El vocero presidencial ratificó las declaraciones de Luis Arce, negando que exista injerencia política en la justicia boliviana. También dijo que no se tienen "relaciones profundas" con las dictaduras de Venezuela, Nicaragua e Irán.

22 de septiembre de 2022, 12:47 PM
22 de septiembre de 2022, 12:47 PM

Después de que el presidente Luis Arce negara en Naciones Unidas que el sistema judicial boliviano enfrenta una grave falta de independencia y que los informes emitidos por los organismos internacionales sobre ese tema fueron elaborados con “información insuficiente”, el vocero presidencial Jorge Richter defendió la postura del mandatario y afirmó que esta creencia cae en el “misticismo”.

“Usted se imagina que, en el país, a simple llamada telefónica de un político se modulan los fallos judiciales, usted cree que eso ocurre en el país de forma generalizada, común y de todos los días, eso no es así”, expresó Richter durante una entrevista con el programa “Influyentes” de EL DEBER Radio.

El vocero no negó que la justicia boliviana sea “un desastre”, es más, dijo que prefería someterse a un acuerdo antes de llegar a un juzgado; sin embargo, sí descartó que la justicia sea manejada a órdenes del oficialismo, pese a que todos los juicios que se abrieron en contra de los dirigentes y militantes del MAS fueron cerrados, archivados o desestimados; y por el contrario, se agudizaron los casos en los que están involucrados los opositores políticos.

“La administración de la justicia no garantiza transparencia, rapidez, no fluye y no da certidumbres de independencia o transparencia u objetividad en sus fallos, eso nadie ha dejado de reconocer, pero lo otro de que un político alce un teléfono y module un fallo, yo creo que eso tiene bastante misticismo que se instala desde la política”, aclaró.

Seguido de esto, se le cuestionó qué tan independiente puede ser la justicia cuando el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, y el contralor Wilfredo Chávez tienen vínculos directos con el MAS. A lo que el vocero respondió que fueron elegidos por un proceso de selección, mecanismo que se tendría que cambiar para elegir a una persona de forma objetiva y sin vinculación política.

Asimismo, se le consultó si no le parece contradictorio que el Gobierno se considere democrático y pacifista cuando mantiene relaciones fluidas con dictaduras como Venezuela, Cuba y Nicaragua, además de Irán, país donde recientemente se produjo la muerte de Mahsa Amini, presuntamente a manos de la denominada, “policía de la moral” por violar los códigos de vestimenta, y con el cual el presidente Luis Arce se reunió el martes para evaluar la agenda bilateral existente entre los dos países desde 2007.

Richter respondió que, con ninguno de estos países Bolivia tiene “relaciones profundas”, a excepción de Cuba, al que se le tiene una “consideración bastante particular por la historia y la lucha del pueblo cubano y lo que significa el proceso de la revolución cubana, los objetivos y las utopías que siguen demostrando muchas cosas para el mundo entero”.

Vea la entrevista completa en EL DEBER Radio: