Insiste en que salud y economía son sus prioridades. Se rehúsa a hablar de política. Confía en que Bolivia saldrá adelante con solidaridad y la creación de más empleos. Habla de las luces y sombras de su mandato

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6 de agosto de 2020, 19:41 PM
6 de agosto de 2020, 19:41 PM

La presidenta en ejercicio respondió por escrito un cuestionario que EL DEBER le hizo llegar la semana anterior basado fudamentalmente en los aspectos políticos, económicos y sociales del país, en tiempos de pandemia.
 
 ¿Cómo recibe este 6 de agosto señora presidenta?
Con un llamado de unidad. Unidad para luchar entre todos por la salud de las familias y unidad para luchar entre todos por la reactivación de la economía y por el empleo.

 Presidenta, ¿cómo se siente en cuanto a su salud?
Estoy bien. Gracias a Dios yo tuve síntomas leves y moderados. Ahora estoy recuperada.

 ¿Cuál fue el momento más difícil de su convalecencia?
Los primeros análisis encontraron una afección pequeña en el pulmón. Y quizá esa fue la parte médica más delicada. Y en lo emocional también pasamos por un momento delicado en la familia ya que, al mismo tiempo que me detectaron positivo en el Covid-19, también le detectaron positivo a mi hijo. Y claro, como madre eso es un momento difícil.

 ¿Sospecha dónde se produjo su contagio?
Estoy en contacto con mucha gente. Pudo haber sido en cualquier sitio. Lo importante es estar de vuelta con más ánimo para seguir la batalla contra la pandemia.

 ¿Cuánto juega el miedo en esta enfermedad?
La enfermedad causa una gran preocupación en las personas afectadas y en sus familiares. Sin duda la pandemia en cada uno de sus aspectos requiere el máximo de entrega y fuerza de parte de todos.

 ¿Temió por su vida en algún momento?
La verdad es que no. El doctor Miranda, a quien estoy muy agradecida, me explicó el tratamiento desde el principio y me informó que él esperaba controlar la infección.

 ¿Se le pasó por la mente la posibilidad de la sucesión presidencial?
No. Como le comenté, gracias a Dios tuve síntomas leves y moderados.

 ¿Cuál fue el tratamiento que siguió?
Me dieron paracetamol, azitromicina, corticoides, pastillas para desinflamar la garganta y manzanilla con miel.

 ¿Transformaría la salud a partir de ahora? ¿Alcanza con un 10 %? ¿Cuánto sería lo adecuado en Bolivia?
Todos hemos aprendido la lección. De aquí en adelante la salud será una prioridad muy importante en Bolivia. En tres meses, hemos hecho en salud lo que no se había hecho en décadas anteriores. Por ejemplo, hemos creado más de 7.000 puestos de salud y hemos equipado hospitales como nunca antes se había hecho.

 ¿Cómo ve las políticas de salud que encara Trump en EEUU, Bolsonaro en Brasil y Fernández en Argentina?
Cada país encara estos enormes desafíos adaptándose a las necesidades y a las potencialidades de sus pueblos y con seguridad, tratando de mejorar los sistemas de salud y de ayuda a las familias. Lo que sí es importante en cada caso es no politizar el tema de salud. La salud es antes que la política. Y ese es un principio que debe aplicarse a cualquier país y a cualquier Gobierno.

 ¿Qué está haciendo o qué va a hacer el Gobierno con los científicos que se fueron a otros países?
Esta pandemia también nos ha enseñado que todos pueden ayudar. Con la profesión que tengan. Todos son útiles. Porque este virus, en gran parte, se frena cuando la sociedad en su conjunto aprende a manejarlo.
Tenemos profesionales -médicos y científicos por ejemplo-, que aportan, incluso estando en el exterior. Y yo les agradezco. En mi comité de asesores médicos tenemos casos así. Y seguramente hay otros profesionales que han salido del país pues tenían mayores posibilidades de ingresos en otros sitios. Mi mensaje a todos es que el país hoy por hoy requiere de todos. El país necesita apoyo de todas sus mentes brillantes.

