Se trata del grupo que protagonizó la quema de las mascarillas en Quillacollo. Autoridades anunciaron que podrían ser sancionadas e incluso puede abrírseles un proceso penal por atentado contra la salud pública.

El Deber logo
8 de enero de 2021, 11:38 AM
8 de enero de 2021, 11:38 AM

El grupo denominado “Acción Humanista Revolucionaria”, que protagonizó la quema de barbijos en Quillacollo (Cochabamba), sostiene que el uso de las mascarillas ocasiona que las personas pierdan su personalidad, libertad de expresión y estén condenadas a la “esclavitud”.

Rafael Terrazas, representante de ese movimiento, sostiene que “la población está perdiendo su personalidad, nos estamos volviendo a una sociedad como si estuviéremos en otro planeta, ya no se reconoce si uno es un ser humano o es un habitante de otro planeta”.

El activista defendió su acto público, enfatizando que no existe prueba científica sobre la existencia del Covid-19 y atribuyó las muertes registradas en el mundo y el país a resfríos o negligencia médica.

Las personas que están falleciendo son las que se han hecho vacunar contra la gripe, otras fueron internadas por un resfrío y se han tratado mal sus patologías, que han derivado en infecciones y esto fue descubierto por las autopsias realizadas en Italia”, señaló en entrevista con radio Fides.

La Alcaldía de ese municipio sostiene que identificó a las personas que protagonizaron la protesta en la plaza Bolívar, y serán pasibles a sanciones e incluso puede abrirse un proceso penal por atentado contra la salud pública.

Al respecto, Terrazas sostuvo que su manifestación fue pacífica y recalcó que “las personas están matando sus neuronas con el uso constante del barbijo, se quedan sin la posibilidad de pensar, entonces surgen los instintos naturales y se hacen más violentas en estas circunstancias”.

Un video en el que se ve a integrantes de ese movimiento quemando los barbijos, y gritando “libertad”, causó indignación entre la población en pasados días, debido a que el país atraviesa una segunda ola de contagios y se deben extremar las medidas de bioseguridad, no descuidarlas.