Las autoridades bolivianas reclaman a países europeos y EEUU por el crecimiento de la demanda. Europol identificó que el tráfico de drogas se organizaba desde Dubái

22 de febrero de 2022, 15:30 PM
22 de febrero de 2022, 15:30 PM

El Gobierno pedirá un informe a la Policía Europea (Europol) y anunció “una investigación interna” por el operativo internacional que el 15 de febrero logró desbaratar una poderosa banda criminal que traficaba cocaína boliviana desde un centro de comando ubicado en Dubái.

El Viceministerio de Defensa Social, que ejecuta la política antidroga del país, ha solicitado estos reportes “siguiendo el compromiso responsable en la lucha contra el ilícito”, aunque anticipó que “la información publicada sobre el operativo no muestra pruebas objetivas”.

De acuerdo con un reporte oficial que Europol divulgó el 18 de febrero, el operativo se ejecutó de manera simultánea en Brasil, España y Paraguay, tras dos años de seguimiento en los que participó la DEA, la agencia antidroga de Estados Unidos, así como la Policía Federal de Brasil y la Secretaría Antidroga de Paraguay.

Durante el seguimiento, las autoridades de esos países descubrieron una infraestructura de producción de cocaína en Bolivia “con líneas logísticas y de suministro en Brasil, Paraguay y Uruguay”, desde dónde eventualmente se embarcaban los alijos en contenedores para ser transportados vía marítima.

“La investigación también descubrió que los centros de comando y control de la organización estaban en Dubái”, subraya el reporte de la agencia europea que intercambió información con un total de 27 países.

El Gobierno justificó que “la demanda de drogas de los países consumidores sigue en aumento” y cuestionó que en países de Europa y Estados Unidos “no haya políticas verdaderas de la reducción” del consumo de estupefacientes.

“Los países consumidores deberían replantear su política de reducción de la demanda de drogas en el marco de la responsabilidad compartida”, subraya el comunicado.  

Desde que la DEA fue expulsada del país, la Unión Europea financia la lucha al narcotráfico. En un primer momento, lo hizo sobre la base de programas específicos y luego a través de un mecanismo de respaldo al Presupuesto General del Estado.

El viceministro de Defensa Social, Jaime Mamani, presentó en 2021 una nueva estrategia antidroga a la Unión Europea y Naciones Unidas y demandó el respaldo de $us 60 millones para los próximos cinco años.

El Gobierno asegura que ha desarrollado una política “de regionalización de la lucha contra el narcotráfico”, lo que ha permitido una coordinación directa con todos los países de la región para desarrollar operativos conjuntos e intercambiar información relevante, además de pesquisas relacionadas con el lavado de dinero.  

La investigación que fue coordinada por la Europol reveló que “la organización criminal montó una red de empresas para permitir la importación de drogas desde Sudamérica y el lavado de las ganancias relacionadas”, por eso “testaferros en la nómina de la organización controlaban esta red de empresas”.

En el país, según una investigación de la Cámara Automotor Boliviana (CAB), desde 2011 en el país se han montado empresas que compran vehículos del “mercado gris” de concesionarias en Dubái, Emiratos Árabes Unidos y Omán. Ese reporte considera que estas actividades están relacionadas con el lavado de dinero, pero no precisa vínculos con el narcotráfico. 

Europol señaló que la operación internacional incluyó 40 allanamientos en Brasil, Paraguay y España en los que se detuvo a unas 30 personas. Las incautaciones incluyeron, drogas, vehículos, armas de fuego, dinero en efectivo y varias cuentas bancarias en Brasil, Paraguay y España, señala el reporte. “Todas esas acciones tuvieron lugar el 15 de febrero”, señala.

La investigación llevó al descubrimiento, además, de una red de distribución con base en las ciudades españolas de Valencia y Barcelona que se encargaba de recibir los cargamentos de cocaína y distribuirlos en el mercado europeo.

Autoridades brasileñas y españolas interceptaron varios de estos envíos e identificaron a algunas de las empresas involucradas en el esquema criminal.

Bolivia acoge desde hace unos dos años al Centro Regional de Inteligencia Antinarcóticos (Cerian), un proyecto que financió la Unión Europea (UE), pero que no fue mencionado en el informe de la Europol, pese a que el origen de la droga era Bolivia.

Las autoridades nacionales, en el informe de interdicción de 2021, señalan que en Bolivia se refina la cocaína que es procesada inicialmente en Perú. El año pasado se destruyeron 46 pistas clandestinas, una de ellas estaba asfaltada y otra fue detectada en Tarija.

Además, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, negó en varias ocasiones la presencia de la DEA en el país. Lo hizo tras el reclamo de extradición que emitió Estados Unidos para poder juzgar al coronel Maximiliano Dávila, exjefe antidroga del gobierno de Evo Morales.