¡Cuidado! Cuando las temperaturas bajan, se comienza a sufrir molestias en las zonas más expuestas. El rostro, los labios y las manos lucen una piel reseca, tirante, descamada y con grietas

29 de junio de 2022, 15:50 PM
29 de junio de 2022, 15:50 PM

Hablando técnicamente, el frío del invierno genera una vasoconstricción para minimizar la pérdida de calor al exterior, esto ocasiona que la circulación sanguínea en la piel se reduzca y reciba menos oxígeno y menos ‘alimentos’.

¿Cuáles son los efectos de todo esto? La piel se vuelve pálida, frágil y se agrieta. Y si el daño es grave o persiste, pueden aparecer eccemas o dermatitis.

Por suerte, existe gran variedad de técnicas y productos estéticos que ayudan a que la piel no sufra en exceso y así evitar posibles trastornos médicos en esta temporada.

Aspectos básicos en invierno. Aunque puede ser complicado evitar al 100% el efecto del frío, sí hay ciertas circunstancias que pueden ayudar a reducir el malestar. La prevención será especialmente necesaria en los casos de piel seca o que presenten afecciones como dermatitis atópica.

Hidratación diaria. Son ideales las cremas hidratantes con ingredientes emolientes, ceramidas, ácido hialurónico, entre otros componentes. Por otro lado, las pieles más secas, ya irritadas, deberán evitar principios activos con potencial irritante.

Como, por ejemplo, el ácido retinoico o los AHA (alfa-hidroxiácidos). En el caso de los labios, un bálsamo labial puede ayudar a evitar la irritación y descamación.

Limpieza de la piel. Hay que evitar las duchas con agua demasiado caliente y el uso de jabones fuertes que contribuyan a una mayor sequedad. Utilizar productos que no agredan la función de barrera de nuestra piel y al mismo tiempo aporten hidratación. Si no se puede evitar el uso de jabones en las manos se recomienda utilizar guantes y cremas con efecto barrera.



No estufas. Los cambios de temperatura bruscos son fatales para la piel, así que el uso de la calefacción puede empeorar la sensación de sequedad, sobre todo si son calentadores de aire o si nos ponemos en contacto directo. A la hora de protegernos no sólo debemos tener en cuenta la temperatura ambiental, sino también la presencia de aire, porque éste contribuye aún más a resecar la piel.

Sí a la protección solar. Aunque la intensidad del sol es mucho menor en invierno, los días son más cortos y pasamos menos tiempo al aire libre, utilizar foto protección sigue siendo necesario. Preferir las cremas con índices de protección alta (50+), resistentes al agua y al sudor, y aplicarlas en cantidad suficiente y cada 2 o 3 horas.

¿Te quedan dudas? Elizabeth Mansilla y su equipo de especialistas en belleza espera las consultas de las lectoras sobre los cuidados y tratamientos de la piel en invierno, contáctalos por Facebook: Elizabeth Mansilla Spa.