 Respecto a la vacuna ¿cuánto dinero está dispuesto a pagar el Estado boliviano para obtener el 80% que le falta?
El Programa Ampliado de Inmunizaciones está inscrito como programa prioritario del Estado. El Gobierno está en la obligación de adquirir vacunas y por eso formamos parte del fondo rotatorio de la OPS/OMS.
Por eso quiero dejar algo muy claro. La vacuna es una prioridad del Estado. Y vamos a pagar lo que sea necesario para tenerla.
Hay varias iniciativas mundiales para que todos los países del mundo la tengan a bajo costo o incluso de modo gratuito la vacuna. Pero yo quiero asegurar que en cuanto salga esa vacuna, la tendremos para la población y que, por supuesto, el dinero no será un obstáculo. La salud es lo primero.

 ¿Usted pondría el brazo para probar la vacuna en fase 3 como lo están haciendo en Brasil, Argentina, EEUU, etc. (Salvando el criterio de la señora presidente)?
Sí, lo haría. En esta lucha hay mucha gente que no solo está dando el brazo, sino que está dando la vida. Ese es el ejemplo que hemos recibido, por ejemplo, del Dr. Urenda, del Dr. Tórrez o del Dr. García.

 ¿Por qué hasta hoy solo se han realizado 140.000 pruebas en cuatro meses de pandemia?
En primer lugar, porque Bolivia contaba solo con dos laboratorios, Cenetrop e Inlasa, luego se sumó el de Cochabamba. Y es que hallamos la infraestructura de salud muy, muy débil. En poco más de tres meses aumentamos camas, unidades de terapia intensiva y, también, laboratorios. Hoy ya contamos con 16 laboratorios. Hemos hecho por la salud lo que en décadas no se hizo en el país.
Por otro lado, siguiendo su pregunta, la disponibilidad de pruebas, al inicio de la pandemia, era muy baja.
Bolivia hizo el requerimiento inicial de 600.000 pruebas para que sean adquiridas a través del PNUD (Organismo de las NNUU) y estas fueron llegando según la provisión del mercado internacional. Hoy llegan regularmente en lotes que se distribuyen a los laboratorios de acuerdo con un cronograma de entregas que hace el PNUD.
También se están entregando seis termocicladores a Cochabamba, Santa Cruz y La Paz. Hace dos días se instalaron, en La Paz, dos equipos que permitirán procesar 480 pruebas adicionales por día. Y en esta misma semana se hará lo mismo en Santa Cruz y en Cochabamba.

 ¿A qué atribuye el éxito en el manejo de la pandemia de Uruguay, un país pequeño como Bolivia?
Bolivia es un país que lo ha hecho bien y ha dado lo mejor de sí. Recordemos que entre todos hicimos una buena cuarentena. Sin esa cuarentena los infectados y los fallecidos fueran muchísimos más. Como mujer y como presidenta estoy orgullosa del trabajo que han hecho todos los bolivianos. El personal que trabaja en salud, las FFAA, los médicos, muchos alcaldes de distintos partidos y lo más importante: miles y miles de familias bolivianas que han hecho y que hacen la cuarentena. Y una cosa importante: millones de ciudadanos han aprendido a cuidarse, a usar barbijo y a desinfectarse, y ahora manejamos mejor la prevención. Bolivia es un país con gente muy trabajadora y a la vez, un país con muchas oportunidades y desafíos por delante.

 ¿Es porque en Uruguay hay mayor gobernabilidad y una población más disciplinada?
En la salud es muy importante la educación de la gente y también es importante la gobernabilidad y la economía. Pero a la vez es importante la solidaridad. Y los bolivianos, aun en nuestras limitaciones, hemos descubierto en esta pandemia un enorme sentido de la solidaridad. Yo estoy muy orgullosa y agradecida de la solidaridad del pueblo boliviano.

