Según las explicaciones del jefe de Estado, las condiciones adversas internacionales (para la llegada de créditos) se agravaron con el sabotaje desde el Legislativo

24 de diciembre de 2024, 11:18 AM
24 de diciembre de 2024, 11:18 AM

Con carencia de combustibles aún el día de la Nochebuena; con precios disparados y sin control por Navidad; las calles de la sede de Gobierno convertidas en una gigantesca feria, el presidente del Estado, Luis Arce, insistió nuevamente en que el país está bien económicamente y que el 2025 será mejor.


“Todos sabemos que ha sido un año difícil, pero, estamos bien, vamos a continuar creciendo y vamos a continuar mejorando la economía”, dijo el primer mandatario en una breve declaración en Santa Cruz donde asistió a la ch’alla de un centro de hemodiálisis en la ciudad de Warnes.


Similar discurso utilizó Arce el jueves en el encuentro que tuvo con los periodistas que cubren el área política. En el encuentro calificó como “el año más duro” de su mandato y consideró que la tormenta económica pasó y que el 2025, año electoral, será considerablemente mejor que este 2024.


Desde febrero de este año, el Gobierno no puede suministrar al país el combustible necesario y las consecuencias se agravaron cuando los productores pidieron diésel para la cosecha de soya y la siembra de arroz. Se sumó la falta de dólares en el mercado nacional y las autoridades intentaron minimizar esa carencia de la moneda estadounidense.


De acuerdo con la explicación del presidente, las condiciones económicas internacionales afectaron al país y se vieron agravadas por el sabotaje que enfrentó desde el Legislativo donde le negaron más créditos internacionales, supuestamente, para evitar seguir hipotecando al país.


Ante esa negativa legislativa, el arcismo adoptó la estrategia de incluir todos los créditos posibles en el proyecto de ley del Presupuesto General del Estado (PGE) 2025 y salvar la crisis económica que vive el país. Aunque la propia Constitución Política del Estado (CPE) en sus artículos 158 y 322 facultan a la Asamblea a autorizar los créditos que solicite el Ejecutivo.