La autoridad pidió a los representantes de las instituciones a recibir a la comisión técnica del INE, mientras que el rector de la Uagrm reveló que el Gobierno prevé presentar el cronograma de la gran encuesta la próxima semana en La Paz

29 de julio de 2022, 8:43 AM
29 de julio de 2022, 8:43 AM

El estadio municipal Máquina Vieja será el escenario de la segunda cumbre de instituciones cruceñas que prevé definir otras medidas de presión para exigirle al Gobierno que el censo se haga en 2023 y no en 2024, como establece el Decreto 4760. Con miras a este evento, representantes de varias instituciones se pronunciaron en favor de un nuevo paro de actividades para la próxima semana.

Pero no todos están de acuerdo en esa extrema medida. El alcalde Jhonny Fernández se opuso abiertamente a repetir la experiencia del 25 de julio y llamó a “explorar otros mecanismos de lucha”. Lo dijo ante la Comisión Interinstitucional que demanda una encuesta nacional “oportuna” y “transparente” para el 2023, y que se reunió ayer para escucharlo.

De hecho, el foco de atención estuvo todo el tiempo sobre Fernández y eso sucedió porque la autoridad edil estuvo el miércoles en La Paz donde conversó con el presidente Luis Arce sobre el censo en el contexto de un encuentro con los alcaldes de las ciudades capitales, además de El Alto. Este último municipio también demandó un censo para 2023.

La comisión también recibió el informe del vicepresidente del Comité pro Santa Cruz, Fernando Larach, quien participó en una reunión de cívicos en Cochabamba y del rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm), Vicente Cuéllar, quien se reunió la pasada semana con el Jefe de Estado en La Paz.

Al presentar el reporte sobre sus gestiones en La Paz, Jhonny Fernández insistió en el pedido para “despolitizar” el empadronamiento y anunció la intención del Gobierno de enviar a Santa Cruz y al resto de las regiones a una comisión técnica del Instituto Nacional de Estadística (INE) para proyectar una nueva fecha que sea “lo más pronto posible”.

Aseguró que llevó la propuesta realizar la actividad estadística en 2023, pero ante todo el pedido para que el INE use los datos de la cartografía elaborada por los técnicos del municipio

El informe no fue avalado por la mayoría de los representantes que asistió ayer a la reunión de la comisión; hubo momentos de tensión y al cerrar la deliberación, Fernández abandonó la comisión; lo hizo tras un vehemente pedido de respeto a su investidura y luego de rechazar un nuevo paro institucional como medida de presión.

“Nunca los he aludido, no les he faltado el respeto y no voy a permitir que me estén faltando al respeto una y otra vez, porque he sido elegido por el pueblo. Si vamos a seguir en esta lógica, yo no me presto a esto y no voy a volver más aquí”, declaró el alcalde.

Además advirtió a las instituciones que “están equivocando el camino. “Yo no quisiera prestarme a esto”, aseguró y lanzó un desafío para llevar esta problemática al escenario político.

 “Si queremos debatir políticamente, echémosle; yo le voy con cualquiera; así nomás. Hay escenarios para eso y no es este. Este alcalde ha hecho lo que correspondía; no he venido para que me aprueben o no; he venido a relatar un hecho. ¿Me van a tomar examen? Se equivocaron o querían que no vaya y me quede aquí; después me van a decir lo que le dicen al gobernador (Luis Fernando Camacho)", dijo.

Aquí somos gallitos para gritar; vamos allá (a La Paz) o recibámoslos aquí y que vengan para que los enfrentemos técnicamente porque yo no estoy de acuerdo con un paro. Esos métodos no funcionan, porque lo que quieren es desgastarnos, busquemos otro método de lucha”, remató Jhonny y abandonó la sesión que ayer se celebró en la sala de reuniones de la carrera de Veterinaria de la Uagrm.

De esta manera y sin la firma del alcalde de Santa Cruz, el Comité determinó convocar a una segunda cumbre departamental. Será este sábado 30 de julio, desde las 15:00, con el objetivo de “tomar las acciones necesarias para que el Gobierno establezca la realización del censo en 2023”. 