 El 19 de mayo anunció una investigación por el caso respiradores caiga quien caiga... a más de dos meses ¿se identificó a los responsables del robo al Estado? ¿Cuánto más va a tardar en concluir la investigación?
En ese caso anuncié cuatro cosas. Y las cuatro se han cumplido y se están cumpliendo.
Anuncié todo el peso de la ley contra los que hacen corrupción. Y en este momento están detenidas personas de mi Gobierno y del Gobierno del MAS. El proceso judicial, como usted sabe, está en curso y nosotros como Gobierno y ustedes como prensa -con seguridad- estamos alertas y vamos a estar alertas a ese proceso y sus sentencias definitivas.
También anuncié que haría todo mi esfuerzo para que los bolivianos no perdieran plata por la corrupción de ese caso. Y por eso, ordené demandar la nulidad del contrato y así congelar el pago que teníamos pendiente por esos respiradores. De este modo, solo se pagó una cantidad cercana al 50% y al no pagar el 50% restante se evitó pagar el sobreprecio de la corrupción. No perdimos plata. Pero sin duda perdimos tiempo.
Del mismo modo anuncié que impulsaríamos controles vía internet para hacer compras en mi Gobierno y por eso ya sacamos el decreto que regula las compras ‘online’.
Y finalmente anuncié auditorías a todas las compras de salud, y esas auditorías están en marcha.
En este caso de los respiradores, me sentí profundamente indignada y triste. Por eso puse mucho esfuerzo en corregir ese tropiezo. Así lo hemos hecho y no bajamos la guardia, lo seguiremos haciendo.

 Se dice que los tiempos difíciles pueden sacar a flote lo mejor o lo peor de las personas. ¿Cómo cree que Bolivia saldrá como país una vez terminada esta dolorosa coyuntura?
Saldrá una sociedad más solidaria y unida. Una sociedad que supo lo que era ayudarse los unos a los otros. Tenemos dos grandes retos. La salud y la economía. Y en ambos retos, lo importante es ayudarnos unos a los otros. Y eso significa una Bolivia donde no cabe la división y una Bolivia fundada en la unidad.

 Se estima que 2 millones de vacunas lleguen al país, ¿cómo se debería organizar su distribución y la campaña de vacunación en sí para no propiciar aglomeraciones y contagios?
El Ministerio de Salud informará de modo sistemático a la población sobre el proceso mediante el cual diferentes universos de personas irán accediendo a la vacuna. Los grupos más vulnerables encabezarán ese proceso de acceso por supuesto. También, el Ministerio de Salud informará con anticipación y con mucha transparencia sobre la logística de ese acceso.
Recordemos que el programa nacional de vacunación PAI tiene más de 40 años de experiencia. Y es un programa que ya trabaja los planes y estrategias para tener un proceso ordenado de vacunación.
Ahora, también es bueno recordar que las familias van a jugar un papel muy importante. Las familias y los ciudadanos en particular deberán colaborar, desde el barrio y desde las comunidades en cada rincón del país.

 ¿Son compatibles el sombrero de presidenta y el de candidata en este momento, sin que represente repetir las conductas de Evo Morales?
Yo entiendo que a la prensa le gusta conversar sobre política, y eso es bueno. Pero le confieso que he aceptado esta entrevista como presidenta de todos los bolivianos y no como candidata. O sea, he venido como la presidenta que trae en mente –y créame también en el corazón- la agenda de todos los bolivianos y no solo la agenda de uno u otro color político. Esa agenda de todos los bolivianos es la salud y la economía.
Por eso, le pido que no espere usted respuestas de la candidata ni conversaciones o especulaciones mías sobre política o sobre campañas. Cuando llegue la campaña, seguramente ustedes harán entrevistas a todos los candidatos. Y ahí conversaremos de política. Hoy, estoy aquí para conversar de salud y de economía. Eso es lo importante ahora. Lo demás puede esperar, pero recordemos que lo que no puede esperar es la salud y la falta de trabajo e ingresos de las familias en todo el país.

