El exvicepresidente da la fórmula para contrarrestar la oposición a los gobiernos “populares”. Considera que se debe tener una “convivencia táctica” con los sectores empresariales

El Deber logo
14 de octubre de 2021, 14:42 PM
14 de octubre de 2021, 14:42 PM

El exvicepresidente Álvaro García Linera considera que los “gobiernos populares” deben afectar a los sectores que conspiran, revisando sus impuestos, propiedades y cuentas bancarias, desde la administración del poder.

Quien fuera hombre fuerte de Evo Morales sugiere mantener una “convivencia táctica y de desplazamiento” con los sectores del empresariado privado, para luego, desde el Estado, rebasarlos, y llegar a la posibilidad de la “democratización de esa riqueza”

En una entrevista con ‘Jacobin América Latina’, en la que fue presentado en la nota como "uno de los más destacados intelectuales latinoamericanos", la exautoridad señaló: “No puedes simplemente contemplar, o asumir la actitud de dejarlos seguir con su conspiración. Revisa sus impuestos, mira sus propiedades, sus cuentas bancarias, tienes un menú de opciones de gobierno con las cuales atemperar y contener ese tipo de acciones”.

En dicha conversación, en la que volvió a repasar los hechos registrados en Bolivia en 2019, García Linera acusa a los empresarios de haber sobornado a oficiales y mandos medios de la Policía Boliviana y las Fuerzas Armadas (FFAA), para sumarse al “golpe de Estado”.

La entrevista: 


Nunca vas a poder colocar una muralla frente a un soborno de cuatro o cinco millones de dólares de un empresario”, sostuvo sobre la participación de los uniformados en las movilizaciones ciudadanas, sugiriendo la modificación de las estructuras curriculares, “para establecer un tipo de formación y de espíritu de cuerpo menos corrosible por este tipo de sobornos y más cercano a lo popular”.

Las afirmaciones de la exsegunda autoridad nacional tienen lugar en un momento en el que se debate una polémica Ley Contra la Legitimación de Ganancias Ilícitas, que da amplias facultades a la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF), y es rechazada por sectores empresariales, gremiales, transportistas y cooperativistas, entre algunos sectores.

“Se trata de cruzarle el camino a los sectores empresariales que tienen demasiado poder de veto. No necesariamente estatizas todo, pero sí cortas la cadena, los debilitas, y eso hicimos con la soja; ya nunca más volvió a ser un problema. Desde 2009 hasta el 2020 ese mecanismo de chantaje que existía con la soja nunca más volvió. Y si molestan un poco más, les suspendes las exportaciones, porque como Gobierno tienes el monopolio de decidir si se exporta o no se exporta”, acotó como ejemplo.

El exvicepresidente recomienda al MAS “desconfiar, movilizarse para defender lo que se tiene”, mejorando el control territorial y desarrollar mecanismos de interlocución frente a las estructuras corporativas alternativas de las clases medias tradicionales, como fórmula para evitar perder nuevamente el poder.