Los dirigentes que impulsan el retorno de Evo al poder anunciaron ayer que Luis Arce y David Choquehuanca llegarán “como invitados” a la reunión política de Lauca Ñ. El presidente del Estado acudirá a El Alto

23 de agosto de 2023, 7:30 AM
23 de agosto de 2023, 7:30 AM


Octubre otra vez. El partido que gobierna Bolivia desde hace 17 años enfrentará, en el curso de los próximos 50 días, el proceso político de renovación de dirigentes más reñido de su historia y este clima de tensión y rupturas fue ratificado ayer por dirigentes políticos y sociales. 

Por una parte, los seguidores del presidente Luis Arce, quienes no ocultan el proyecto de su reelección en 2025, anunciaron que el MAS renovará sus dirigentes en un congreso que tendrá lugar en El Alto entre el 3 y 5 de octubre y no en el trópico de Cochabamba, como señala la convocatoria de la dirección nacional del partido, controlada por la facción ‘evista’.

“En El Alto se va a renovar una nueva directiva nacional, donde las bases van a elegir, ya sea a Luis Arce o el jilata David Choquehuanca como presidente del MAS. La dirección nacional no puede estar al mando de una gallina, tiene que estar al mando de un cóndor y ese ese cóndor será Lucho o David”, afirmó ayer el diputado Rolando Cuéllar, el portavoz de la bancada ‘arcista’ en la Asamblea Legislativa.

La postura, refrendada por varios de sus colegas como la senadora Virginia Velasco, emergió poco después de la decisión de los dirigentes ‘evistas’ de marginar al presidente Arce y al vicepresidente David Choquehuanca de las decisiones políticas que se asuman en el próximo congreso del MAS.

El dirigente Rodolfo Machaca, de la facción ‘evista’ del MAS, informó que los mandatarios serán invitados a Lauca Ñ.

“Como mandatarios, por respeto los vamos a invitar, ya después, más allá, no podemos decidir por ellos. No van a tomar decisiones”, dijo Machaca.

El abogado Diego Jiménez, quien representa a partido en el Tribunal Supremo Electoral (TSE), explicó que aún esperan que esa entidad estatal designe un observador para el evento político. El jurista afirmó que en las próximas horas se aprobará esa supervisión “luego de haberse superado observaciones respecto a la convocatoria del congreso”.

Según el estatuto del MAS, la organización política está sustentada en tres instituciones “fundadoras”: la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), los Interculturales y la Confederación de Mujeres Campesinas Bartolina Sisa, que tienen representación en la dirección nacional del partido. 

De hecho, los dirigentes de estos sectores deberían avalar la convocatoria al congreso, pero la pugna entre Evo Morales y Luis Arce impactó en las bases del partido.

En Santa Cruz, el dirigente campesino Ponciano Santos, elegido líder de la Csutcb de la facción ‘evista’, lanzó la convocatoria para el congreso en Lauca Ñ y recordó el plazo de 72 horas que otorgó para que le entreguen las oficinas de su organización que está en La Paz. 

“Si no nos entregan, tenemos una reunión a las 10 de la mañana con todas las federaciones departamentales y regionales en La Paz, donde determinaremos qué vamos a hacer, cómo vamos a recuperar nuestra sede”, declaró ratificó el estado de emergencia.

Las Seis Federaciones del trópico de Cochabamba se declararon en emergencia. En un pronunciamiento aseguran que Arce planifica un boicot al congreso nacional previsto para octubre.

La facción que respalda al presidente Arce eligió al dirigente aymara Lucio Quispe como nuevo ejecutivo de la Csutcb, tras un violento congreso que concluyó con 450 lesionados, según la Policía.

El dirigente aún no se pronunció sobre el congreso del MAS, pero llamó a la unidad de su sector, a tiempo de ratificar su apoyo al Gobierno del presidente Luis Arce.

“Esta facción leal al instrumento y a las bases vamos a constituirnos en una nueva bancada alejándonos de los mal llamados renovadores (que respaldan a Arce y) que en el fondo son traidores del instrumento político”, dijo en La Paz, el diputado Gualberto Arispe de la facción ‘evista’.