 Dio el paso antes de la pandemia, ¿usted cree que el coronavirus ha golpeado su gestión y su candidatura?
Le comento de la gestión. La primera parte de esta gestión estuvo consagrada a pacificar el país. La salida de Evo Morales dejó un país convulsionado y al borde de una guerra civil. Por eso esta gestión se dedicó con todo a pacificar el país y a consolidar la democracia. Y como usted sabe, pacificamos el país y rescatamos la convivencia democrática.
En ese escenario preparamos las elecciones para el 3 de mayo. Pero como usted conoce también, estas elecciones fueron postergadas por la pandemia. Y vamos a hacer estas elecciones cuando la Asamblea y el Tribunal Electoral así lo decidan. ¿Han decidido el 18 de octubre? Pues entonces haremos elecciones el 18 de octubre.
Pero terminada la parte de consolidar la democracia, como usted sabe, vino la pandemia. Y en ese momento pusimos en marcha la agenda frente a la pandemia. ¿Cuál es esa agenda? Esa agenda es clara: salud y economía.
En salud, hemos hecho la cuarentena salvando miles y miles de vidas. Y la hemos hecho entre todos. Pero además hemos equipado hospitales y comprado insumos de salud como nunca antes se había hecho en la historia de la salud pública de Bolivia. Más de 7 mil nuevos puestos, más de mil camas hospitalarias. Más de 150 respiradores y en pocos días serán muchos más. Hemos abierto 14 laboratorios para detectar el Covid-19. Había 3. En resumen, hemos hecho un sistema de salud.
Y en economía estamos trabajando duro. Hemos lanzado 4 bonos para las familias: (1) El bono Familia de 500 Bs. (2) el bono Canasta familiar de 400 Bs. (3) el bono Universal de 500 Bs. (4) El Bono Salud, bono que, como usted sabe, estoy esperando que la Asamblea del MAS libere y desbloquee el dinero para empezar a pagarlo. También hemos rebajado las facturas de luz, agua y gas, y he ordenado que no se cobre impuestos ni créditos a las familias en el momento de la cuarentena rígida. Y también hemos ordenado que se pague el aguinaldo de la renta Dignidad ahora en agosto y no en diciembre para ayudar a las familias. Pero no solo eso, hicimos el Plan Salario y el Plan Empleo, dos planes de crédito para evitar que las empresas despidan a sus trabajadores.
Finalmente, hemos lanzado un plan masivo para crear empleo, un plan que tendrá 600 mil beneficiarios en dos años, entre empleos directos e indirectos. Es a la vez un plan que cuenta con programas de crédito fácil, como el Programa 1,2,3. Esa es mi gestión en términos generales.

 Evo Morales y Carlos Mesa dijeron que las elecciones deben ser cuanto antes para que un gobierno con legitimidad y no uno transitorio enfrente la pandemia, ¿es así?
Como le comenté, no voy a entrar en temas de candidatos y de políticos. Pero si los señores Carlos Mesa y Evo Morales tienen ideas sobre salud y economía, yo las escucho con todo gusto.
 Las encuestas dicen que por la fragmentación de la oposición, ¿el MAS volvería a ganar, ¿lo cree justo con la lucha de ‘las Pititas’?
Soy una gran admiradora del movimiento de las Pititas. Y el gran valor de ese movimiento es que estuvo con el pueblo y luchando por la causa del pueblo. Y por eso estoy segura de que hoy el espíritu Pitita consiste en trabajar por las necesidades del pueblo y por las preocupaciones del pueblo. ¿Cuáles son esas necesidades y esas preocupaciones? Son la salud y la economía.

 Si eso ocurre, el partido de Evo Morales podría controlar la Asamblea, ¿es factible un gobierno en esas condiciones?
Ya usted conoce mi respuesta: salud y economía. Cómo combatir la pandemia y cómo reactivar la economía de Bolivia y de las familias y hogares bolivianos. Esos son los tema de los bolivianos.

 Desde su Gobierno se dijo que usted tenía una propuesta para Carlos Mesa, ¿podemos saber de qué se trata?
Otra vez: salud y economía. O economía y salud. Póngase en mi lugar: sería una impertinencia de mi parte utilizar esta oportunidad que me da EL DEBER para hablar temas que no le interesan a todos los bolivianos. A los bolivianos de oriente a occidente y de norte a sur les preocupa el empleo, les preocupa el hambre, les preocupa la falta de ingresos, les preocupa el virus, les preocupa los familiares y amigos contagiados y les preocupa el riesgo personal de contagio. Y con ese escenario tan difícil para el país, yo tengo el deber moral, como madre, como mujer y como presidenta, de concentrarme en esas preocupaciones. Salud y economía.

