de ese modo violentaron al menos tres artículos del Estatuto del Funcionario Público.
A las 10:50 de este jueves, un grupo de aproximadamente 50 funcionarios-militantes del MAS se hicieron presentes en plaza Murillo y dijeron representar a los trabajadores de: Cancillería y de los ministerios de la Presidencia, Obras Públicas y Culturas. Emanuel Quisbert, uno de los representantes, dijo que para hacer esta presentación pidieron vacaciones.
“Estamos sacando lo que la ley nos permite, hemos sacado nuestras vacaciones para hacer este tema; en ese sentido también llamamos a los compañeros servidores a que apoyemos el 17 de octubre (el cabildo), sacando vacaciones, permiso sin goce de haberles; en mi caso voy a pedir permiso sin goce de haberes”, se ufanó el hombre.
Sin embargo, el Estatuto del Funcionario Público establece como principio que el servidor está al servicio “exclusivo a los intereses de la colectividad y no de parcialidad o partido político alguno”.
Los servidores públicos están prohibidos de: “realizar actividades políticas partidarias y de interés particular durante la jornada laboral, o en el ejercicio de sus funciones”, de acuerdo con el artículo 9 de la misma norma.
Emanuel Quisbert, que se convirtió en el portavoz de los funcionarios-militantes negó que se hagan aportes económicos y dijo que cada uno de los asistentes debe pagar, con sus recursos, las banderas e indumentaria que se use en el cabildo. Señaló que los ministerios recolectan dinero para la elaboración de gorras o poleras alusivas al evento.
“(El cobro de cuotas) es práctica de los anteriores 14 años; volvemos a repetir, llamamos a los servidores públicos (...) todos estamos dando la cara; vuelvo a repetir: nosotros estamos con nuestro derecho constitucional militante; yo soy militante, somos militantes inscritos y no de ahora”, dijo enseñando su carné del MAS.
La ley que rige para los funcionarios manda a sancionar a todos aquellos que comentan faltas en el cumplimiento de sus labores; una de las sanciones es la destitución del infractor. Sin embargo, los asistentes de esta manifestación dijeron que no violaban ninguna norma.