Alertó que hay que ganar algo muy importante el 2023: la justicia. "Si ganamos la justicia y el Ministerio Público, cosa que es extremadamente difícil, pero la podredumbre ha llegado a tal grado que es posible, podemos tener un triunfo que nos garantice el 2025”, manifestó

7 de octubre de 2022, 20:45 PM
7 de octubre de 2022, 20:45 PM

Una extensa reflexión sobre los sucesos de 2019 y 2020 fueron expuestos por el expresidente y candidato de Comuniad Ciudadana, Carlos Mesa, en un conversatorio sobre democracia que organiza la Universidad Católica, en donde hizo una defensa férrea acerca de su rol que en varias oportunidades se ha sido cuestionado:


“Me he cansado de escuchar‘el Mesa es medio mariconazo’. (Pues) el mariconazo ha estado aquí desde 2005, acusado en 7 juicios, ha dado la cara en todos ellos, y todavía está sobre mi cabeza el caso Quiborax. Enfrenté a Evo Morales, el tipo más poderoso de este país, y lo obligué a una segunda vuelta que lo llevó al fraude”, lanzó el exmandatario, resaltando que sigue al frente de la oposición.



Hablo también sobre el desafío que tiene Bolivia en el próximo año, que es ganar la elección judicial y el Ministerio Público; también dijo que si no se logra ese objetivo será imposible pensar en una victoria electoral en 2025.


La carrera de comunicación social de esta casa de estudios superiores organiza una serie de eventos con motivo de recordar el 10 de octubre de 1982, cuando Bolivia recuperó la democracia e invitó a personalidades a reflexionar sobre este hecho. Sin embargo, el expresidente tuvo que referirse a los sucesos de 2019 y 2020 cuando le lanzaron preguntas directas sobre esas fechas.


De acuerdo con su explicación, para las elecciones de octubre de 2020 él era el candidato que había logrado la mayor votación un año antes y pese a eso los otros candidatos le pidieron que se baje de la candidatura y apoye a alguno de los otros candidatos.


“Era muy difícil que yo, el candidato con mayor intención de voto que recibí el 30%, después me retirara de la elección para lograr la unidad, no me tocaba a mí la unidad, le tocaba a Luis Fernando Camacho, le tocaba Jeanine Áñez, le tocaba Tuto Quiroga”, recordó en clara alusión a los frustrados acuerdos políticos que no permitieron un solo candidato que enfrente al binomio Lucho-David, del MAS.


Además habló sobre lo que se viene, augurando un triunfo sobre el MAS solo  “si somos capaces de bajarnos en nuestro ego, de establecer la lógica de la unidad, no como discurso retórico, sino de construir un espacio de unidad de oposición frente al presidente (Luis) Arce. Si el MAS llega al 2025 con la justicia en la mano, con el Ministerio Público en la mano y el Tribunal Electoral en la mano, no veo posibilidades de ganar (las elecciones)”, dijo el exmandatario.


“¿Cómo derrotar a Evo Morales y a Luis Arce?, solo en democracia y solo a partir de una masa crítica como la de las pititas del 2019. Todavía estamos lejos de ello, tenemos que ganar algo muy importante el 2023, la justicia, si ganamos la justicia y el Misterio Público, cosa que es extremadamente difícil, pero la podredumbre ha llegado a tal grado que es posible, podemos tener un triunfo que nos garantice el 2025”, alertó.


También reconoció que hubo "estúpidos errores" que cometió su bancada de CC en el parlamento y aprovechó el momento para pedir disculpas sobre la ausencia de varios legisladores que benefició al MAS para la designación de su candidato, Pedro Callisaya Aro como nuevo Defensor del Pueblo.