 ¿Considera justo que el MAS participe en las elecciones después del fraude?
La justicia y el voto lo dirán. Pero permítame que yo no entre en esas consideraciones en este momento y por eso, permítame que me concentre en economía y en salud.

 El MAS protesta en las calles y con bloqueos en medio de la pandemia, ¿qué opinión le merece eso?
Eso me preocupa. No por su dimensión política, sino por el riesgo para la salud de los vecinos. Le pido a los partidos, el MAS o cualquier otro, que no hagan aglomeraciones ni manifestaciones porque eso dispara los contagios y así, dispara el riesgo de fallecimientos.

 ¿El TSE debe quitarle la sigla al MAS?- Usted, como Demócrata, fue víctima directa de la anulación de 228 candidaturas en Beni, ¿cree que se debe actuar con la misma vara con el MAS?
Que el TSE responda de acuerdo a la ley en ese caso y en todos los casos. Pero en el tema de fondo debo insistirle que no estoy aquí como miembro de un partido, sino como presidenta de todos los bolivianos.

 ¿Hay un quiebre entre usted y el jefe de su partido, Rubén Costas?
Rubén nos ha ayudado mucho en la lucha contra la pandemia. Por ejemplo, mañana estamos visitando con él un hospital de la Gobernación en Santa Cruz. Un símbolo de la lucha de Rubén y sus equipos contra la pandemia, han sido el Dr. Urenda, el Dr. Tórrez y el Dr. García. Son héroes que han dado su vida en esta lucha. Para ellos va mi homenaje y en ellos nos inspiramos para seguir adelante en esta batalla. Ante semejantes sacrificios -y como estos sacrificios hay muchos entre médicos, militares, policías, funcionarios, y ciudadanos de a pie-, cómo cree usted que voy a ocupar ahora su tiempo y sus páginas en peleas o discusiones políticas entre partidos o dirigentes. Aquí hay que mirar en grande. Y mirar en grande es mirar los intereses de todos los ciudadanos. Y eso se llama salud y economía.

 Uno de los momentos más criticados de su gestión fue el uso de aviones de la FAB para transportar personas particulares. Una de ellas fue su hija, usted no se pronunció al respecto.¿Por qué?
Ordené aplicar de modo estricto el reglamento para el uso de aviones del Estado. Y desde luego, prohibí en lo personal y de modo tajante, que se haga uso de cualquier medio de transporte del Estado que no sea para funciones oficiales. En los casos que usted señala no hubo una falta y no hubo uso personal de esos aviones. Sin embargo, entiendo perfectamente que la población reclama más transparencia ante los políticos y por eso estamos trabajando en impulsar un Estado y un Gobierno con más y mejor transparencia.

