Francisco Javier Gassó, embajador de España en Bolivia, puso en el punto de mira la próxima cumbre entre la Celac y la Unión Europea para el trazado de una nueva era de cooperación que incluye a la lucha antidroga

16 de mayo de 2023, 7:31 AM
16 de mayo de 2023, 7:31 AM

El embajador Francisco Javier Gassó estuvo en Santa Cruz de la Sierra y conversó con EL DEBER. Anunció que su país tomará las riendas de la Unión Europea en julio próximo y destacó esa oportunidad para “fortalecer” las relaciones con Bolivia. Además, entre el 17 y 18 de julio se desarrollará en Bruselas la próxima cumbre Celac - UE.

¿Qué retos existen en las relaciones de Bolivia y España?

Si tuviese que mencionar un reto inicial, este sería: Fortalecer la vinculación entre la Unión Europea y Bolivia en estos momentos. En julio de este año, España inicia su presidencia en la Unión Europea. Es nuestra gran prioridad volver a establecer una relación fluida continua entre la Unión Europea y América Latina. Para eso se ha convocado una cumbre de jefes de Estado; la presidirá el presidente Pedro Sánchez y reunirá a todos los jefes de Gobierno de la Unión Europea y de los países de la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños).
El presidente Luis Arce ha confirmado su voluntad de participar en la cumbre y consideramos que ese será un momento óptimo para relanzar esa vinculación entre la Unión Europea y América latina y por supuesto, entre la Unión Europea y Bolivia. No queremos que sea únicamente una cumbre de declaraciones vacías o huecas, sino que haya resultados concretos. Por eso, estamos trabajando muy directamente con las diferentes carteras ministeriales de Bolivia dentro de una iniciativa denominada ‘Global Gateway’ para a movilizar recursos públicos y privados para el desarrollo de tecnologías verdes, interconexión e interconectividad y de la transición ecológica justa.

Más allá del litio...

Efectivamente, una de las grandes prioridades es la energía verde, las energías renovables y en ese aspecto vamos a concentrarnos. Bolivia tiene grandes capacidades en materia de energías renovables en muchos sectores: Eólica, fotovoltaica e hidrógeno verde.
La Unión Europea tiene tecnologías muy desarrolladas en esos ámbitos. España, en concreto, es una potencia tecnológica en esos aspectos y toda esa tecnología queremos transferirla a Bolivia
Hay otros retos como las interconexiones. Hay una iniciativa que Bolivia está planteando, por ejemplo, el caso de Santa Cruz resulta particularmente interesante que es el eje ferroviario bioceánico que uniría a Brasil, Bolivia con el Pacífico, a través de Perú. Se trata de otra iniciativa que se lanzó hace unos años, lamentablemente, se interrumpió en la época de pandemia como se interrumpió prácticamente todo. Ahora existe gran interés por parte de empresas europeas, empresas españolas, pero también las instituciones, porque es un avance en la mejora energética, la eficiencia en el transporte y, desde luego, convierte a Bolivia en el eje, en el centro de América Latina y sería una iniciativa muy interesante.

¿Y Santa Cruz juega un papel estratégico?
El departamento de Santa Cruz, la ciudad de Santa Cruz juegan un papel estratégico en Bolivia, pero también para este reto: Es la unión entre el Atlántico y el Pacífico.
Pasó la pandemia. ¿Cree Usted que hay interés de los españoles para visitar Bolivia?
Bolivia es destino turístico muy cotizado para el turista español. No para todo tipo de turista, porque efectivamente las posibilidades de expansión del turismo son todavía muy amplias aquí.

¿Hay alguna línea de cooperación en ese sentido?

Tenemos, en nuestro marco de asociación con Bolivia, una serie de líneas de trabajo. Una de ellas es la puesta en valor del patrimonio del país y eso es fundamental para su posterior desarrollo. Nuestro concepto es que la protección y la promoción del patrimonio material, inmaterial, como también el patrimonio natural son un beneficio en sí mismo y ayuda a la generación de desarrollo económico y lucha contra la pobreza, además del desarrollo identitario de los pueblos. Por eso, es necesario proteger, promover y poner en valor el patrimonio. Además, eso tiene un gran impacto en el desarrollo de la capacidad turística.

¿Cómo está evaluando España y la Unión Europea el incremento de la actividad del narcotráfico en esta región?

Trabajamos con Naciones Unidas y la Unodc para hacer un seguimiento sobre la política boliviana de la lucha contra el narcotráfico y sobre del tráfico de estupefacientes de Bolivia a Europa que, en muchas ocasiones, es vía España.
Lo que pretendemos es generar buenas prácticas para luchar eficientemente contra el narcotráfico y al mismo tiempo llevar a cabo actividades de control de la expansión de los cultivos de coca y la erradicación. También para el desarrollo integral de las zonas donde se realizan los cultivos para sustituir los cultivo de coca.
También hay un trabajo entre las fuerzas de seguridad de España y Bolivia para identificar momentos en los que se va a producir tráfico de estupefacientes desde Bolivia hacia Europa vía España, fundamentalmente en el aeropuerto de Viru Viru, Santa Cruz.

¿Estos aspectos formarán parte de la Celac-UE?

La lucha contra el narcotráfico será una de las áreas de trabajo de la Celac. Además, en noviembre vamos a tener una Comisión Mixta, España-Bolivia, para avanzar en la cooperación en esta materia.

¿España y la UE van a seguir cooperando en el monitoreo? El año pasado hubo dos cifras distintas sobre la coca.

No hubo un malentendido. Había una forma de contabilización de las áreas donde hay coca con una fórmula métrica distinta. Naciones Unidas usa una forma métrica distinta y el Gobierno boliviano emplea otra, pero ese conteo le corresponde a Unodc, nosotros financiamos. El vicepresidente David Choquehuanca estuvo recientemente en Viena, en la sesión de la Unodc y me consta que tuvo conversaciones, tanto él como su equipo con los responsables de Unodc al respecto (monitoreo de coca) y estoy convencido que en la medición de este año ese tipo de desencuentros van a solucionarse. La cooperación va a continuar.