Morales lanzó directrices, pero el Gobierno no las siguió y ayer volvió a mostrar su molestia desde Cuba. El ministro de Gobierno y Mamani tienen el apoyo de Arce y Choquehuanca. Ambos siguen en sus cargos

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25 de abril de 2022, 7:40 AM
25 de abril de 2022, 7:40 AM

Durante sus 14 años en el poder, la más mínima “sugerencia” que daba Evo Morales se procesaba en horas. Este lunes, la pugna que tiene con David Choquehuanca frena la interpelación en la Asamblea Legislativa del ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo y la destitución del viceministro Jaime Mamani, acusado de ordenar que se detenga un operativo que halló un megalaboratorio y cuatro fábricas de cocaína.

El 16 de marzo, en una reunión con cocaleros de Yungas, el ministro Del Castillo aseguró qué hay diputados y dirigentes que se enriquecen con las hojas de coca.

Evo Morales y los cocaleros de Chapare le dieron 24 horas para que dé explicaciones. La autoridad estatal aclaró después que se refería a un diputado en concreto, que no era de Chapare, sino de Yungas. De hecho, esta semana ese diputa deberá declarar ante la Fiscalía.

Dos días más tarde, Del Castillo abandonó intempestivamente una reunión con la bancada del MAS. Estaba evidentemente molesto, y evitó a los medios. Sus correligionarios, por amplia mayoría en ese encuentro, decidieron interpelarlo.

Hasta ahora, ese acto legislativo en el que se daba por hecho que iba a salir censurado, no se realizó.

Morales impulsó a la bancada parlamentaria del MAS para que soliciten esta interpelación.

El vicepresidente David Choquehuanca suspendió o nunca convocó a las interpelaciones en contra del Ministro. Mientras que Morales insiste en la confrontación, pero incluso dentro de su partido ven que eso lo desgasta políticamente.

“No hay división, hay traición, pero siempre hubo desde tiempo de colonia, desde el tiempo de la república, esa no es ninguna novedad. Pero los traidores no dividen, intentan confundir”, señaló el exmandatario en su programa en Kawsachun Coca, desde Cuba.

Morales estuvo el fin de semana en La Habana, donde tributó un homenaje a Fidel Castro. “Algunos medios de comunicación de la derecha están cada día, nos hacen campañas gratis, no pagamos publicidad, no tenemos ningún contacto, pero si se dan cuenta solo el MAS está en los medios de comunicación”, afirmó Morales.

Con relación a las fricciones con el Gobierno, señaló que algunos de sus excolaboradores que no identificó “son repudiados y condenados por la derecha, por la oposición”, pero ahora “la derecha sospechosamente defiende a algunos funcionarios de algún ministerio”.

De hecho, la última semana, la bancada del MAS que es próxima a Morales, expresó su molestia por la suspensión de las interpelaciones y apuntaron a Choquehuanca.

Hace dos semanas, Evo mostró un audio que presuntamente incriminaba a Del Castillo y a su viceministro de Defensa Social, Jaime Mamani, por abortar un operativo de destrucción de un laboratorio y cuatro fábricas de droga en el Valle Sacta, pero ambos siguen en sus cargos y han mostrado operativos.

El presidente Arce no se ha cansado de ratificar su apoyo al ministro Del Castillo y lo ha mantenido en el gabinete. A principios de año, los cocaleros de Chapare, y Evo Morales, pidieron que Del Castillo, entre otros ministros, sean relevados del gabinete porque su gestión “no convenció”, pero fue ratificado.

Los asambleístas del MAS intentan poner paños fríos, insisten en que no hay división. El presidente de Diputados, Freddy Mamani, reiteró que puede haber diferencia de criterios, pero no rupturas dentro del partido. El Pacto de Unidad convocó el lunes a los dos mandatarios y al jefe del partido para limar asperezas, pero éste último decidió no asistir.

Morales apareció ante los medios el viernes, y aseguró que no tiene ningún problema con el presidente Luis Arce ni con el Gobierno nacional, pero volvió a atacar.

Enfatizó que no encubrirá “ni a corruptos ni a narcos”, considerando “sospechoso” que no avancen las investigaciones por los audios del operativo frustrado en Valle Sacta.

El jefe del MAS garantizó la unidad en ese partido, ratificando que existe intención de la derecha interna y externa de desestabilizarla.

