La abogada altruista recibió un reconocimiento en el Día del Voluntario en un evento realizado en Sucre y organizado por Conavol (Concejo Nacional del Voluntariado)

7 de diciembre de 2021, 8:15 AM
7 de diciembre de 2021, 8:15 AM

Leidy Miranda Valverde recibió el reconocimiento por su noble y destacada labor filantrópica al servicio de los sectores más vulnerables de Bolivia, ella es abogada y voluntaria de la Confraternidad Carcelaria Santa Cruz desde hace ocho años.  

El evento de reconocimiento a los voluntarios del país fue organizado por Conavol (Voluntariado Red Global), Cebofil (Centro Boliviano de Filantropía) e IAVE (Fundación Internacional de Voluntariado) y se efectuó en Sucre, el 5 de diciembre, el Día Internacional de los Voluntarios. Además de Miranda, fue reconocido Aminadab Flores Saavedra, también de la Confraternidad Carcelaria Santa Cruz.



La Confraternidad Carcelaria

“Es una organización sin fines de lucro. Somos un equipo de personas voluntarias que trabajamos con las cárceles con los privados de libertad y sus familias, así también con las víctimas y sus familias, aplicando la justicia restaurativa, con la finalidad de restaurar a las personas por qué de nada sirve que ellos cumplan años privados de libertad sino hay una restauración, tratamiento y rehabilitación en la conducta delictiva. En nuestro país lamentablemente la reincidencia es muy alta, es por esto que nosotros trabajamos para que sea mínima, llevamos proyectos a las cárceles para trabajar dentro y fuera con métodos de enseñanza o algún programa adecuado para poder ayudarles a encontrar trabajo y así ayudar a sus familias a mejorar su calidad de vida.

Tenemos organizaciones en Oruro, Cochabamba y Santa Cruz. Actualmente ayudamos a muchas personas dentro y fuera de las cárceles. Cada miembro de la Confraternidad Carcelaria ayuda de manera voluntaria”, explica Miranda.

La abogada realiza el seguimiento en los procesos judiciales, participa en los talleres y actividades navideñas como es el Árbol Ángel de Navidad, actividad con la que ayudan a las familias de los privados de libertad afuera, a vivir un tiempo de reconciliación y paz. También promueve terapias gratuitas que ayudan a todos los implicados en este círculo, sin discriminar a nadie.

En la Confraternidad Carcelaria apoyan 34 voluntarios y realizan actividades para todos los implicados. Entre esas diligencias se avecina la instalación del árbol navideño que denominan Ángel de Navidad, para ofrecer regalos a los adolescentes del Centro Fortaleza, la cárcel de menores de edad, así como chocolatadas en los días previos al festejo del nacimiento de Cristo.

La misma actividad la realizan con las familias de los privados de libertad de la cárcel de adultos, así les trasmiten ilusión y esperanza y los acompañan en esas fechas.

Visitamos sus casas o el hogar donde están algunos niños que son hijos de los privados de libertad y les llevamos un presente de parte de sus progenitores; por esto estamos buscando apoyo de las instituciones que deseen colaborar con esta noble labor, con lo que esté a su alcance”, expresa Leidy Miranda, la voluntaria que ha recibido recientemente un reconocimiento por su labor desinteresada.

La Confraternidad Carcelaria está ubicada entre el segundo y tercer anillo, calle Prefecto Rivas, edificio # 288, también pueden llamar al cel 721-39346, para hacer donaciones.



El voluntariado

Tiene por objetivo ayudar a las personas vulnerables y a sus comunidades. Supone un compromiso que se toma por iniciativa propia, libremente, por lo tanto, se actúa de forma desinteresada, sin contraprestación económica. Es una decisión que se toma de forma reflexiva y responsable. Establece el altruismo y solidaridad.

Miranda respecto a ello dice: “Ser voluntario no es fácil, pero no es imposible ayudar al prójimo. Aunque sea con un pan se presta un servicio sin importar a quién y sin esperar recompensa”.