(LEA EL DOCUMENTO) El Ministerio de Relaciones Exteriores emitió un pronunciamiento. El Departamento de Estado estadounidense difundió ayer un documento en el que observa “la aplicación inconsistente e ineficaz de la ley y un poder judicial corrupto”

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13 de abril de 2022, 14:25 PM
13 de abril de 2022, 14:25 PM

El Gobierno nacional emitió este miércoles un pronunciamiento en el que “rechaza la intromisión de los Estados Unidos”, que el martes difundió un informe de derechos humanos, que ve una “justicia corrupta” y critica los “abusos” contra Jeanine Áñez.

“Bolivia hace un llamado a respetar la soberanía de los países y la autodeterminación de cada uno de ellos, por lo que rechaza categóricamente la intromisión de terceros países, así como el Informe unilateral sobre Derechos Humanos, recientemente emitido por el Departamento de Estado de los Estados Unidos, que realiza inferencias sin fundamento y emite juicios de valor inapropiados sobre el proceso judicial que enfrenta Jeanine Áñez en la justicia de nuestro país, por su participación en los hechos ocurridos en ocasión de la crisis política de fines de 2019”, indica el documento.

La instancia estadounidense hizo un recuento de los procesos legales planteados contra la expresidenta transitoria, cuestiona los “abusos y las arbitrariedades” cometidas en 2021 en el marco de las investigaciones que desarrolla la Fiscalía en ese caso. También considera que existen valoraciones de expertos sobre procesos legales políticamente motivados.

El pronunciamiento:


Al respecto, la Cancillería “reafirma que los procesos judiciales por los hechos de fines de 2019 se llevan adelante por las autoridades de justicia de nuestro país, en el marco del principio de independencia de órganos del Estado”.

Asimismo, considera que “es mínimamente cuestionable que los ‘informes’ unilaterales de Estados Unidos, pretenden estar por encima de otros Estados y organismos internacionales como Naciones Unidas, siendo que Estados Unidos ni siquiera es signatario de los Tratados de Derechos Humanos fundamentales, como la Convención internacional sobre la protección de los derechos de los trabajadores migratorios y de sus familiares”.