En la reunión, también se aprobó la conformación de una comisión de comunicación que se encargue de informar acerca de la importancia del censo y se mantuvo el estado de emergencia hasta que el INE no informe el estado del proceso.

En medio del debate, el rector Cuéllar reveló que recibió una invitación del Gobierno para participar de una reunión con todos los rectores y autoridades del Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana y el INE “para conocer el nuevo cronograma del censo”. Señaló que ese encuentro está previsto para la próxima semana, pero aún sin precisar el día exacto.

Cuéllar aseguró que no aceptó que la gran encuesta sea postergada hasta 2024, como lo ha previsto el Decreto 4760. Pero, sobre la base de esa norma, el INE comenzó a proyectar los siguientes pasos.
Larach, por su lado, afirmó que los cívicos del país aprobaron una resolución para exigir el censo para 2023. Afirmó que “el Gobierno está ganando tiempo” con esas comisiones técnicas y lamentó la falta de voluntad del Gobierno de buscar el diálogo con Santa Cruz.

Las posturas, que fueron de rechazo al informe de Jhonny Fernández, intentaron cuadrarse al mandato del Comité. Camacho recordó que recibió un mandato del Comité Interinstitucional. “Eso está por encima de mí; me guste o no. Un mandato que es para cumplirlo, no a mi gusto”, dijo.

Zvonko Matkovic, presidente de la Asamblea Legislativa Departamental, afirmó que una reunión de 10 alcaldes no estaba por encima de las determinaciones del Comité Interinstitucional.
Otros, como el diputado Erwin Bazán (Creemos) se fue en picada contra el reporte del alcalde. “El centralismo siempre encuentra actores que le ayudan a debilitar la posición de Santa Cruz. Muchas veces los enemigos están adentro”.

Por la misma línea, estuvo el concejal Juan Carlos Medrano: “Lo que pasó en La Paz fue una traición al pueblo”, dijo, y luego se refirió a la existencia de ‘infiltrados’ en esa comisión y pidió “pelar capucha de verdad”; una expresión que Fernández usó antes, también en el contexto del censo.

La diputada Luisa Nayar, por su lado, se fue sin rodeos: “Señor alcalde, ¿está con el MAS o con el pueblo cruceño y sus necesidades?”, le preguntó a quemarropa.

Pese a que al inicio de la junta el rector de la Uagrm había pedido que no hubiera aplausos ni otros ruidos de ‘barras’, por momentos el público no pudo contenerse.
Eso sí, quienes tomaron la palabra confirmaron la necesidad de que el censo se realice en 2023.

La legisladora departamental Paola Aguirre instó a la comisión a arriesgarse y radicalizar las medidas: “Como Asamblea Legislativa Departamental estamos absolutamente convencidos de que el Gobierno no va a dialogar con Santa Cruz, por eso es importante tomar conciencia y arriesgarnos. Si el censo se lleva en 2024 no va a ser culpa del Gobierno, va a ser culpa de nosotros que, como autoridades, nos habremos aplazado, si permitimos tal división”.

Aguirre y Camacho remarcaron que el proyecto de ley para que en el departamento se pueda realizar un levantamiento estadístico ya está en la Asamblea Legislativa Departamental, para su tratamiento; lo que es un avance en los mandatos que la Comisión Interinstitucional ya planteó.

Por otro lado, la expresión “despolitizar el censo”, que el Gobierno ha estado manejando como mensaje clave en las últimas semanas, fue cuestionada por los diputados Bazán y Centa Reck.

Para la legisladora equivale a decir: “desmovilicemos el censo”; y negó la posibilidad a esa opción. Por ello invitó a las mujeres y a los jóvenes a salir a las calles para conseguir sus reivindicaciones.

Mientras la Comisión terminaba de deliberar, el presidente Arce participó en el Congreso Fundacional de la Coordinadora Departamental de Profesionales de Santa Cruz que se realizó en instalaciones de la Fexpo.

Más temprano, Arce se reunió con dirigentes de las Comunidades Interculturales y con los alcaldes de varias provincias cruceñas que participaron el martes de una movilización convocada para respaldar a su Gobierno.