(VEA EL VIDEO) El viceministro de Autonomías señala tener predisposición para el diálogo, pero el movimiento de tierras bajas sigue sin la atención del presidente Luis Arce

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25 de octubre de 2021, 14:44 PM
25 de octubre de 2021, 14:44 PM

Mientras los indígenas cumplen dos meses desde el inicio de su peregrinación, lejos de sus hogares, a la espera de que los cuatro poderes del Estado atiendan sus demandas en favor de la defensa de la tierra y el territorio, el Gobierno nacional asegura que el 95% de las demandas de los pueblos indígenas han sido atendidas.

Al menos así lo aseguró el viceministro de Autonomías, Álvaro Ruiz, quien informó este lunes que se avanzó con la atención de casi la totalidad de las demandas de los pueblos indígenas de Bolivia, a través de un trabajo coordinado con su dirigencia orgánica. 

“Hemos estado trabajando con los dirigentes y las autoridades orgánicas de los pueblos y lo hemos dicho, su pliego petitorio y la agenda de los pueblos indígenas las hemos ido trabajando y nosotros podemos demostrar que en los puntos que hemos mencionado, hemos trabajado en un 95%”, indicó la autoridad.

No obstante, el pliego petitorio de 16 demandas del movimiento de tierras bajas sigue siendo la tarea pendiente del Estado, que hasta la fecha no ha dado atención como sí lo han hechos los gobiernos subnacionales y organismos internacionales.

Entretanto, el viceministro Ruiz adelantó que el trabajo continuará esta semana, para lo cual una comisión se trasladará hasta el departamento de Beni, con el fin de avanzar en algunos temas pendientes. 

“Han planteado el cambio de normativas y, cabalmente, el martes vamos a estar nuevamente en Trinidad con las cinco centrales, para desarrollar algunos temas y agilizarlos, como en el caso de la autonomía indígena y justicia indígena”, manifestó.  

Sobre la XI Marcha Indígena de los pueblos de tierras bajas, el viceministro se limitó a decir que en los acercamientos los marchistas rechazaron a la delegación gubernamental, pero que el diálogo sigue abierto.

El rechazo de los marchistas se da porque las personeros del Gobierno han buscado minimizar o desprestigiar al movimiento, como el rechazo que ocurrió en torno a una visita realizada por Roberto Ríos, viceministro de Seguridad Ciudadana.

"En cada etapa que vamos quemando vemos una falta de atención del Estado boliviano, que no tiene voluntad y no quiere saber nada de nosotros. Es un Estado conducido por un poder Ejecutivo discriminador, pero es su manera de ver las cosas. No nos vamos a cansar porque nuestras reivindicaciones y demandas son justas", fue la voz de Marcial Fabricano, líder del Parlamento Indígena en una entrevista con EL DEBER.

Además, los indígenas consideran que las autoridades que han buscado el acercamiento no tienen un poder de decisión mayor y solo buscan dilatar o persuadir a los indígenas desviando la atención de las demandas.

“Estamos abiertos a los señores de la marcha para dialogar, no se olviden ustedes que fue una comisión y ellos no aceptaron la comisión, nosotros estamos prestos a dialogar, estamos convencidos que el camino del diálogo es el que permitirá solucionar los desafíos que tiene nuestro país”, subrayó el viceministro Ruiz.

Los marchistas esperan una respuesta concreta del presidente Luis Arce Catacora y enviaron una nueva comisión a La Paz para concretar la ansiada reunión, dos meses después sin tener una respuesta clara.