Violencia en Sacaba provoca muertes y más de 20 heridos
Los cocaleros de Chapare rebasaron el cerco policial-militar que estaba en el puente Huayllani. El Gobierno habla de cuatro muertos, el defensor del pueblo, de seis
Cochabamba vivió ayer una jornada violenta. En la localidad de Sacaba por lo menos cuatro personas murieron, otras 22 resultaron heridas y más de 100 fueron arrestadas a consecuencia de los enfrentamientos ocurridos entre cocaleros del trópico cochabambino y fuerzas del orden.
La refriega comenzó después de que se frustraron los intentos de diálogo entre las autoridades policiales y militares con los cocaleros de Chapare, que intentaban marchar al centro de Cochabamba para exigir la reposición en el cargo al expresidente Evo Morales.
El ministro de la Presidencia, Jerjes Justiniano, aseguró que en los enfrentamientos fallecieron, al menos, cuatro personas. Esta situación, dijo el ministro, preocupa a la mandataria Jeanine Áñez. Insistió que la prioridad del Gobierno de transición es la pacificación del país y convocar nuevas elecciones.
Desde Cochabamba, el defensor del pueblo, Nelson Cox, reportó que hubo seis fallecidos y que fueron identificados como Omar Calle, César Sipe, Juan López, Emilio Colque, Lucas Sánchez y Roberto Sejas. Los heridos fueron atendidos en el hospital México de Sacaba; los que presentaban gravedad fueron trasladados al hospital Viedma, de Cochabamba.
La refriega se registró en el puente Huayllani (a la altura del km 10 sobre la av. Villazón) que vincula al municipio de Sacaba con la ciudad de Cochabamba.
En ese lugar, la Policía y las Fuerzas Armadas levantaron barricadas para evitar que los cocaleros de Chapare ingresen por segundo día consecutivo con una marcha a la urbe capitalina y luego dirigirse a la sede de Gobierno para sumarse a sectores sociales de El Alto que se movilizan en rechazo al Gobierno de transición.
El estribillo de “esta marcha es pacífica”, que coreaban los manifestantes afines al MAS, contradijo el resultado de la requisa que hicieron las fuerzas del orden, en la que decomisaron armas de fuego, bazucas caseras, dinamitas, flechas y armas blancas. En el grupo de los marchistas había mujeres y niños.
Una autoridad militar manifestó su alarma porque después del operativo fueron encontrados cartuchos de balas de fusiles máuser, calibre 765, que habrían sido disparadas en el lado de los movilizados. Una vez rebasada las fuerzas del orden, llegaron más militares, mientras que dos helicópteros sobrevolaban el lugar para identificar las zonas más altas que servían de resguardo a los cocaleros.
El comandante departamental de la Policía, Jaime Zurita, dijo que entre los arrestados figura el exconstituyente Marco Carrillo (MAS), que es sindicado de organizar e instigar los hechos violentos. En su defensa, Carrillo explicó que él se transportaba en motocicleta hacia Sacaba y al ver la tranca cerrada bordeó el lugar y fue capturado. Los arrestados fueron llevados a dependencias de la UTOP.
El Gobierno
En medio de los conflictos sociales en La Paz y Cochabamba y rodeada por las autoridades militares, policiales y los ministros de Gobierno y de Defensa, la presidenta Áñez afirmó que el Estado identificó grupos subversivos conformados por súbditos extranjeros que incitan a hechos vandálicos, como la destrucción de ductos de gas para ocasionar el desabastecimiento en algunas capitales del país.
La mandataria indicó que asumirá “medidas constitucionales” que permitan restaurar el orden público en el país y cumplir con la misión de llamar a elecciones.
