Unas ocho horas después del accidente el piloto beniano fue rescatado por el dueño de la avioneta, el trabajador de una estancia ganadera y rescatistas del Grupo SAR-FAB.

28 de octubre de 2021, 21:19 PM
28 de octubre de 2021, 21:19 PM

El piloto borjano Elio Roca, que fue rescatado con vida la noche del miércoles cerca del río Tijamuchí, en Beni, conversó con EL DEBER este jueves. Dijo que nunca perdió la esperanza de ser encontrado

La aeronave que pilotaba se precipitó a tierra 48 minutos después (15:25 aproximadamente) de haber despegado del aeropuerto de San Borja con destino a Trinidad.

“Tenía puesta mi esperanza en Dios de que me iban a encontrar. Eso sí, no pensé que sea la misma noche. Iba a esperar que aclare el día siguiente arriba de un árbol”, dijo Roca. La avioneta Cesna, con matrícula CP-2052, quedó volcada en una pampa tras chocar con el borde de una cuneta.  

Roca contó que el vuelo era normal y que estaba, aproximadamente, a ocho minutos de llegar al aeropuerto de la capital beniana cuando el motor empezó a perder potencia. De inmediato dio parte de la emergencia a la torre de control y se preparó para el aterrizaje forzoso.

“Después del accidente salí a caminar como unas tres horas. Llegué al río Tijamuchí y me volví a la avioneta porque no había como seguir. También intenté hablar por celular, pero no me daba señal hasta que se agotó mi batería”, relató.

Cuando el piloto ya estaba resignado a pasar la noche en las alturas de un árbol escuchó el motor de vehículos que iban en su dirección. Se llenó de esperanza y se preparó para el rescate. “Ellos se pararon y yo les grité. Me escucharon y le dije que sigan recto (en su dirección). Así fue como me encontraron. El primero en llegar fue el dueño de la avioneta Jorge Mercado junto con un hombre de una estancia, que era el guía, más atrás estaban los del SAR-FAB”, afirmó el piloto.

Tras llegar a Trinidad y abrazar a su esposa y sus dos hijas se hizo una valoración médica, misma que concluyó que estaba bien. “Me hicieron exámenes y tomografías y gracias a Dios estoy bien. Solo con el labio reventado”, cerró.

Roca es un exmiembro de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) apasionado por la aviación civil, actividad a la que se dedica desde hace unos 10 años.