“El Gobierno de Luis Arce ha perdido la cordura y ha encontrado en el Ministerio de Gobierno y la Policía Boliviana su brazo represor violento y criminal”, señala parte del comunicado.

16 de agosto de 2022, 10:20 AM
16 de agosto de 2022, 10:20 AM

Un ambiente de tensión y susceptibilidad se vivió la noche del lunes en las afueras de las instalaciones de YPFB, donde se desarrollaba la reunión de “socialización” del Censo de Población y Vivienda, cuando un grupo de activistas detectó la presencia de supuestos funcionarios de la Policía a bordo de un vehículo particular y en poder de un arma de aire comprimido.

La agrupación política Creemos no tardó en emitir un comunicado condenando esta situación y responsabilizando al Gobierno de Luis Arce Catacora por supuestamente elaborar un plan para generar violencia en la capital cruceña.

“El hecho registrado deja en evidencia que la reunión del INE no tenía objetivos técnicos, esta patrulla o vehículo con supuestos oficiales de civil que tenían rasgos y características que los identifica como venezolanos o cubanos, es un extremo completamente ilegal e irregular que no puede tener otra intención que no sea la de provocar actos de violencia y de enfrentamiento tratando de criminalizar la protesta pacífica y la reivindicación de la sociedad civil, incluso si esto significa cobrar vidas inocentes y enlutar a la población boliviana”, se lee en el pronunciamiento.


Horas más tarde, el comandante departamental de la Policía, Jhonny Omar Chávez, confirmó que las dos personas al interior del vehículo parqueado fuera de la reunión y que tenían un arma de fuego en su poder, son servidores públicos que cumplían labor de inteligencia, para evitar cualquier tipo de enfrentamientos. “Sus funciones son informar a las autoridades superiores; se trata de los sargentos Juan Carlos Coronel y Nils Chávez", precisó el comandante.

Sin embargo, Creemos en su comunicado afirma que el protocolo de inteligencia establece que este personal no puede tener equipo táctico ni anti motín y mucho menos armamento de grueso calibre.

“Frente a esta ilegalidad y presunto delito, lo pertinente era que los efectivos policiales presentes identifiquen a los sujetos, se haga la requisa necesaria tanto del vehículo como de los individuos. En este caso hicieron todo lo contrario retiraron el armamento y a los individuos sin dar explicación alguna”, refiere el comunicado.

“El Gobierno de Luis Arce ha perdido la cordura y ha encontrado en el Ministerio de Gobierno y la Policía Boliviana su brazo represor violento y criminal; ya no resulta suficiente tener el control del Órgano Judicial hora nos muestran que intentan cumplir sus nefastos objetivos en contra del desarrollo del país, incluso si eso significa cobrar vidas inocentes”, finaliza.