Noemí Ríos tiene su negocio consolidado

Por esas cosas de esta maravillosa y sorprendente vida se descubre sintiéndose jardinera aficionada, con un saber empírico, a fuerza de observar, preguntar, y trabajar creando plantines para arborizar y luego para jardines.

Noemí creó su emprendimiento el 2009 y lo consolidó el 2010, “surgió porque en ese tiempo hubo un auge de producir a pedido plantines de teca y serebó, a corto mediano y largo plazo”, cuenta haciendo memoria de sus inicios.

Vivero Plantines a Pedido, vio la luz a través de campañas y la reacción de los amantes de las plantas fue inmediata sobre pedidos para entrega en 30, 60 y 90 días de plantines forestales, pingo de oro, ficus (bibosi). Por ello, se eligió ese nombre y así se quedó.

Noemí Ríos Yance (44), es camireña, sus padres son Eduardo y Dorys; logró una licenciatura en Comunicación Social, pero se desempeña en lo que la apasiona, las plantas. Actualmente, se dedica a la comercialización de plantines y todo lo que necesite para un jardín o espacio verde. Vive en la urbanización Ñande Reko, ciudadela Andrés Ibáñez, junto a su esposo e hijo.

Jardinera empírica

“No soy jardinera con título, hice mis prácticas guiadas en el Museo de Historia Natural Noel Kempff Mercado, en el área de Educación Ambiental y me quedaron muchas ideas sobre la naturaleza, los bosques, los animales, lo importante que son para nuestro ecosistema y mientras más conocía, más me interesaba. Cuando se hace algo, por más sencillo que sea, hay que dar lo mejor de uno, hacerlo con pasión y eso es lo que hago cada día como jardinera empírica”. Trabaja sola, pero siempre con ayuda de personas que ha ido formando con el tiempo. Desde hace varios años ya no produce ningún plantín, sólo los comercializa y brinda asesoramiento y guía para cada necesidad de sus clientes.

¿Por qué nos atraen las plantas?

“Son seres vivos, que tienen ciclos, son terapia, paz y serenidad para muchas personas. ¿Qué fuera de nuestro planeta sin plantas? Ellas nos cuidan mientras nosotros cuidamos de ellas. Nos relajan, nos calman, y decoran. La naturaleza es sabia y perfecta. Hay flores y plantas frutales de invierno y verano. Por ejemplo, pensamientos, violetas, prímulas y lavandas son de invierno. Las ixoras, peonias, spatufilium y once horas, dan todo el año”.

¿De dónde obtiene las plantas y los insumos?

“Nuestros proveedores en su gran mayoría es gente del interior que tienen varios años produciendo en barrios alejados de la ciudad, en Montero, las Brechas, la Guardia, Samaipata, Cochabamba y lo que se nos provee de Brasil.

Es difícil de conseguir aquello que sólo existe en Europa, Canadá, Asia, hay mucha gente que cree que un vivero tiene que tener todo lo que ve o busca en Internet", contesta.

Una planta o una flor

“Si fuera una planta, sería un roble, símbolo de fuerza y justicia: y si fuera una flor, sería una orquídea, símbolo del amor, florece en cualquier condición, te transmite una sensación de purificación energética, paz y gratitud. Las orquídeas aportan alegría y optimismo al entorno. Eso me define", afirma la emprendedora.