(VEA EL VIDEO) El gobierno boliviano planteó una queja contra Luis Almagro. Al final de la sesión, el organismo no emitió ninguna amonestación contra el secretario general

26 de agosto de 2021, 10:31 AM
26 de agosto de 2021, 10:31 AM

Argentina, México y Nicaragua fueron las naciones que respaldaron la postura del gobierno de Bolivia en la sesión extraordinaria del miércoles del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), que reúne a 34 países del hemisferio.

El gobierno solicitó la audiencia para denunciar la “injerencia” del secretario general de la OEA, Luis Almagro, en la investigación judicial que se realiza en el país respecto al caso “fraude”.

“La intolerancia es una mala práctica y vimos cómo el secretario general ha instrumentalizado políticamente las misiones de observación electoral” y en el caso de Bolivia “fijó una falsa narrativa del golpe”, afirmó la embajadora de México en la OEA, Luisa Elena Baños.


Por su lado, el representante interino de Nicaragua, Luis Alvarado, arremetió contra Almagro y pidió una moción para investigarlo, pero ningún otro representante en el consejo permanente de la OEA lo respaldó.

El embajador argentino Carlos Raimundi se quejó de las acciones de la excanciller Karen Longaric, en la OEA. Dijo que, cuando ella estaba en funciones en 2020, acusó a Argentina de “otorgar asilo a Evo Morales, a quien sindicó de violar los derechos humanos”.

La sesión del miércoles duró algo más de tres horas en las que cerca de 15 diplomáticos de la región expresaron su respaldo a las misiones electorales de la OEA.

Gustavo Tarre, delegado del Parlamento de Venezuela, fue más allá y apoyó a Almagro, recordando los antecedentes de la crisis de 2019, marcadas por el derecho político que reclamó Evo Morales para postularse a las elecciones de ese año.

Así, la sesión terminó con un respaldo casi unánime a las misiones de observación electoral que el organismo internacional desarrolla desde 1966 en función de la Carta Interamericana Democrática.  

Ante este resultado, el ministro de Justicia, Iván Lima, aclaró que el gobierno boliviano no puso en duda el aporte de estas misiones, sino que quería que se respete la independencia de los jueces y fiscales del país en cuanto a la investigación del caso “fraude”.

Lima, junto al canciller Rogelio Mayta y el embajador de Bolivia ante la OEA, Héctor Arce, quien fue parte del gabinete de Evo Morales, cuestionaron a Almagro por el comunicado del 9 de agosto que respalda la auditoría integral que halló evidencia de “manipulación dolosa” de los datos en la elección nacional de 2019.

La Fiscalía cerró a partir de los resultados de la pericia informática que encargó al laboratorio Bisite de la Fundación de la Universidad de Salamanca un año y medio después de la crisis electoral de 2019.