Resultó herido el 31 de octubre en los enfrentamientos en el norte de Santa Cruz. Fue ingresado a un centro médico el 11 de noviembre donde permanece en coma inducido. Según medios extranjeros, ya había estado antes en Bolivia

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14 de noviembre de 2019, 9:48 AM
14 de noviembre de 2019, 9:48 AM

La Policía identificó a uno de los heridos del enfrentamiento en Montero como Facundo Molares Schoenfeld, un argentino de 44 años que fue miembro de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia). Según medios extranjeros, ya había estado antes en Bolivia.

"No es un guerrillero de poca monta", dice una nota del periódico español El Mundo sobre Facundo Molares alias 'Camilo'. Antes de ingresar a la guerrilla, 
militó en las juventudes comunistas de Argentina, Cuba, Ecuador, Paraguay, Chile, Perú y Bolivia.

Nacido en San Miguel, provincia de Buenos Aires, Facundo Morales llegó a Colombia en 2003 donde se convirtió en el tercer extranjero en formar parte de las FARC, por detrás de la holandesa Tanja Nijmeijer y el chileno Manuel Olate Céspedes.

Se ganó la confianza de 'El Paisa', uno de los hombres más poderosos de las FARC, quien le habría encargado el trabajo político con los campesinos. Llegó a ser cabecilla de la cuarta compañía de la columna móvil Teófilo Forero Castro.

El diario El Tiempo señala que en 2017, cuando la organización negociaba el Acuerdo de Paz con el Gobierno colombiano, tuvo fuertes enfrentamientos con varios de sus compañeros que lo llevaron a perder el estatus que se ganó en la guerrilla.

En Colombia fue buscado por la Fiscalía, acusado de los delitos de rebelión y asociación ilícita y de administrar recursos relacionados con actividades terroristas, entre otros cargos. En los últimos años estaba prófugo.

Cae herido en Bolivia

Morales resultó herido en un enfrentamiento en Montero el 31 de octubre y  estuvo escondido en el barrio Cofadena. El 11 de noviembre, cerca de la medianoche, fue ingresado a un centro de salud donde permanece en estado de coma inducido.

Las autoridades pudieron descubrir su identidad gracias a que su padre, el juez  Néstor Hugo Molares, y su esposa, Silvana Irene Reyes, lo reconocieran.

En el teléfono del padre del guerrillero, la Policía encontró mensajes de texto en el que Molares le decía a su padre: “hemos tomado el búnker”, en alusión al puente de la Amistad entre Montero y Yapacaní, y que avanzarían “ayudando al Gobierno” de Evo Morales.



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