El jefe de CC entregó un documento de 350 páginas al experto internacional con propuestas de cómo mejorar el sistema judicial

18 de febrero de 2022, 23:05 PM
18 de febrero de 2022, 23:05 PM

El Relator de Naciones Unidas, Diego García-Sayán, escuchó los argumentos que puso el expresidente, Carlos Mesa, en la reunión virtual que sostuvieron la tarde de este viernes. El exmandatario espera que las pruebas que presentaron él y otros sectores sean tomadas en cuenta para el informe final que debe estar listo en junio de este año.


“Nosotros esperamos que el relator de Naciones Unidas, con los elementos de juicio que está recogiendo, pueda expresar, desde Naciones Unidas, que independientemente de temas políticos o temas partidarios, es muy difícil decir que en Bolivia hay una justicia independiente, si el informe recoge la realidad que haya podido evidenciar creemos que no puede decir otra cosa que no hay independencia judicial en Bolivia”, dijo Mesa a la conclusión de esa reunión.


El también presidente de la alianza Comunidad Ciudadana (CC) sostuvo una reunión con el delegado internacional a quien le expuso un reporte resumido de la intromisión política en todos los ámbitos judiciales. Mesa dijo que entregaron un voluminoso documento de 350 páginas y un resumen de 30 páginas que espera sean tomados en cuenta por el Relator.


“Pero además de la evidencia, le recordamos el caso de la expresidenta Jeanine Áñez y en particular cómo ha tratado la ‘justicia’ a un violador serial, a los feminicidas, al asesino de Marcelo Quiroga Santa Cruz, marcando la desvergonzada obsecuencia y desvergonzada intromisión del poder político en el poder judicial. El Relator nos ha escuchado con mucha atención y nos ha hecho preguntas pertinentes”, relató a Unitel.


García-Sayán, de acuerdo a la agenda oficial, este sábado y domingo tendrá un descanso, sin embargo, en la agenda de encuentros con organizaciones sociales, habrá actividad hasta el mediodía del sábado. Tanto oficialistas como opositores están presentando sus observaciones a la aplicación de la justicia en el país. Todo eso se produce bajo un contexto de vorágine informativa respecto de la expresidenta, Jeanine Áñez, el escándalo de los jueces que liberaron a sentenciados a 30 años y acusaciones políticas.