“No vamos a tapar ni a corruptos ni a narcos, es la responsabilidad, casualmente me hicieron llegar esos audios, no pregunté a nadie para denunciar, no permitirnos y ahora está en manos de la justicia”, señaló pero consideró “extraño” que se actuara con celeridad en el caso de los videos de los “tiktokers pisa coca” y no así en relación al encubrimiento al megalaboratorio colombiano en el Trópico de Cochabamba.

“Las semanas pasadas parecieron tiktokeros pisa coca, y estamos investigando, alguna gente montó eso, reclamamos, por esa situación hay gente detenida, semejante audio no hay detenciones, reclamamos a la justicia qué pasa, tiktokeros encarcelados, se intervino, pero ahora no hay detenidos por el audio, ni los que instruyeron no intervenir ese laboratorio, muy sospechoso”, acotó.

Crítica interna


El senador del MAS, Félix Ajpi, respondió a Morales que “no cree que no se esté indagando. Se destituyó al jefe nacional de la fuerza antidroga, al de Umopar, tampoco van a investigar gritando, a no sér que el hermano Evo quiera que la fiscalía haga público cada paso que da”.

Pero el Gobierno ratificó a Del Castillo y también a su viceministro Jaime Mamani, quien es cocalero de Chapare. Sin embargo, fuentes del MAS que pidieron no ser identificadas, advirtieron que es afín al vicepresidente Choquehuanca.

Ajpi señaló que “aquí no corresponde manejar eso de las corrientes de Evo, Lucho, David. Somos una sola línea política”.

Sin embargo, admitió que Mamani hizo campaña junto al Vicepresidente. “Eso no significa que sea de ese grupo. Todos hicimos campaña juntos”.

El gobierno reiteró el apoyo a Mamani, pese a que en el audio presentado por Evo Morales, habría ordenado al entonces jefe de Umopar de Chapare, Yerko Terán, abortar la misión. Luego, el teniente coronel denunciante (Terán) señaló que Mamani estuvo en una reunión en la que le lo despidieron.

Antes, el aglutinador dentro del partido, quien se reunía con los sectores sociales, era Evo Morales. Durante su gobierno su exvicepresidente Álvaro García Linera siempre destacó esa virtud: ser el eje que unificaba alpartido, pero ahora dentro del MAS ya no lo ven así.

“Insisto que no es una pugna, el problema es que Evo Morales trata de mantenerse a como dé lugar. Y eso no es bueno en política. Yo le sugiero que cambie de actitud, no se puede hacerlo en base a la confrontación con los gobernantes”, comentó el senador Ajpi.

Por eso, consideró que “se equivoca, él es una persona que le gusta el debate, pero alguien le orienta mal. Imagino que su antiguo entorno. Tratan de matenerse ellos a su costa”.

En el otro lado de la vereda se ubica el diputado Gualberto Arispe. “El MAS, primero que nada se maneja en su estructura orgánica y política, y ahí está el hermano Evo Morales. Debemos recordar que como legisladores, nos comprometimos a hacer una fiscalización a nuestro mismo gobierno”.

Explicó que en ese contexto que el “actuar de nuestro Ejecutivo se ha ido devaluando de manera constante, y cuando hay metidas de pata como en las que incurrió nuestro Ministro de Gobierno, lo dijimos de manera muy abierta”.

Recordó las declaraciones que el ministro hizo en Los Yungas sobre dirigentes y asambleístas que se llenan los bolsillos con la coca, la designación del exdirector de la FELCN, José María Velasco, quien fue el único destituido en el caso del megalaboratorio . “Nosotros lo denunciamos, y eso no dignificaque estemos enojados con Arce. Nosotros debemos hacerle notar lo que está mal”, manifestó.

Pero, en última instancia, “el presidente Luis Arce es el que siempre tiene la última palabra. No llamamos a interpelación porque nos cae mal el ministro, sino porque no hace las cosas de manera correcta”.

El jueves se conoció que Freddy Velásquez, diputado del MAS que representa a los Yungas era el denunciado por del Castillo, por forzar la devolución de coca decomisada, presionar a jefes policiales para gestionar el paso de la hoja y proteger el traslado de coca a zonas de producción de cocaína.

“Me voy a presentar a declarar, pero imagino que los que denuncian tienen pruebas, porque denunciar sin pruebas no es correcto, me informaré mejor”, dijo el denunciado a este medio, respecto a las investigaciones en curso.