Son al menos 5 reservas ecológicas y 17 comunidades indígenas de La Paz y Beni afectadas por el fuego, muchas de ellas incomunicadas porque se quedaron sin electricidad

19 de noviembre de 2023, 11:30 AM
19 de noviembre de 2023, 11:30 AM

”¿Qué hemos hecho las poblaciones del Norte de La Paz y la Amazonia para que el Gobierno departamental y el Gobierno central nos hayan echado al infernal fuego y dejarnos abandonados?”, preguntan los indígenas de 17 comunidades de La Paz y Beni que han sido alcanzadas por las llamas en incendios dantescos que hasta la fecha han calcinado a miles de animales, han dejado en cenizas la flora y han afectado cinco áreas protegidas, además de una empresa y un hotel que dependen del Estado.

Es la tercera vez que la Coordinadora Nacional de Defensa de Territorios Indígenas Originarios Campesinos y Áreas Protegidas de Bolivia (Contiocap) pide al Gobierno la urgente “Declaratoria de desastre nacional por incendios y por sequía”, pedido que a traspasado las fronteras y se hizo eco en Relator Especial para el Derecho al Medio Ambiente Sano y Limpio de la ONU, David Boyd.

El representante de este organismo internacional en las últimas horas publicó un mensaje y pedido: “Me preocupa profundamente la situación en Bolivia. Los incendios están destruyendo los bosques y los territorios tradicionales de los pueblos indígenas. El Gobierno debe tomar medidas para apagar los incendios, prevenir otros en el futuro y respetar los derechos humanos.

Reporte de la Contiocap

La Contiocap reporta que la Reserva de Biosfera Pilón Lajas, la Reserva de Flora y Fauna Tariquia, el TIPNIS, el Parque Noel Kempff Mercado, el Madidi entre otras áreas protegidas, son devastadas por el fuego.

La Contiocap informa que hasta la fecha la situación es dramática en los municipios del norte de La Paz, entre ellos están: Ixiamas y sus poblaciones como Ixiamas, Macahua, Enapurera, donde hace más de dos semanas sus pobladores luchan contra el fuego “sin que su alcalde minero y militante del partido de gobierno MAS haga algo al respecto, ignorando la situación por completo”.

En el municipio de San Buenaventura y sus poblaciones: San José de Uchupiamonas, Tumupasa, San Isidro, Bella Altura, Eyiyoquibo (Esse Ejja), Buena Vista, Tres Hermanos, Altamarani, San Miguel del Bala, están siendo consumidos por el fuego inmisericordemente, a pesar de los esfuerzos sobrehumanos de sus pobladores, hombres, mujeres, y hasta niños que están defendiendo lo que es esencial que son las fuentes de agua y el bosque como fuente de agua.

En el departamento de Beni, el municipio de Rurrenabaque y sus comunidades campesinas como Cebú, y comunidades indígenas Carmen Florida, Real Beni, Asunción del Quiquibey han sido invadidas por el fuego rebasando todo intento de los bomberos voluntarios y comunarios que arriesgando sus vidas intentan detener o contener el fuego para que no consuma sus fuentes de agua, sus escuelas y casas.

También los emprendimientos turísticos son afectados por las llamas como es el hotel Jatauba que era un lugar turístico que está en poder del Estado y ha sido consumido por el fuego la semana pasada. El emprendimiento de autogestión Sadiri Lodge, reconocido como el hot spot más importante de Bolivia para la observación de aves en la TCO Uchupiamona, en el Parque Madidi, está a punto se ser consumido por el fuego que avanza hacia la Serranía Sadiri.

Así como los emprendimientos turísticos del Destino Madidi Pampas en el municipio de Reyes, Beni y emprendimiento de turismo comunitario de la comunidad San Miguel del Bala.

En el municipio de Ixiamas, el emprendimiento de turismo Comunitario de la TCO Macahua, también está a punto de ser consumido por el fuego.

La Empresa Azucarera San Buenaventura (Easba), que es una empresa estatal también fue alcanzada por las llamas a pesar que esta empresa estatal cuenta con volquetas, tractores, tanques de agua, más de 80 trabajadores, no lograron contener las llamas.

“Esta empresa no ha socorrido a las comunidades cuyos territorios ha invadido con sembradíos de caña de azúcar, y ni siquiera ha podido contener el fuego y evitar que se pierda lo que le ha costado más de 360 millones de dólares de inversión al país”, reporta la Contiocap.

Es así que una vez más, los representantes de las comunidades indígenas de tierras bajas exigen al Gobierno central declarar “desastre nacional por incendios”, se lee en el comunicado.

“Y de no hacerlo asuma su responsabilidad por una omisión que probablemente pueda constituir un delito de lesa humanidad, por abandonar a su suerte a poblaciones indígenas de manera flagrante”, dice el pedido.