Se trata de uno de los hombres más cercanos al papa Francisco y llega justo cuando en el país estallaron casos de pederastia al interior de la Iglesia católica

22 de mayo de 2023, 17:40 PM
22 de mayo de 2023, 17:40 PM

Luego de que la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) confirmara la presencia de  monseñor Jordi Bertomeu, oficial del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, en Bolivia, muchos consultaron quién es esta autoridad y cuáles son sus funciones. Llega justo en un momento en que en Bolivia ha estallado el escándalo de los casos de pederastia al interior de la Iglesia católica. Aquí detallamos su trayectoria. 

De acuerdo con una publicación de la prestigiosa Vanity Fair, Bertomeu es nada más y nada menos que uno de los hombres clave del entorno del papa Francisco. 

Lo describen como una especie de súper agente: "Es el encargado de investigar para el pontífice los casos de abusos sexuales a menores protagonizados por el clero de la Iglesia católica", dice parte del artículo basado en una entrevista realizada a la autoridad eclesiástica, una de las pocas que ha concedido, pues se dice que le tiene alergia a los medios de comunicación, como una forma de señalar que se mueve con perfil bajo. Se prevé que concentre sus actividades en Bolivia, en Cochabamba, ciudad en donde se realizaron varios de los abusos que confesó en su diario el jesuita fallecido, Alfonso Pedrajas, miembro de la Compañía de Jesús, cuando trabajaba en el colegio Juan XXIII. 

Reservado, muy cauto, siempre midiendo las palabras, monseñor Jordi Bertomeu i Farnós es el gran desconocido de la Santa Sede. Un personaje tan oculto para la opinión pública como clave actualmente para la imagen e incluso la supervivencia de la Iglesia católica. 

Según los registros, nació en la ciudad catalana de Tortosa en 1968, estudió Derecho en la Universidad de Barcelona y cursó estudios de Teología en el Seminario de Tortosa antes de ordenarse sacerdote en 1995, cuando ya tenía 27 años. Es doctor en Derecho Canónico por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. 

En el año 2012 empezaría a trabajar como oficial de la Sección Disciplinaria de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el antiguo Santo Oficio del Vaticano. Simultánea esta tarea con el cargo de vicario judicial de la diócesis de Tortosa (2002).

El papa Francisco lo nombró capellán de su santidad el 27 de abril de 2018 como reconocimiento por su trabajo en Chile, y por tanto, ostenta el título de monseñor. 

Las circunstancias lo llevaron a ser el encargado de dirigir las investigaciones que concluyeron con la «decapitación» de prácticamente toda la cúpula de la Iglesia católica de Chile, bien por abusos, bien por encubrirlos. Cuando llegó a Santiago, en junio de 2018, acompañaba a monseñor Charles Scicluna, arzobispo de Malta, ya conocido en el Vaticano por su trayectoria en la investigación de los casos de abusos sexuales del sacerdote Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo. 

El papa Francisco les había encomendado la misión de recoger pruebas, en caso de que las hubiera, del encubrimiento por parte de Juan Barros, obispo de Osorno, de los delitos del sacerdote Fernando Karadima. En cuanto llegaron a la capital chilena, Scicluna tuvo que ser ingresado por un problema de vesícula, por lo que Bertomeu se haría cargo de dirigir las indagaciones que lo llevarían a conseguir un éxito sin precedentes en la lucha contra la pederastia en la Iglesia, ya que reunió las pruebas de un encubrimiento generalizado por parte de la jerarquía chilena. 

La impecable labor realizada en Chile tendría continuidad en algún otro país, pero sobre todo en México, donde debían ir a principios de marzo de 2020, esta vez con Scicluna ya recuperado, para iniciar una investigación similar. Sin embargo, esta última misión especial se vio interrumpida al cabo de pocos días por el estallido de la pandemia de la covid-19.

"Si al principio se perseguía la herejía protestante y los comportamientos que lesionaban la fe de los sencillos, como la magia, la brujería, la blasfemia e, incluso, la usura, hoy nos encontramos ante un pecado y un delito muy grave al que debe darse respuesta: la pederastia, favorecida por un nuevo medio de comunicación, internet. Los nuevos tiempos requieren nuevas respuestas. Una Iglesia que aprende de los errores pasados, pero siempre atenta a los signos de los tiempos", dijo el mismo Bertomeu, en aquel entonces.

En palabra del mismo monseñor, "Francisco, un papa jesuita, te pide efectuar un discernimiento desde las emociones interiores para averiguar la voluntad de Dios en las decisiones que debe tomar. Es un hombre muy libre, muy humano y sobre todo, muy espiritual".

Es más, el religioso confesó que "con Francisco he aprendido que solo buceando en la intimidad de tu corazón es posible un buen gobierno de la Iglesia. Para trabajar en la curia, es necesario un proceso espiritual que te haga parecerte cada día más a Cristo, el buen pastor. Nos equivocamos, sí. En el camino de la vida nos ensuciamos y acabamos heridos, es cierto. Pero la clave es ser humildes y sencillos en un camino de conversión continua. Cuando actuamos así, cuando hacemos del Vaticano o de la Iglesia una estructura de poder similar a las del mundo, erramos de plano. Eso es lo que estoy aprendiendo de Francisco".

Asimismo, en ese entonces, monseñor se refirió a los casos de pederastia indicando que "el encubrimiento del abuso sexual a menores, en una cultura de la hipersexualización y de la libertad ejercida sin ningún vínculo, haciendo lo que a uno le aporta más placer sin mirar en primer lugar por el bien del otro, es una de las formas más graves de esta corrupción que también debemos afrontar en el seno de la Iglesia".

Desde la Conferencia Episcopal aclararon, a través de un comunicado, que "con ocasión de la visita fraterna a la Universidad Católica de Paraguay del cardenal Orani Joao Tempesta, arzobispo de Río de Janeiro, y monseñor Jordi Bertomeu, oficial del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, la Conferencia Episcopal Boliviana ha solicitado la presencia de este último en nuestro país para analizar juntos en los próximos días los avances realizados hasta el momento, en la línea de la cultura de la prevención impulsada por el papa Francisco".

Es más, señalaron que esta visita "se empezó a gestionar hace tres años, a raíz de la participación de algunos miembros de la Comisión Nacional de Prevención en cursos online a causa de la pandemia Covid-19".