La DEA de Estados Unidos, junto a las agencias antidroga de Brasil, España y Paraguay, trabajaron de manera coordinada con Europol en un operativo que concluyó el 15 de febrero. Hay compradores de vehículos que hacen negocios en esa zona.

19 de febrero de 2022, 18:06 PM
19 de febrero de 2022, 18:06 PM

La poderosa red de narcotraficantes que cada mes colocaba en Europa “varias toneladas de cocaína boliviana” operaba desde un centro de comando en Dubái, señaló la Policía Europea (Europol) en el informe de la inédita operación que ejecutó el 15 de febrero.

Ese día, el operativo se ejecutó de manera simultánea en Brasil, España y Paraguay, tras dos años de seguimiento en los que participó la DEA, la agencia antidroga de Estados Unidos, así como la Policía Federal de Brasil y la Secretaría Antidroga de la Presidencia de Paraguay.

Durante el seguimiento, las autoridades descubrieron una infraestructura de producción de cocaína en Bolivia “con líneas logísticas y de suministro en Brasil, Paraguay y Uruguay”, desde dónde eventualmente se embarcaban los alijos para ser transportados vía marítima.

“La investigación también descubrió que los centros de comando y control de la organización estaban en Dubái”, subraya el reporte.

Además, revela que “la organización criminal montó una red de empresas para permitir la importación de drogas desde Sudamérica y el lavado de las ganancias relacionadas”, por eso “testaferros en la nómina de la organización controlaban esta red de empresas”.

Según una investigación de la Cámara Automotor Boliviana (CAB), desde 2011 en el país se han montado empresas que compran vehículos del “mercado gris” de concesionarias en Dubái, Emiratos Árabes Unidos y Omán. Ese reporte considera que estas actividades están relacionadas con el lavado de dinero, pero no precisa vínculos con el narcotráfico.  

OPERATIVO

Europol señaló que la operación internacional incluyó 40 allanamientos en Brasil, Paraguay y España en los que se detuvo a unas 30 personas. Las incautaciones incluyeron, drogas, vehículos, armas de fuego, dinero en efectivo y varias cuentas bancarias en Brasil, Paraguay y España, señala el reporte. “Todas esas acciones tuvieron lugar el 15 de febrero”, señala.

La investigación llevó al descubrimiento, además, de una red de distribución con base en las ciudades españolas de Valencia y Barcelona que se encargaba de recibir los cargamentos de cocaína y distribuirlos en el mercado europeo.

Autoridades brasileñas y españolas interceptaron varios de estos envíos e identificaron a algunas de las empresas involucradas en el esquema criminal.

Bolivia acoge desde hace unos dos años al Centro Regional de Inteligencia Antinarcóticos (Cerian), un proyecto que financió la Unión Europea (UE), pero que no fue mencionado en el informe de la Europol, pese a que el origen de la droga era Bolivia.

Las autoridades nacionales, en el informe de interdicción de 2021, señalan que en Bolivia se refina la cocaína que es procesada inicialmente en Perú. El año pasado se destruyeron 46 pistas clandestinas, una de ellas estaba asfaltada y otra fue detectada en Tarija.

Además, el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, negó en varias ocasiones la presencia de la DEA en el país. Lo hizo tras el reclamo de extradición que emitió Estados Unidos para poder juzgar al coronel Maximiliano Dávila, exjefe antidroga del gobierno de Evo Morales.