Un contingente de 200 efectivos policiales llegó hasta la zona donde fueron secuestrados periodistas, policías y civiles por un grupo armado

30 de octubre de 2021, 9:36 AM
30 de octubre de 2021, 9:36 AM

La mañana de este sábado de 200 uniformados llegaron a Las Londras, provincia de Guarayos, donde un grupo armado el pasado jueves sorprendió y torturó a una comisión integrado por periodistas, policías y productores.

La fuente informativa de la institución del orden señala que por el momento no existe personas arrestadas. En estos momentos, la Policía está en pleno trabajo investigativo para dar con el grupo armado que atacó a los periodistas.

Se tiene previsto que los efectivos policiales se queden el tiempo que sea necesario para esclarecer este hecho violento, que generó conmoción en todo el país.

La noche del viernes, el comandante de la Policía Nacional, Jhonny Aguilera informó que estos policías llegaron desde La Paz con el objetivo de investigar este caso al que calificó como un "altercado".

No estamos yendo a generar ningún daño, sino a buscar a los responsables de ese altercado y que emplearon armas de fuego", afirmó Aguilera la noche del viernes al programa Que No Me Pierda, que se emite por la Red Uno.

La autoridad aclaró que la institución del orden no desalojará a las personas que ingresaron en estos predios, porque esta área está en proceso de saneamiento y fue declarado por tierra de uso fiscal por el INRA.

Vamos a restituir el orden, vamos a buscar quiénes están con las armas”, dijo el jefe policial.

Ayer los campesinos que tomaron como rehenes a los comunicadores negó este hecho. Incluso, aseguraron que no son vándalos ni criminales, y que todo se trató de un mal entendido.

Sin embargo, una imagen de video de unos los periodistas que fue tomado como rehén muestra la forma violenta de cómo actuaron estas personas. A escala nacional, el gremio de la prensa repudió este hecho y pidió a las autoridades tomar cartas en el asunto y detener a los agresores.

Desde hace meses, varias son las denuncias por la invasión de predios productivos por parte de campesinos que, de forma abierta, dicen tener el respaldo del gobierno. Estas personas incluso han ingresado en áreas protegidas y comunidades indígenas.