Pobladores de los Yungas venden cada insecto a Bs 200 a los traficantes y en Japón llegan a costar hasta $us 500

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13 de febrero de 2020, 15:09 PM
13 de febrero de 2020, 15:09 PM

Una investigación de la National Geographic revela cómo está operando el tráfico ilegal de escarabajos 'rompe focos' en peligro, una especie en extinción en Bolivia. Traficantes japoneses y de otros países llegan hasta Coroico en busca de esta especie endémica del país. Los precios elevados en Japón seducen a los contrabandistas de insectos.

La investigación, realizada por el periodista boliviano Eduardo Franco Berton, reveló que los traficantes de insectos llegan todos los años hasta la región paceña de los Yungas, donde se encuentra Coroico, para llevarse a los escarabajos 'rompe focos' (Dynastes satanas), una variedad de escarabajo rinoceronte que es endémico de Bolivia.

Entre los meses de enero y mayo, comunarios de Coroico y localidades aledañas, atrapan al Dynastes satanas utilizando un generador de energía de 250 watts y una sábana blanca. Los escarabajos llegan atraídos por la intensidad de la luz blanca y son atrapados por los cazadores al chocar contra las sábanas.

Luego los pobladores venden cada insecto a 200 bolivianos a traficantes japoneses y peruanos, quienes llegan hasta Coroico para concretar las negociaciones ilegales. Una vez en Japón, su precio asciende hasta los 500 dólares. Un valor que se determina cuidadosamente de acuerdo a su tamaño, forma y longitud de los cuernos que tiene cada escarabajo.

Según el Libro Rojo de los Invertebrados de Bolivia, el 'rompe focos' es una especie endémica de Bolivia que habita en las provincias Franz Tamayo, Murillo, Nor Yungas, Sud Yungas y Caranavi en el departamento de La Paz; Chapare, en Cochabamba; y Valle Grande e Ichilo, en Santa Cruz.

En su publicación, National Geographic revela que traficantes japoneses llegan hasta Coroico para contratar los servicios de guías de turismo locales, quienes los llevan hasta los sitios en donde capturan al insecto.

En Bolivia, esta especie está protegida por los artículos 110 y 111 de la Ley del Medio Ambiente N° 1333, además del artículo 223 del Código Penal que establece una pena máxima de hasta seis años de cárcel para las personas que sustraigan o exporten bienes pertenecientes al dominio público.

También, los Decretos Supremos N° 22641 de 1990 y el N° 25458 de 1999 prohíben la captura, colecta y almacenamiento de especies de fauna y flora silvestre del país.

A continuación, el video muestra a escarabajos 'rompe focos' a la venta en tiendas en Japón:

¿Cómo están operando los traficantes?

Un traficante en Tokio, según publica NatGeo, confesó que transporta escarabajos de manera ilegal dentro de su maleta. Además, el hombre, quien comercializa con más de 15 especies de escarabajos de distintas partes del mundo en una página de Facebook, detalló sus planes de llegar a Bolivia el 2020 para capturar escarabajos.

Algunos japoneses les han enseñado a los comunarios a criar escarabajos en cautiverio para poder llevarse las larvas, una nueva modalidad que les facilita el paso por los controles en las trancas, aduanas y aeropuertos.

Apuestas clandestinas y peleas de escarabajos

En Japón, el Kabutomushi, como se conoce al escarabajo rinoceronte en japonés, es bastante requerido para su uso como mascotas para niños y adultos. Es tanto así que durante el verano los menores salen a los parques urbanos y áreas verdes a atrapar estos insectos.

Inclusive, se organizan campeonatos y torneos nacionales, en los que cada niño lleva a su escarabajo a competir. Muchas de estos combates pueden ser vistos también en distintos canales de YouTube

No obstante, National Geographic reveló que otra actividad que está promoviendo el tráfico ilegal de estos insectos son las peleas clandestinas en internet. Es así, que en varias páginas de la ‘’Dark Web’’ (internet oscura) se organizan peleas de escarabajos ilegales, en las que corren elevadas apuestas que se pagan con criptomonedas.

Esta modalidad, les permite a los involucrados no dejar rastros sobre su actividad, ya que gran parte de las apuestas están prohibidas en Japón según el Código Criminal del país.

El entomólogo Fernando Guerra Serrudo, quien es investigador asociado de la Colección Boliviana de Fauna en el Instituto de Ecología y el Museo de Historia Natural en La Paz, señala con preocupación que si se continúa extrayendo un número elevado de escarabajos la especie puede desaparecer.

A continuación, te invitamos a ver a una fotogalería sobre el tráfico de escarabajos:

Escarabajo hércules en una tienda de insectos en Tokio, Japón



Coroico Viejo es uno de los pueblos donde capturan escarabajos para traficarlos a Japón

Insectos en tienda de insectos en Osaka
Escarabajos disecados en Osaka, Japón

Escarabajos  'rompe focos' capturados en Coroico, La Paz

Escarabajos 'rompe focos' capturados en Coroico


Un escarabajo 'rompe focos' en una tienda de insectos Japón



Fernando Guerra, el boliviano que se dedica a la investigación de escarabajos