El mandatario acudió a la inauguración de la construcción del acantaralliado en la zona norte de El Alto. Allí, los vecinos le pidieron que no suba tanto los precios del aceite y el arroz.

5 de diciembre de 2024, 13:53 PM
5 de diciembre de 2024, 13:53 PM

Tras un acto público que tuvo lugar el 4 de diciembre en El Alto, el presidente Luis Arce responsabilizó “a los cambitas” por el incremento de productos básicos de la canasta familiar. Formuló esta declaración ante los reclamos de ciudadanas por estas variaciones de precios.

Arce protagonizó un acto con el que se dieron por iniciadas las obras para la construcción de la ampliación del sistema de alcantarillado sanitario para los distritos 4, 5 y 13 de El Alto. Concluida la formalidad de ese evento saludó a los asistentes y fue en ese contexto que se dio el reclamo.

“¡Hermano Arce! ¡Que baje pues arroz y aceite, porque has hecho subir mucho!” se escucha el pedido de una ciudadana en medio de los saludos. Otros ciudadanos también le pidieron que los precios se estabilicen porque, en criterio de estas personas, el costo de vida se ha elevado.

“Otra vez, como en 2007 y 2008 los cambitas nos están jugando sucio”, respondió Arce de acuerdo con un registro audiovisual que se hizo viral a través de varias plataformas. La alusión del mandatario tiene que ver con el sector agroindustrial afincado especialmente en Santa Cruz.

Entre 2007 y 2008, los años a los que hizo referencia Arce, el gobierno de Evo Morales, del que formó parte Arce, libró un prolongado conflicto para la modificación de las leyes que tienen que ver con la propiedad y el uso de la tierra, además de la redacción de una nueva Constitución.

En ese tiempo, el gobierno de Morales también puso cupos a la exportación de aceites vegetales para estabilizar los precios en territorio nacional. La medida generó entonces una controversia con el empresario Branco Marinkovic, que tenía el control de varias firmas oleaginosas. 

Con miras al presupuesto de 2025, Arce remitió hace un mes el proyecto de la Ley Financial de ese año. La normativa prevista prevé el control, la confiscación a los “actores de comercialización de alimentos que encarezcan los precios de los mismos”.

“Con la finalidad de garantizar la disponibilidad y abastecimiento de alimentos esenciales, se faculta a las entidades competentes, activar acciones de control, fiscalización y confiscación de productos, a los actores de comercialización de alimentos, que almacenen o retengan y pretendan encarecer los precios de los mismos”, se lee en la disposición adicional séptima.

En el punto II de mismo documento se puntualiza que “todo actor de la cadena productiva de alimentos esenciales, debe declarar, información de producción, transformación y comercialización, misma que tendrá calidad de declaración jurada y será tratada bajo el principio de confidencialidad, conforme a la reglamentación aprobada por la Resolución Biministerial emitida por los ministerios de Desarrollo Rural y Tierras y de Desarrollo Productivo”.

El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, enfatizó que la inclusión de esta disposición responde a una demanda ciudadana, que exige un esquema de control contra el agio y la especulación. “Le hemos aclarado a la CAO (Cámara Agropecuaria del Oriente) que no es algo dirigido contra los productores o contra los intermediarios (…) sino contra aquellos malos operadores que se dedican al agio y la especulación. Este es el propósito de la norma”.

La CAO y otras entidades vinculadas con la agroindustria rechazaron cualquier intención del Gobierno de confiscación, mientras el proyecto de presupuesto aún no ha sido debatido en la Asamblea Legislativo. Montenegro debe acudir este viernes para aclarar las dudas y viabilizar el tratamiento legislativo del documento.