Los bloques del oficialismo se reunieron con el viceministro Gustavo Torrico para definir el apoyo a la aprobación de la ley del censo. Los ‘arcistas’ afirman que es una forma de frenar el ‘golpe’ promovido por sus colegas y por líderes cruceños

28 de noviembre de 2022, 7:15 AM
28 de noviembre de 2022, 7:15 AM

Los dos bandos del MAS siguen enfrentados por pugnas de poder. En lo que coinciden los seguidores del presidente Luis Arce y los del exmandatario y jefe del instrumento político, Evo Morales, es que el enemigo en común y a vencer es Santa Cruz.

Las diferencias afloraron este fin de semana, cuando el expresidente Evo Morales calificó de “traidores” a los diputados que aprobaron, el sábado por la madrugada, el proyecto de ley del Censo de Población y Vivienda en los ámbitos financiero y electoral, a pesar de que el proyecto recibió votos a favor de parlamentarios del MAS que responden a su línea.

El Comité Interinstitucional por el Censo en Santa Cruz exigió que se elevara a rango de ley el Decreto Supremo 4824, emitido por el presidente Arce el 12 de noviembre, que contempla la realización del censo para el 23 de marzo de 2024, que los resultados censales se entreguen en septiembre para que se produzca la redistribución de recursos y que se proceda con la redistribución de escaños parlamentarios en función a los resultados de la encuesta.

Después de la aprobación del proyecto de ley del censo en Diputados (el sábado por la madrugada), Morales escribió en su cuenta oficial de Twitter: “Hemos vuelto a la democracia pactada de la época neoliberal, a la pactocracia, o gobiernos de pacto a espaldas del pueblo, la ley del censo es el pacto de la impunidad entre traidores renovadores y masacradores de nuestros hermanos. Los revolucionarios no negociamos con la derecha”.

Desde el bando de Arce, la respuesta llegó de la diputada Deysi Choque, proyectista de la ley. “Yo entiendo muy bien a los colegas parlamentarios que estaban soñando que continúe la protesta en Santa Cruz para debilitar a nuestro Gobierno; yo entiendo bien por qué están haciendo correr esas cadenas y son personas supuestamente del MAS, sigan soñando si creen que le van a dar un golpe a nuestro Gobierno. ¿Vienen a hablar de traidores? Aquí no es censo, no es escaños, ni distribución económica sino aquí era buscar la bandera del federalismo”, sostuvo Choque.

La legisladora por Santa Cruz aprovechó para recordarles a sus colegas de partido que en 2019 defendió el gobierno de Morales y ahora protege la gestión de Luis Arce ante los intentos de desestabilización.

“Aunque esos sinvergüenzas, que nos están llamando traidores por buscar la paz en mi departamento y me apunten con el dedo, esta traidora va a dormir tranquila, con la conciencia de haber hecho algo”, aseveró.

Para el jefe de bancada nacional del MAS, Andrés Flores, los ‘oponentes’ del Gobierno y del Legislativo son el gobernador Luis Fernando Camacho y el exministro Juan Ramón Quintana “que buscan convulsionar el país, pero los legisladores no vamos a caer en ese juego y vamos a dar una solución. Ellos quieren que existan muertos en Santa Cruz”.

Durante el jueves y el viernes, hubo presencia de secretarios de autoridades, asesores y hasta de viceministros en la Asamblea Legislativa. Llamadas, mensajes, reuniones y negociaciones entre masistas se registraron horas antes de la aprobación de la ley del censo.

Gustavo Torrico, viceministro de Gestión y Coordinación Gubernamental además de ser cercano al expresidente, se presentó en el edificio de la Asamblea para mantener una reunión de al menos tres horas con los parlamentarios de su partido.

Torrico evitó declaraciones a la prensa, pero horas más tarde en una entrevista televisiva dijo que entiende la molestia de sus compañeros que se oponen a la ley. “Se ve como un premio que les estuvieras dejando a los golpistas de 2019, que son los mismos que han querido iniciar otro golpe de Estado y la justicia tendrá que actuar”, señaló.

Desde que se conoció el proyecto de ley propuesto por Choque y la intención, de una fracción del MAS, de aprobar una norma, la dirección del partido azul emitió pronunciamientos consecutivos oponiéndose a esa postura y llamando “traidores y aliados de la derecha” a sus parlamentarios.

“La derrota política a la oligarquía cruceña, a sus grupos fascistas y logieros, debe ser clara. Que su paro indefinido agonice y muera sin que hayan conseguido nada”, señala uno de los pronunciamientos del MAS.

En respuesta, Torrico dijo que “no quedaba otra opción que aprobar la ley porque otra forma de solucionar el conflicto hubiese sido usar la fuerza y eso no lo íbamos a hacer”, aseguró.

El vicepresidente del MAS, Gerardo García, mostró su preocupación por la pérdida de escaños que provocaría la ley. Apuntó que los departamentos perjudicados serían Potosí, Sucre y La Paz, que es donde más apoyo se consiguió para el masismo en las últimas elecciones.