Según la publicación el presidente Arce no podrá seguir ocultando la crisis por más tiempo

19 de abril de 2023, 17:43 PM
19 de abril de 2023, 17:43 PM

La caída de los volúmenes de exportación y precios del gas; la poca transparencia en los acuerdos de explotación de litio, y la pugna interna del partido de Gobierno son los tres ejes que revela la revista inglesa, The Economist, para afirmar que en Bolivia se avecina una crisis económica comparable al periodo hiperinflacionario de 1982.


En el caso del gas menciona que desde 2014 la producción del combustible se desplomó en un tercio de los volúmenes. Del total de producción actual un tercio de la producción se vende al mercado nacional que paga por debajo de los precios internacionales y el resto se envía a Brasil y Argentina.


Pero, “un oleoducto, que se extiende desde uno de los campos de gas y petróleo de esquisto bituminoso (rocas con suficiente material orgánico para producir petróleo) más grandes del mundo en el lejano oeste de Argentina hasta Buenos Aires, comenzará a operar en junio. Eso reducirá la necesidad de Argentina de importar el material de Bolivia”, alerta la publicación. No solo eso, el país dejó de invertir en exploración de nuevos yacimientos de gas y según la revista la inversión en este rubro cayó de $us 1.000 millones en 2015 a 300 millones en 2022.


El círculo hidrocarburífero se cierra con la insistencia del Gobierno de mantener subvencionado el precio de todos los combustibles dentro del país, lo que alentó el contrabando hacia los países vecinos que tienen precios por encima de los $us 1,31 cada litro, en cambio en Bolivia se mantiene a $us 0,54 el litro de gasolina.


Sobre el litio 


En el caso del litio, la publicación señala que la escasa transparencia con la que se manejó el último acuerdo con una empresa china para la explotación directa del litio en el Salar de Uyuni puede frustrase por protestas de los habitantes de la región. En Potosí denunciaron que no se conoce el contrato que firmó Bolivia con esa empresa.


Pese a que Bolivia tiene una de las reservas de litio más grandes del mundo, su explotación comercial está en duda y por tanto, no podrá reemplazar, en ingresos, el nivel que tiene el gas en este momento, de ese modo el panorama es más sombrío.


Pugna interna


Sumado a este panorama eminentemente económico, The Economist, afirma que el Gobierno tiene poca maniobrabilidad por la pugna interna que existe en el principal partido de Gobierno, pues esa pelea impide que el Estado pueda monetizar las reservas de oro que existen y que llega a los $us 2.800 millones.


“Se avecina una crisis de balanza de pagos, como en 1982. Ese año, Bolivia entró en una crisis que terminó en hiperinflación. Hoy los signos de presión financiera están por todas partes. En las calles de La Paz, los oportunistas están vendiendo dólares a una tasa muy superior a la oficial. Los sindicatos negociarán aumentos salariales en mayo y exigen un aumento del 10%”, cierra la revista internacional.