La más reciente declaración fue la del jurista Diego García-Sayán, relator especial para la independencia judicial de la oficina de la alta comisionada de Naciones Unidas, quien expresó su preocupación por el reciente cambio de vocales electorales.

24 de julio de 2021, 10:55 AM
24 de julio de 2021, 10:55 AM

La oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y la misma secretaría de esta organización internacional emitieron, en lo que va del presente mes de julio, tres señales de preocupación por el estado de la democracia de Bolivia y los derechos humanos.

La más reciente declaración fue la del jurista peruano Diego García-Sayán, relator especial para la independencia judicial de la oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas, quien expresó su preocupación por el reciente cambio de vocales electorales.

García-Sayán, quien fue presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte-IDH), señaló que “la remoción abrupta de vocales de tribunales electorales afecta a las  garantías jurídicas y democráticas”.

Recordó que los integrantes de las salas plenas de los tribunales electorales “fueron designados a partir de un mandato para renovar las autoridades electorales que había sido establecido por unanimidad en la Asamblea Legislativa el 2020”.

En 2019, antes de renunciar, el presidente Evo Morales anunció la remoción de todos los vocales electorales con miras a un nuevo proceso electoral que se cumplió en 2020, cuando fue elegido Luis Arce. El 3 de diciembre de 2019, la expresidenta Jeanine Áñez designó a sus representantes con un mandato de seis años.

Arce, designó a ocho vocales de los tribunales electorales departamentales (TED) y fueron posesionados el 1 de julio. Dos vocales habían renunciado tras las elecciones subnacionales y seis se mantenían en sus cargos.

Libertad de prensa

La pasada semana, la misión en Bolivia del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU rechazó los requerimientos fiscales emitidos contra medios de comunicación de Yungas que hicieron la cobertura de los conflictos en los que perdió la vida un policía.

“La fuente es un derecho protegido por el marco internacional de los derechos humanos y una garantía fundamental para proteger la labor de la prensa y salvaguardar el derecho de la sociedad a recibir información de interés público. Los hechos de violencia deben investigarse exhaustivamente y ser debidamente sancionados sin interferir con el régimen de libertades que resguarda y favorece la actividad de los medios de comunicación en una sociedad democrática, señaló esa declaración.

"Este criterio,  del Alto Comisionado, se analiza sin lugar a duda. Nosotros entendemos que se está garantizando el debido proceso en cada una de las situaciones que se tiene. El Gobierno tiene la idea clara de no inmiscuirse en el trabajo de la Fiscalía y uno no siempre está de acuerdo con el trabajo de la Fiscalía", había señalado el portavoz de la presidencia, Jorge Richter. 

Secretaría general

Además, los procesos judiciales que se siguen en Bolivia concitaron la atención del Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, quien a través de un mensaje corto pidió el 7 de julio a las autoridades bolivianas aunar esfuerzos para dialogar y el debido proceso con transparencia.

“En respuesta a preguntas sobre hechos recientes en Bolivia les puedo decir que en relación a las acciones legales emprendidas contra exfuncionarios del Gobierno y autoridades del país, el Secretario General recuerda la importancia de mantener las garantías del debido proceso y la total transparencia en todos los procesos legales”, señala el texto.

En Bolivia existe casi una treintena de procesos judiciales que impulsa el Gobierno en contra de la expresidenta Jeanine Áñez y sus ministros que la acompañaron en su gestión de 11 meses. Los procesados denunciaron un abuso de poder y el  MAS asegura que busca justicia.

“El Secretario General alienta a todos los líderes políticos y sociales a seguir trabajando juntos con un firme compromiso con la democracia, el estado de derecho, el respeto de los derechos humanos y los esfuerzos de diálogo para abordar los desafíos políticos, económicos y sociales actuales”, apuntó el mensaje de Guterres.