Amigos, periodistas y hasta autoridades lamentan el deceso del boliviano que llegó a la BBC. Destacan la calidad humana del destacado profesional, que brilló en varios medios de comunicación

El Deber logo
17 de mayo de 2021, 9:59 AM
17 de mayo de 2021, 9:59 AM

La muerte del destacado periodista Boris Miranda desató una ola de emotivos mensajes en redes sociales. Su deceso tomó por sorpresa a todos quienes lo conocieron, que no escatimaron en halagos ante su ejemplar trayectoria.

Hijo de Iván Miranda, que falleció hace cuatro meses por Covid-19, y Jenny Espinoza, el joven de 37 años cultivó varias amistades que trascendieron el ámbito comunicacional. Hoy sus colegas, autoridades y demás conocidos lamentan su partida.

“Espero que nos encontremos en la redacción de La Prensa. Che, Boris, me niego a creer tu temprana ausencia física. Che, Boris, siempre serás un gran amigo”, escribió el periodista Marco Fernández.

Instancias estatales como el Viceministerio de Comunicación y el Ministerio de Gobierno expresaron también pésames por la muerte de Miranda. “Con mucho dolor y pena por tan triste noticia, despido al amigo, al mejor periodista del país @ivanbor. Boris fue un profesional excepcional en las entrevistas interpelaba y mostraba la verdad sin miedo y siempre con optimismo. Perdemos todos. Mi solidaridad a su familia”, escribió el titular de Justicia, Iván Lima.

“Hasta ahora me cuesta mucho creerlo, la vida es tan frágil. Mis condolencias para su familia y seres queridos. Buen viaje Boris Iván Miranda, el mejor periodista de nuestra generación”, lamentó Cecilia Banegas.

Boris también fue parte del equipo fundador del matutino Página Siete. “Haz sido un grande. Me cuesta creer tu partida, vuela alto, amigo”, escribió la periodista Nancy Vacaflor.

“Tu partida es una mala noticia para el periodismo. Imagino que en este mismo momento ya estás reunido con Iván Miranda, tu papá. Abrazo hasta el infinito a los dos”, acotó Andrés Gómez Vela.

Carlos Hugo Miranda, que trabajó con Miranda en La Prensa, señaló que la muerte del periodista deja “una profunda huella en todos nosotros, no solo porque fuiste un gran profesional, sino, sobre todo, porque fuiste una gran persona. Solidario, generoso, alegre”.

Entre las distinciones que recibió el reportero está el Premio Nacional de Periodismo sobre Municipios 2010, la Distinción al Mérito Periodístico de la Fundación Konrad Adenauer y la Asociación de Periodistas de La Paz por su cobertura a la marcha en defensa del Tipnis en 2011 y el Premio Nacional de Periodismo Digital por un reportaje sobre la violencia política contra mujeres.

También escribió dos libros, "La mañana después de la guerra", sobre la crisis política de 2008 en Bolivia, y "La última tarde del adiós", una crónica sobre la caída del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada en 2003, además de realizar varias colaboraciones con periodistas de la región.