Se negoció hasta el filo del plazo. Los partidos de alcance nacional se entrelazan en distintos distritos, pero sin lograr acuerdos que pasen fronteras. En Santa Cruz habrá al menos cuatro corrientes

6 de diciembre de 2020, 15:18 PM
6 de diciembre de 2020, 15:18 PM

Negociaron hasta el minuto final, lograron avances, pero de momento están lejos de la unidad opositora. Mientras el Movimiento Al Socialismo lidia con sus problemas internos para designar candidatos y siente que el tiempo se le acaba, la oposición hizo esfuerzos aislados para lograr fórmulas que planten cara al oficialismo y construyeron alianzas en todo el país, pero en ningún distrito lograron la unidad que les permita tener mejores opciones en las elecciones de autoridades departamentales, regionales y municipales del 7 de marzo.

Fue un sábado de resurrección. Por la mañana, Luis Fernando Camacho, líder de Creemos, tenía dos motivos para festejar. El primero es que lograron la cantidad necesaria de registros ciudadanos para ser un partido departamental y el segundo es que su sigla volverá a correr a escala nacional gracias a un pacto con el Partido Demócrata Cristiano, Pan-Bol, Autonomía Para Bolivia y Nuevo Poder Ciudadano, que firmaron una alianza nacional bajo el nombre de Creemos.

Según Camacho, la intención es presentar candidatos en todo el país bajo alianzas en cada distrito. Destacó el acuerdo alcanzado en Beni con Comunidad Ciudadana y otras fuerzas.

Sobre su postulación, explicó que aún no decide si irá por la Alcaldía o la Gobernación y que confía en que los diálogos iniciados hace 10 días en el Comité pro Santa Cruz lleguen a acuerdos.

Comunidad Ciudadana, la alianza que salió segunda en las elecciones, irá con Demócratas en Pando y sola en La Paz, municipio en el que ganó en los últimos comicios. 

Demócratas, según el exdiputado Gonzalo Barrientos, ha firmado acuerdos en siete departamentos para llevar a candidatos como el Tata Quispe en La Paz o Shirley Franco en Cochabamba, y además irá con sigla propia en Santa Cruz y Potosí. Así el partido verde, que tuvo que bajarse de las elecciones generales tras la renuncia a su candidatura de Jeanine Áñez, tratará de mantenerse en el juego nacional.

Unidad Cívica Solidaridad, de Johnny Fernández, también presentará candidatos en varios departamentos con sigla y colores propios. Según Fernández, las alianzas no han funcionado hasta el momento y es la hora de que vuelvan los partidos. Tiene varios candidatos en el área metropolitana de Cochabamba y según el exalcalde de Santa Cruz, su intención es llevar representantes en el 90% de las alcaldías del país.

Locales

Hasta el cierre de esta edición, en Santa Cruz apenas se registraron seis alianzas, de las cuales, cuatro son a escala municipal. Una de ellas van con la sigla de Creemos (Roboré), dos van con el sello de Unidos (Guarayos y Okinawa) y una de SOL (Santa Rosa de Sara, bajo el nombre Cambia todo cambia). Las otras dos son de carácter departamental. Una de ellas es Creemos y la restantes es Ganamos, nombre que llevará como candidato a Germaín Caballero, fruto de su alianza con Cambio Posible.

Según Caballero, es una alianza que congrega a sectores productivos, mototaxistas, transportistas, campesinos y pueblos indígenas, en las provincias, y a plataformas ciudadanas en las ciudades.

Luis Felipe Dorado, cabeza de la agrupación SOL, explicó que si bien solo registraron una alianza, han logrado unir a varios frentes bajo su sigla en lugares como Yapacaní y San Julián y esperan llevar también candidatos en La Guardia y en Montero, donde Luis Fernando Camacho había anunciado un bloque de unidad en torno a su postulante.

Esto deja al departamento de Santa Cruz con al menos cuatro frentes opositores corriendo en diferentes alcaldías y a escala departamental por la Gobernación: Demócratas, Creemos, SOL y Ganamos. Y pueden ser más. Falta saber qué harán Comunidad Ciudadana, UCS y otros partidos de alcance nacional.

En La Paz

En La Paz la oposición no pudo lograr la unidad. La agrupación de Luis Revilla, Soberanía y Libertad (Sol.bo), encabezó las reuniones para lograr cohesionar frentes opositores. Solo se sumó a ese proyecto Unidad Nacional (UN), de Samuel Doria Medina, y el Movimiento Katarista. 

El candidato a la Alcaldía de La Paz de este grupo será Waldo Albarracín, el exrector de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA). Y para la Alcaldía de El Alto volverá a postular Soledad Chapetón.

El sábado por la mañana, Comunidad Ciudadana (CC) era parte de las reuniones de esta alianza. Pasado el medio día, la agrupación de Carlos Mesa decidió no hacer alianzas en La Paz. Esa determinación surgió porque CC cree que puede tener mejor votación sola que en grupo. “Comunidad Ciudadana (CC) tiene alianzas con el FRI (Frente Revolucionario de Izquierda (FRI) y Primero la Gente. En La Paz también pasa lo mismo”, afirmó el diputado Carlos Alarcón (CC).

CC todavía trabaja en los nombres de candidatos a la Gobernación de La Paz y las alcaldías de La Paz y El Alto. Mientras, la agrupación de Rafael Quispe, Somos Pueblo, apoyará al exministro Iván Arias para postular a la comuna paceña. Quispe será candidato a gobernador. La parte de Demócratas de La Paz apoyará esta alianza.

Existen otros postulantes que se lanzaron a la carrera electoral, como el exdiputado Amilcar Barral, quien irá con el Partido Acción Nacional Boliviano (Pan-Bol). También se proclamó al presidente del Colegio Médico de La Paz, Luis Larrea, quien irá con la alianza Libre 21 del expresidente Jorge Quiroga.

En el resto del país, al situación es similar. Salvo en Chuquisaca, donde siete frentes unieron fuerzas contra el MAS, la dispersión reina. La situación puede cambiar hasta el 18 y 19 de diciembre, cuando se registren candidaturas para el 7 de marzo.

Plazos

Dos semanas

El cierre de alianzas no significa el fin de las negociaciones. El registro de candidaturas fenece el 18 y 19 de este mes, por lo que algunos de los partidos y frentes aún puede declinar su postulación. Eso sí, su sigla ya no aparecerá al lado del candidato que apoye.

¿Vuelve el Comité?

Según Luis Fernando Camacho, el registro de alianzas delineará quiénes participarán en las elecciones, por lo que se pueden retomar las mesas de unidad en el Comité Cívico. Está cerca el pacto para vigilar las elecciones, pero más lejos el de un frente amplio para conseguir la unidad de la oposición.