 ¿Qué le han dejado estos casi 9 meses en la conducción del poder?
Yo vengo de una familia de clase media, una familia que trabajaba duro para salir adelante y para que la platita alcance. Mis padres eran profesores de una escuela fiscal. Y yo misma estudié en una escuela fiscal. Luego trabajé mientras criaba a mis hijos. Trabajé en un restaurante de la familia. Y luego estudié Derecho, también mientras criaba a los chicos. Yo sé lo que es el sacrificio por la familia y sé lo que es asumir responsabilidades. ¿Y sabe qué aprendí en estos meses de Gobierno? Aprendí que un presidente debe ver al país como ve a su familia. Y debe cuidar del país y de las personas como una, en la vida, cuida a su familia. Eso aprendí y así intento gobernar, pensando en Bolivia como en una gran familia.
 ¿Estar en campaña y manejar el país no genera una distorsión en las intenciones de reactivación económica?
Mi gestión tiene dos pilares: la salud y la economía. En economía tenemos tres tipos de políticas.
En primer lugar, para ayudar a los más necesitados. En este tipo de políticas están los bonos que hemos lanzado, las rebajas de los servicios, el adelanto de la jubilación de la renta Dignidad, entre otras.
En segundo lugar tenemos las políticas para conservar el empleo y las empresas. A esta etapa corresponden el Plan Salario y el Plan Empleo, dos planes de créditos para ayudar a las empresas a fin de que las empresas no despidan a sus trabajadores.
Y en tercer lugar tenemos las políticas para reactivar la economía y el empleo. Entre estas políticas está la creación de empleo masivo, donde el propósito es tener 600.000 beneficiarios entre empleos directos e indirectos en los siguientes dos años. Y dentro de esta política de reactivación también tenemos el Crédito 1,2,3, que es un crédito blando y fácil al cual puede acceder mucha gente, tanto de la economía informal como de la formal. Son políticas de estímulo a la demanda, para que las familias tengan recursos y con el consumo, ayuden a sostener y a mover la economía y el empleo.
Lamentablemente la Asamblea del MAS se niega a liberar más recursos para dar por ejemplo el bono Salud, o para ayudar a las empresas. Nosotros seguiremos luchando para ayudar a la gente, para conservar el empleo de los trabajadores y para reactivar la economía y crear nuevos empleos. Esa es nuestra visión y esa es nuestra tarea como Gobierno.

 ¿Por qué no sacaron a la gente del MAS de las entidades públicas?
En el Gobierno me gusta contar con gente que tenga tres condiciones. Una, que sea gente honrada. Otra que sea gente comprometida con la salud y la reactivación económica. Y finalmente que sea gente capaz. En muchos casos lo hemos logrado, en otros, no. Seguiremos trabajando para poner la mejor gente posible.

 ¿Hacen falta más bonos?
Sí. Definitivamente sí. Como sabe estamos esperando que el MAS libere el dinero para pagar el cuarto bono, que es el bono Salud. Y creo que todos los partidos y líderes del país, del color político que seamos, debemos hacer un pacto de Estado para proteger y para no quitar nunca los bonos que ya hemos puesto. Serán años difíciles y los hogares bolivianos seguirán necesitando de los bonos.

 ¿Qué sector de la economía busca fortalecer?
Nuestra economía necesitará una política global que impulse todos y cada uno de los sectores donde tenemos gran potencial como país. Ese es el mejor modo de empujar el empleo.
Por ejemplo: la agroindustria, la agropecuaria, la minería, los hidrocarburos, el turismo y la gastronomía, la construcción, la industria, las nuevas tecnologías y el comercio. Pero, además, hay varios sectores medianos y pequeños que pueden generar mucho empleo y que también necesitamos fortalecer; le cito algunos: la artesanía, la pesca e incluso los servicios en educación y la salud, donde el país ya ha dado pasos importantes trayendo consumidores del exterior, pero donde se pueden hacer avances aún más importantes.

 ¿Cuáles son las nuevas y próximas inversiones que llegarán al país?
Inversión extranjera es empleo. Y por eso apoyaremos siempre la inversión extranjera en Bolivia. La única condición es que los inversores cumplan nuestras leyes.
Como país tenemos muchas condiciones favorables para recibir inversiones. En muchos sectores. Desde la agroindustria, hasta las nuevas tecnologías, pasando por el turismo y los recursos naturales. Para eso es necesario que entre todos sigamos trabajando en la seguridad jurídica y en la estabilidad política del país.

 Después de la contracción económica, ¿van a devaluar?
No vamos a devaluar.

 Bolivia muestra niveles históricos de deuda externa ¿Qué harán, la reprogramarán o pedirán condonaciones?
Es algo que el país deberá encarar en el medio plazo. De momento la pandemia nos impide disminuirla y, al contrario, nos pone en la necesidad de buscar nuevos créditos para reactivar la economía, crear empleo y para mejorar la salud. Sin embargo es muy importante que a futuro estemos seguros de no despilfarrar el dinero como se hizo en el pasado. Toda deuda debe tener fines claros: invertir en la salud e invertir para reactivar la economía y el empleo.