Tres bandas venezolanas y una peruana compiten en el tráfico de drogas y armas con el Tren de Aragua en la frontera entre Bolivia y Chile
Son cuatro mafias que trabajan o pelean con el Tren de Aragua: son el Tren del Coro, La Mafia del Norte, Los Gallegos y Los Pulpos
Las mafias en el norte de Chile se han masificado. Cuatro de ellas -relativamente nuevas- extendieron sus operaciones a la frontera con Bolivia. El Tren del Coro, La Mafia del Norte, Los Pulpos y Los Gallegos son las bandas criminales que pugnan por el poder delictivo en la zona norte chilena y también en el límite fronterizo con Bolivia. Además, estas organizaciones -que tres de ellas son venezolanas y una peruana- tienen nexos con otras mafias más pequeñas en varias zonas de Chile.
La Fiscalía Regional de Tarapacá (Chile) hizo un estudio sobre las mafias que están operando en el norte del vecino país. Todas se dedican al narcotráfico y a otros delitos como la trata y tráfico de personas, préstamos “gota a gota”, sicariato, robos y otros delitos.
Una de las bandas más temidas es La Mafia del Norte, una organización criminal venezolana que pugna territorios en el norte de Chile con otras mafias del mismo país, como el Tren de Aragua o el Tren del Coro. Este grupo delictivo, según la Fiscalía de Tarapacá, se asentó en la región de Ñuble hace cuatro años. “La Mafia del norte aquí en Chillán (ciudad de Chile). Estamos cazando, estamos cazando”, se escucha en un video en el que se ve a ciudadanos venezolanos con armas y hasta granadas. Chillán era una de las pocas ciudades seguras de Chile hasta que llegó La Mafia del Norte, según el texto fiscal.
En un segundo video se aprecia a dos hombres hablando a una cámara, mientras uno sostiene a primera vista una metralleta y el otro una pistola. “La Mafia del norte aquí en Chile”, aseguran los delincuentes en el video.
En un informe de la Brigada Antinarcóticos y Crimen Organizado (Brianco) de la Policía de Investigaciones (PDI) de Chile, que fue publicado por EL DEBER a inicios de año, mostró que La Mafia del Norte tiene nexos con grupos de narcotraficantes en Bolivia. Además, se dedica principalmente a la trata y tráfico de personas con fines de explotación sexual.
El subsecretario del Interior y Seguridad Pública de Chile, Manuel Monsalve, destacó que estas cuatro bandas criminales han reemplazado el delito individual típicamente registrado para llevarlos a gran escala.
“El delito que antes lo cometía una persona, ahora es realizado por organizaciones sofisticadas que planifican a gran escala el tráfico de estupefacientes, de inmigrantes, la trata de personas, el contrabando o los delitos de ciberseguridad”, dijo Monsalve.
Estas mafias, según el informe de la Fiscalía Regional de Tarapacá, se extendieron a comunas chilenas fronterizas, como Colchane y Chungará, donde están los pasos fronterizos oficiales y que son las rutas que usan para llevar droga y traficar personas desde Bolivia a Chile.
Hoy, La Mafia del Norte pelea espacios con el Tren de Aragua en las ciudades del norte chileno y se dedican al sicariato y al narcotráfico, principalmente.
“La Mafia del Norte, aquí en Chillán, estamos cazando, estamos cazando, estamos activos, ahí, hermano”. “En la película mi taita, usted sabe y somos puros venezolanos, dispuestos a dar la cara”, son dos mensajes que grabaron miembros de esta banda en redes sociales mostrando armas de largo alcance.
El Tren del Coro
Otra de las mafias es el Tren del Coro. Esta banda criminal, que opera en Arica e Iquique, se hizo conocida por descolgarse de Los Gallegos y, al igual que el Tren de Aragua, debe su nombre a su lugar de origen. En este caso es la región de Coro, Venezuela.
En 2022, se conoció que el Tren del Coro se enfrentó en una “guerra” contra Los Gallegos por la disputa del Parque Diego Portales, en la ciudad de Arica, con el objetivo de apoderarse del control territorial. Eso derivó en homicidios y enfrentamientos.
El Tren del Coro es conocido por cometer los delitos de robo con intimidación, internación ilegal de armas al país, tráfico de drogas y tráfico de migrantes.
En junio de este año, la Fiscalía de Arica y Parinacota inició un nuevo juicio contra las cabecillas del Tren del Coro, quienes son acusados por delitos de robo con intimidación, tráfico de drogas, internación ilegal de armas al país y porte ilegal de armas de fuego y munición. En el informe fiscal chileno se muestra que esta mafia se expandió a la frontera con Bolivia para introducir droga y armamento.
Por estos ilícitos es que el Ministerio Público de Arica pide 159 años de cárcel para los tres acusados del Tren del Coro: un ciudadano colombiano y dos venezolanos, identificados como Germán Padilla Díaz, Deiker Pérez Pérez e Ismael Medina Morillo, respectivamente.
Los rivales del Tren del Coro son Los Gallegos, también de origen venezolano. El año pasado se detuvo a una gran cantidad de personas pertenecientes a esta banda del crimen organizado, que es una de las diferentes células del Tren de Aragua en Chile.
Cuando comenzó el juicio oral, durante abril de este 2024, la Fiscalía detalló que este grupo se instaló en Arica alrededor de marzo de 2022, siendo esta la principal ciudad donde se tiene rastro de su operación.
Se les imputan delitos como homicidios, secuestros, tráfico de drogas y armas, trata de personas para fines sexuales y tráfico de migrantes. Según los informes de Chile, esta mafia llegó hasta la frontera de Chungará para introducir drogas. También tiene nexos con grupos bolivianos.
Desde el Perú
Los Pulpos se trata de una banda criminal de Perú de la que varios miembros han sido detenidos por diversos delitos en Chile. Sus orígenes se remontan alrededor del 2000 en suelo peruano. Esta mafia logró expandirse al norte de Chile y también a fronteras con Bolivia, por ejemplo, Desaguadero, desde donde pasan migrantes a Bolivia y luego al norte de Chile.
A diferencia de los otros grupos criminales venezolanos, Los Pulpos no se caracterizan por el tráfico de droga. Lo suyo serían los secuestros y extorsiones, cuyas principales víctimas serían comerciantes de las zonas chilenas de Recoleta, Independencia y Estación Central, en la región Metropolitana.
Según el subcomisario Carlos Fuentes, de la Brigada Investigadora del Crimen Organizado de la PDI, Los Pulpos suelen enviar videos por WhatsApp de armas y municiones, además de los mismos locales comerciales, para amenazar de muerte a los dueños y obtener dinero.
En el informe de la PDI también se menciona que el mexicano Cártel de Jalisco Nueva Generación utiliza vías con la frontera boliviana para introducir droga a Chile. En ese país, esta banda mexicana tiene representantes que cometen delitos de secuestro, asesinato y el tráfico de drogas desde Bolivia.
En el país descartaron la presencia de mafias y aseguran que en Bolivia hay emisarios que tienen nexos con otras bandas.