Mineros cooperativistas se dividen: auríferos con Evo y Fencomin con Arce
El conflicto entre Fecoman y Fencomin es de hace años y ahora ingresa al terreno político
Mientras los afiliados a la Federación Nacional de Cooperativas Mineras (Fencomin) se declaraban en estado de emergencia y anunciaban movilizaciones para detener la marcha evista el domingo; los cooperativistas auríferos aglutinados en torno a Fecoman dispusieron la movilización de sus bases el lunes para apoyar la marcha evista.
“La Federación Nacional de Cooperativas Mineras de Bolivia no va a mirar de la palestra, tampoco va a aceptar intentos de desestabilizar a un Gobierno elegido democráticamente”, advirtió este jueves uno de los dirigentes en conferencia de prensa.
La marcha evista llegó hasta Patacamaya este jueves y se encuentra a 90 kilómetros de la ciudad de El Alto, tienen previsto llegar el domingo a esa ciudad e ingresar a La Paz el lunes en la mañana. Los cooperativistas auríferos del norte de La Paz dispusieron llevar a sus afiliados a esperar a Evo Morales a la localidad de Achica Arriba, que es el ingreso a El Alto.
“Los presidentes de los consejos de Administración y Vigilancia de las centrales, cooperativas centralizadas y descentralizadas afiliadas de la Fecoman LP. R.L., deberán asistir a la concentración y posterior marcha de reivindicación para salvar Bolivia programada para el día lunes 23 de septiembre del 2024 a horas 06:00”, señala la convocatoria minera.
De ese modo se profundiza más la división entre estos dos sectores de mineros cooperativizados. Fencomin aglutina a las empresas que están asentadas en el altiplano principalmente; mientras que Fecoman reúne a las cooperativas auríferas del norte de La Paz, principalmente.
Sin embargo, este conflicto radica en sus respectivas instituciones, Fecoman pelea por el reconocimiento oficial desde el Gobierno y llegaron incluso hasta el TCP para obtener su vigencia legal, no están sujetos a Fencomin, que es la organización matriz de todas las cooperativas. Por tanto, la pelea por el reconocimiento ahora alcanza a niveles políticos.