Moda o tendencia por la Dieta Keto
La dieta cetogénica se ha estudiado en relación con la diabetes, particularmente la diabetes tipo 2 y los beneficios son potencialmente positivos.
Con el pasar de los años se han descubierto incontables hallazgos para mejorar la salud, por tanto, todo lo que concretamos hoy con estudios y evidencia científica, el día de mañana corre el riesgo de ser diferente.
Dieta Keto, otra vez tendencia
La dieta cetogénica se ha vuelto una tendencia que no puede ser moda para todos los individuos. Inicialmente este patrón de alimentación se ha creado con el fin de mejorar las condiciones de las personas con epilepsia allá por el 1921 por el Dr. Russel Wilder. Pues, ahora más conocida como dieta Keto consiste en la reducción total de carbohidratos, basándose únicamente en el consumo de proteínas y grasas, por tanto, el cuerpo entra en un estado de cetosis, es decir, deja de utilizar el azúcar de parte de los carbohidratos como fuente de energía y crea cetonas a partir de las grasas como un PLAN B.
¿Grasas para diabéticos?
Actualmente es una fuerte tendencia optar por la dieta cetogénica para ver una rápida bajada de peso, ya que se puede comer tanto como uno quiera, siempre y cuando se restrinja el carbohidrato, pero ahora, ¿es realmente apta para todo el mundo? La dieta cetogénica se ha estudiado en relación con la diabetes, particularmente la diabetes tipo 2 y los beneficios son potencialmente positivos para aquellos que viven con esta enfermedad.
¿Funciona contra el azúcar?
El aspecto y característica principal es que la dieta mejora la sensibilidad a la insulina porque el carbohidrato es el único quien puede estimular su rápida producción. La insulina es la puerta en las células del cuerpo para permitir la entrada del azúcar y ser utilizada como fuente de energía. En la diabetes, esta puerta está cerrada y no sabe cuando abrirse.
Por tanto, se acumula el azúcar en la sangre y no puede ser usada como combustible para las actividades del día. Al no consumir el carbohidrato, el cuerpo ‘usa menos esta puerta’ y recurre a la oxidación de grasas y las famosas cetonas para suplir la función del carbohidrato. Mantiene los niveles de azúcar más estable, evitando los picos bruscos y favoreciendo un mejor control glucémico constante.
¿Ayuda a perder peso?
Cabe resaltar que, como consecuencia, lleva a la pérdida de peso también. Esencial para las personas que padecen de diabetes tipo 2 para mejorar sus condiciones y estilo de vida. El peso sí influye en la resistencia y uso de la ‘puerta insulina’. Como no todo puede ser bueno, es necesario recalcar las precauciones al momento de seguir este tipo de dieta full proteínas.
*Las personas que tienen diabetes tipo 1 o aquellas que son insulino - dependientes, pueden tener un grave riesgo de hipoglucemias, es decir, una bajada brusca de azúcar en el cuerpo, en otras palabras, en gasolina cero. Aunque es raro, las personas con diabetes tipo 1 deben tener más precaución, ya que el exceso de cetonas en sangre puede llevar a una cetoacidosis diabética, una condición peligrosa.
*Es clave que un médico o nutricionista acompañen a los pacientes que deciden hacer la dieta cetogénica para ajustar medicamentos y evitar complicaciones de la salud, sea evitando las deficiencias nutricionales.
La dieta Keto con proteínas y grasas, ¿es buena para todos? Y ahora, respondiéndonos la pregunta inicial de ¿si es realmente para todo el mundo?
Esta tendencia no es moda para todos. Existen factores sociales, culturales y personales que no hacen posible la adherencia a la dieta cetogénica a largo plazo.
Es cierto que los resultados son sorprendentes en poco tiempo, pero, ¿qué tan dispuesto está uno a sacrificar aquellas ocasiones en el cual los carbohidratos están presentes?
Aprender a comer y llevar una vida saludable haciendo parte a este grupo de alimentos es un objetivo que todos, con o sin diabetes, deberíamos interiorizar para mejorar nuestra salud.
Consejos más prácticos para llevar la Dieta Keto
- Optar por grasas saludables. Palta, aceite de oliva, frutos secos, semillas, y evita las grasas trans o hidrogenadas como los embutidos, chorizos.
- Verduras bajas en carbohidratos. Espinacas, brócoli, repollo y otros vegetales sin almidón. Comer menos papa y zanahoria.
- Proteínas moderadas. Preferir las de alta calidad, como pollo, pescado y huevos, pero en cantidades controladas, evitar excesos. De lo contrario, los riñones sufren las repercusiones.
- Tener un monitoreo constante del azúcar en sangre es clave. Lleva un control regular de la glucosa y cetonas, especialmente al inicio de la dieta, para asegurarte de que se mantengan en rangos saludables.
Receta cetogénica
Pastel de brócoli
Ingredientes
1 cabeza de brócoli, 4 huevos, 100 gr de queso fresco rallado, 7 champiñones frescos, sal, pimienta y nuez moscada al gusto, ½ taza de jamón de pavo cortado en cuadraditos.
Preparación
En una olla, cocemos el brócoli. Lavamos los champiñones, secamos y cortamos en rodajas. Escurrimos el brócoli y lo aplastamos como un puré. Batimos los huevos y mezclamos con los champiñones, el puré del brócoli y los huevos revueltos. Puede ser una opción ponerlo todo en la licuadora, excepto los champiñones y queso. Salpimentamos al gusto y añadimos a la mezcla una pizca de nuez moscada. En un recipiente para horno vertemos toda la mezcla. Opcional: colocar el queso encima o dentro de la masa. Llevar al horno precalentado a 200 grados, durante 15 minutos. Dejamos hacerse el pastel de brócoli, aproximadamente unos 15-20 minutos a 180 grados, hasta que el huevo se cocine por completo y esté el queso de encima doradito. Servir luego, calientito.